Imperio de Luz - Por Juan Pablo Donoso

Una idea que, pudiendo ser íntima y trascendente, se difumina por exceso de elementos innecesarios. Termina en territorio de nadie.

Había mucha expectación por esta película. Su director, Sam Mendes, autor de joyas previas como 1917 (2019) y BELLEZA AMERICANA (1999), incursionó ahora, por primera vez, también como guionista. Un oficio en el que deberá pulirse.

La obra se salva por la calidad de sus actores principales, por la reconstitución de época, por el buen diseño de producción aprovechado al máximo por la fotografía, y por una atmósfera humana propicia para un tema maduro y conmovedor.

Aparte de aplaudir la subtextualidad emotiva de Olivia Colman (La Favorita, 2018) y la sincera humildad de Michael Ward (Blue Story, 2019), los demás secundarios, incluyendo a Colin Firth y Toby Jones, sólo entregan una caracterización esquemática.

Nunca llegamos a comprender la bipolaridad de Hilary (Colman), ergo, solo la vemos padecer su ambigüedad afectiva. El tormento racial de Stephen (Ward) aporta poca novedad en comparación con tantos filmes previos de discriminación. Por lo tanto, el núcleo afectivo de la pareja jamás alcanza su plena catarsis: la soledad inevitable.

¿Qué estaba en Juego? Nunca lo supimos. ¿Qué nos quiso decir el autor? Tampoco. Solo pequeñas emociones cotidianas, frugales indulgencias culposas, en un cine de provincia, al sur de Inglaterra, entre empleados de vidas mínimas.

Personajes pintorescos, pero solo superficiales, como telón de fondo (Janine), o Norman (Toby Jones) que apenas alcanza a justificar su presencia en la historia. Ni siquiera Tom Brooke (Neil) que oficiaría como testigo - el Coro en una tragedia griega - tampoco logra mayor gravitación en el conflicto central (si es que lo hubiera). Prescindible.

Las penurias sociológicas y psiquiátricas, si bien cálidas, se ven distantes, como desde la vereda de enfrente.

Mendes cayó en la peor de las trampas: teniendo un dilema con muchas salidas de escape, optó arbitrariamente por las más lacrimógenas, sepultando la esencia medular del caso.

Queriendo ser sutil, quedó superflua y recargada. Tal vez como novela pudo tener más desarrollo e interés por sus personajes.

UNA SEUDO HISTORIA DE AMOR, CON EXCELENTES ACTORES, QUE NUNCA TOCÓ FONDO. DECEPCIONANTE.

Ficha técnica

Título Original: Empire of Light

2022 Drama, romance, segregación y psicosis Inglaterra, EE.UU. - 1,55 hrs. 

Fotografía: Roger Deakins 

Edición: Lee Smith Música: Trent Reznor, Atticus Ross 

Diseño Prod.: Marc Tildesley 

Actores: Olivia Colman, Micheal Ward, Colin Firth, Toby Jones 

Guionista y Director: Sam Mendes