viernes, 27 de diciembre de 2019

La posesión de Mary - Por José Blanco Jiménez

El núcleo del relato es la confesión de la sobreviviente Sarah, interpretada por Emily Mortimer, que ya ha aparecido en numerosas películas entre las que se cuentan La isla siniestra (Shutter Island, 2010) y Hugo (2011) de Martin Scorsese, las dos nuevas versiones de La pantera rosa con Steve Martin (de Shawn Levy, 2006; y Harald Zwart, 2009) y El regreso de Mary Poppins (Mary Poppins Returns, de Rob Marshall, 2018). A través de un extenso flashback, el relato se desarrolla como un diálogo entre ella y una detective (Jennifer Esposito), que quiere aclarar los hechos.

Así el espectador se entera que David (un muy desaprovechado Gary Oldman) compró un pequeño yate, de nombre Mary, que resultó estar poseído por el fantasma de una bruja representada en el mascarón de proa.

Ambos cónyuges se hicieron a la mar con sus dos hijas y un par de ayudantes, que tenían intereses sentimentales: uno pretendía a la jovencita mayor y el otro había sido amante ocasional de la mujer. Ambos empiezan a manifestar conductas criminales y la hija menor, con los dibujos que inspira el amigo secreto, presagia momentos funestos.

Para completar el cocktail de lugares comunes, se avecinan al Triángulo de las Bermudas, pierden la radio y llega un momento en que se encuentran en medio de la nada sin poder ir ni volver de y hacia ninguna parte. Y la violencia de todos contra todos explota.

La narración de Sarah choca con la mirada racional de la policía, mientras el público se deja convencer por tantas obviedades.

En fin de cuentas, una película para los que gustan del género, pero sin la categoría de Polanski o de Hitchcock.

(Mary. USA, 2019)

jueves, 26 de diciembre de 2019

Star Wars: El ascenso de Skywalker - Por José Blanco Jiménez

Es difícil mantener la promesa de no ser un spoiler. Sobre todo si no se puede explicar en qué consiste “el ascenso de Skywalker” y de por qué se cierra un ciclo iniciado hace cuarenta y dos años.

Desde que se inició la saga, han pasado tres generaciones de espectadores y el merchandising ha permitido que los personajes sean vastamente conocidos. Al punto de que, para los estrenos, muchos se presentan disfrazados incluso de protagonistas desaparecidos en la segunda trilogía (que es la primera que se conoció).

En este último capítulo, la Resistencia resiste y es un grupo de “marginales” el que sigue luchando contra el Imperio ultrapotente: Rey (Daisy Ridley), una chatarrera abandonada por sus padres en un planeta desierto por la que la Fuerza escurre de manera poderosa, Finn (John Boyega), un desertor de los Stormtrooper, y Poe Dameron (Oscar Isaac), un piloto con un obscuro pasado de traficante de especias.

El Primer Orden no pudo exterminarlos, porque Luke Skywalker (Mark Hamil) se sacrificó atrayendo hacia sí el fuego adversario y desafiando a duelo a Kylo Ren (Adam Driver), asesino de su padre Han Solo (Harrison Ford) y decidido a ser el gobernante supremo de la galaxia reemplazando al mismísimo Emperador.

Hay varios secretos que no puedo revelar (incluyendo el título de esta novena entrega) y, por lo tanto, me detengo aquí. Me reservo, eso sí, una reflexión acerca del subyacente mensaje político que ha estado presente en las cuatro décadas de esta saga.

George Lucas quería dirigir Apocalypse Now, que después estuvo a cargo de Francis Ford Coppola. Se trata de la película más crítica y real acerca de la Guerra de Vietnam, con todos sus dilemas morales y decidió utilizar parte de sus ideas para insertarlas en Star Wars. Es así como se enfrenta un ejército tecnológicamente avanzado contra rebeldes mal equipados, como los Vietcongs. Además, el comportamiento de los Stormtroopers imperiales recuerda a los Sturmtruppen alemanes de la Primera Guerra Mundial.

La “trilogía prequel”, relata el descenso de Anakin al Lado Obscuro y la ascensión de Palpatine al poder absoluto. O sea, es el típico advenimiento de un dictador y de un régimen totalitario; todo esto debido a una situación política inestable que no responde a la exigencias de la población, como ocurrió con Hitler y con ejemplos más cercanos a nuestra realidad latinoamericana.

La guerra se aplica como instrumento de inducción y de terror, a la que se acompaña la política racista contra todas las especies alienas diferentes de la humana. La Guerra de los Clones tiene como fuente principal la Guerra de Vietnam y la Era de Watergate, en las que los líderes políticos recurrieron a la corrupción y la trampa. Además Lucas se adelantó a la Guerra de Irak. Después del 11 de septiembre, la administración de Bush recurrió al miedo colectivo así como el Emperador Palpatine utilizó las Guerras Clon. Es así como incrementó el poder del Ejecutivo y también el de los Estados Unidos en el exterior.

Pero Lucas ha afirmado que también ha aprendido de la Historia: después del asesinato de Julio César, el Senado romano aceptó en el poder a su ambicioso sobrino Octavio Augusto; después de la Revolución, Francia aceptó a Napoleón Bonaparte. Por mi parte, recuerdo que Erich Fromm, en 1941, escribió acerca de El miedo a la libertad (Escape Fromm Freedom).

La saga principal ha terminado. Ahora proseguirán los spin off.

(Star Wars: The Rise of Skywalker. USA, 2019)

Cats - Por Juan Pablo Donoso

Nueva versión fílmica del clásico musical de Andrew Lloyd Webber que permaneció 37 años en los mejores teatros del mundo.

Quienes vimos el espectáculo teatral estrenado en 1981, y luego la película homónima de 1998 - dirigida por David Mallet - consideramos injusto el rechazo de la crítica y el público a esta nueva realización de Tom Hooper (Los Miserables, El Fantasma de la Ópera, El Discurso del Rey y La Chica Danesa, entre otros éxitos).

El filme de 1998 tuvo excelente acogida mundial: respetó la música, los textos, las coreografías, buenos cantantes y los mejores vestuarios y efectos especiales de esa época.

Este nuevo montaje - ahora asesorado y coproducido por el mismo Lloyd Webber - conserva las mismas virtudes, y enriquecidas en lo actoral y tecnológico.

Entonces, ¿qué más pedirle y esperar de esta nueva versión?

Para el teatro Lloyd Webber adaptó la colección poética de T.S. Elliot (Premio Nobel 1948) titulada “Old Possum's Books of Practical Cats”. Una fantasía literaria, de poemas breves, con facetas diversas de la psicología gatuna, y de la manera en que socializan entre ellos. Los dedicó a sus ahijados.

Es así como la historia comienza cuando unos adultos se deshacen de una gatita blanca lanzándola en el botadero de un callejón oscuro lleno de gatos.

La hermosa minina, llamada Victoria, deberá tímidamente incorporarse al ámbito de los callejeros, hasta lograr que la acepten. Su rol lo interpreta Francesca Hayward, bailarina Principal del Royal Ballet del Londres. Bella y eximia.

Entre los felinos que la ponen a prueba, conoce a Grizabella, una gata vieja, fea y enferma, que tuvo un pasado esplendor. A ella le corresponde la canción más famosa de la obra - Memories - encarnada por Jennifer Hudson, actriz de color ganadora del Grammy y compositora con record de ventas.

La trama es sencilla. Hay un concurso entre los gatos por el premio de morir, ascender al cielo, y renacer con más belleza y sabiduría.

Es por ello que el grueso del relato sea una galería de felinos y felinas diferentes demostrando cada uno sus méritos por medio de bailes, cantos y triquiñuelas.

Lo fascinante está en la diversidad de vestuarios gatunos, maquillajes, danzas en grupo e individuales, para resaltar a los variados especímenes. Así vemos al Mago (Laurie Davidson), a la gorda retozona (Rebel Wilson), al viejo actor Gus (Ian McKellen), a la anciana reina Deuteronomia (Judi Dench), a Taylor Swift como la coqueta Bombalurina, y al infaltable proxeneta seductor Macavity (Idris Elba de luminosos ojos verde-calypso), y tantos más.

Esta es la anécdota, y ellos son sus pintorescos personajes. En el teatro disfrutamos del panorama amplio. En la película captamos también múltiples primeros planos de sus expresiones. ¿Por qué funarla?

LA CLÁSICA TRAGICOMEDIA GATUNA RESPETANDO LA MUSICA, LOS TEXTOS, LOS BAILES, CON ACTORES CONSAGRADOS Y TECNOLOGÍA DE PUNTA.

Ficha técnica

Fantasía musical tragicómica Universal y Andes Films EE.UU., Inglaterra - 1,42 hrs. 
Fotografía: Christopher Ross 
Edición: Melanie Oliver 
Música: Andrew Lloyd Webber 
Diseño Prod.: Eve Stewart 
Guion: T.S. Eliot (poemas), Lee Hall, Tom Hooper, Andrew Lloyd Webber 
Actores: Francesca Hayward, Taylor Swift, Idris Elba 
Director: Tom Hooper

Jumanji: el siguiente nivel - Por Juan Pablo Donoso

De todas las secuelas anteriores, sin duda esta es la más larga y espectacular.

Ahora se incorporan Danny de Vito y Danny Glover, dos ancianos achacosos que son arrastrados por los jóvenes a incursionar en las locas peripecias del juego Jumanji.

Se trasladan a mundos silvestres de África en busca de un talismán con poderes mágicos robado tiempo atrás por un canalla feroz y poderoso.

Nuestros amigos se transforman en los personajes del juego, rejuveneciéndose, cambiando de raza y hasta transformándose en caballo, entre muchas otras cosas.

En los combates los matan varias veces, pero siempre vuelven a caer estrepitosamente del cielo para seguir adelante con la gesta.

En un video juego puede suceder hasta lo más insólito con tal de seguir luchando.

Lo que enriquece esta secuela es la simpatía de todos sus personajes, el constante humor, y la mezcla de jóvenes con abuelos, todos viviendo la misma disparatada aventura.

Alarde de efectos especiales para lucimiento de sus técnicos especialistas. Lo más admirable es la secuencia de mandriles siguiendo a los personajes por los puentes colgantes. Esta sola escena merecería - ¡al menos! - una mención en la entrega de Oscares. Pocos años atrás se lo habrían ganado, pero les ha salido mucha competencia en el último tiempo.

Compiten en histrionismo Jack Black (Escuela de Rock 2003 y King Kong 2005) con el negrito Kevin Hart (Un Espía y Medio 2016), incorporando esta vez como la exótica Ming a una joven oriental que va en ascenso: Akwafina (La Despedida 2019, tragicomedia comentada hace poco en estas páginas).

Quien desee pasar dos horas compartiendo con estos amigos las más locas aventuras de un video-juego, saldrá muy satisfecho. Y más aún si es fan del invencible Dwayne Johnson, ex La Roca para los aficionados a la lucha libre.

GRANDIOSA SECUELA, CON EXIMIOS EFECTOS ESPECIALES, Y MUCHO HUMOR.

Ficha técnica

Título Original: The Next Level 
 Acción, aventura, comedia EE.UU. - 2,03 hrs. 
 Fotografía: Gyula Pados 
 Edición: Steve Edwards, Mark Helfrich, Tara Timpone 
 Música: Henry Jackman 
 Diseño Prod.: Bill Brzeski 
 Guion: Jake Kasdan, Jeff Pinkner 
 Actores: Dwayne Johnson, Jack Black, Kevin Hart 
 Director: Jake Kasdan

La Posesión de Mary - Por Juan Pablo Donoso

Una película que naufraga antes que el yate de la historia.

Aunque el tema se ha tratado muchas veces, con estos actores y personajes más profundos pudo ser un relato provocativo de terror y misterio.

Pero nada de eso ocurre. Es previsible desde el comienzo y los diálogos son obvios e inútiles.

El caso de una familia que, embarcada en un yate viejo llamado Mary, comienza a ser poseída por espíritus malignos del mar, daba pie para que lo inefable se apoderara gradualmente de cada uno según sus rasgos psicológicos.

Pero con una dirección así de errática, en que las cosas empiezan a suceder sin tratamiento de atmósfera, nos distancia de los personajes y cada vez nos importa menos su destino.

Uno se pregunta si por pagar a tan famosos actores como Gary Oldman y Emily Mortimer (El Regreso d Mary Poppins 2018) los realizadores debieron sacrificar un mejor guionista o terminar la cinta de cualquier manera.

Para mantenernos a flote con un forzado terror echan mano a “screamers” baratos (súbitas imágenes horribles) y con estruendos musicales que nos pillan de sorpresa para que saltemos en la butaca.

¡Qué diferencia con el suspenso sutil de Un Cuchillo en el Agua (1962) de Polanski, también con sólo 3 personas en un yatecito, o el espesor atmosférico tejido paso a paso por Kubrick en Ojos Bien Cerrados, en que -aparentemente - nada está sucediendo!

Y para colmo, cuando ya nada nos importa del drama gratuito en pantalla, deciden terminar la película con una sorpresa aún más desagradable y espuria.

UNA DESPERDICIO DE BUENOS ACTORES. PUDO TENER AL MENOS UN SUSPENSO TRASCENDENTE.

Ficha técnica


Titulo Original: Mary Horror 
BFDistribution EE.UU. - 1,24 hrs. 
Edición: Jeff Betancourt 
Música: The Newton Brothers 
Diseño Prod.: Kara Lindstrom 
Guion: Anthony Jaswinski 
Actores: Gary Oldman, Emily Mortimer, Manuel Garcia-Rulfo 
Fotógrafo y Director: Michael Goi

miércoles, 25 de diciembre de 2019

Entre navajas y secretos - Por José Blanco Jiménez

Agatha Christie dejó una vara muy alta en el género policial. Es así como Rian Johnson (guionista, entre otras cosas, de algún episodio de Star Wars) resolvió escribir y dirigir un argumento de ese tipo con todas sus características más precipuas, a partir del viejo tema de “Se ha cometido un crimen en la casa de Lord James”, como reza la conocida canción de Mario Clavell.

Aclarado este dato objetivo, es fácil sintetizar el relato: un escritor famoso y millonario (Christopher Plummer) muere con la garganta cortada, rodeado del típico nido de víboras” que esperan hacerse de su fortuna a través de la herencia.

El reparto es sensacional (Jamie Lee Curtis, Michael Shannon, Don Johnson, Toni Collette, Chris Evans, Michael Shannon) y todos son sospechosos. A los parientes hay que agregar a la encargada de cuidar al viejo: la cubanita (con todo cariño) Ana de Armas, que ya se lució como la virtual Joi en Blade Runner 2049 (de Denis Villeneuve, 2017).

Y se supone que el protagonista es Daniel Craig, que no es un gran actor y le costó bastante meterse en el rol de James Bond.

Parece que le va a costar mucho más deshacerse de él. No le creí en momento alguno el ser un detective de nombre y apellido franceses (Benoit Blanc). Para interpretar a un Hercule Poirot se requiere de un Albert Finney o de un Peter Ustinov y ni siquiera Kenneth Branagh fue capaz de replicarlo en su Murder on the Orient Express (2017) con un absurdo “moustache”.

Servida esta “mesa del delito”, el espectador puede empezar a descartar responsables, mientras va descubriendo que todos tenían algún motivo para desear la desaparición del occiso. ¿Qué más se puede pedir?

Tal vez un guión más consistente, porque los miembros del reparto tienen poquísimos elementos para desarrollar sus personajes. Por eso, la película resulta entretenida, pero no interesante al ciento por ciento.

(Knives Out. USA, 2019)

martes, 24 de diciembre de 2019

Los Dos Papas - Por Carlos Correa

Inspirada en hechos reales, esta película del director brasileño Fernando Meirelles -“Ciudad de Dios”- se interna en uno de los sucesos más relevantes para la Iglesia Católica en siglos. En febrero del año 2013, el Papa Benedicto XVI -el alemán Joseph Ratzinger- renunció a su cargo, algo tan inesperado y fuera de lo común que no se había visto en casi 600 año. Este hecho sorpresivo y radical obligó una nueva elección y el Cónclave eligió como nuevo Pontífice al argentino Jorge Mario Bergoglio, entonces Cardenal Arzobispo de Buenos Aires.

El guion elaborado por Anthony McCarten es muy interesante y ameno. Mezclando historia, especulaciones y aquello que podría llamarse “intrigas vaticanas”, el relato gira entorno a una ficticia visita del Cardenal Bergoglio al Vaticano hacia fines de 2012 para entrevistarse personalmente con el Santo Padre y conseguir de él la aceptación de su renuncia ya presentada por escrito a pesar de no haber cumplido aún la edad de retiro de los obispos, es decir 75 años.

La caracterización de la historia recae en dos actores que llenan la pantalla con su carisma y solidez. Jonathan Pryce, quien además se parece bastante físicamente, interpreta a Bergoglio y Anthony Hopkins a Benedicto XVI. Ambos realizan un trabajo de estupendo, imprimen detalles que reflejan una parte de la personalidad de sus representados gracias a la solidez de sus gestos, tonos de voz y miradas, con diálogos certeros y precisos. Meirelles sabe sacar partido a sus actores y filmar estos encuentros. Su uso de primeros planos destaca muchísimos detalles, la movilidad inquieta de su cámara se enfoca en incertidumbres y dudas, todo con un excelente trabajo de fotografía que realza las locaciones con recreaciones muy convincentes de los rincones vaticanos y sus entornos.

La cinta presenta una mirada que tal vez exagera algunas de las características de sus protagonistas. Por una parte, Benedicto XVI es presentado como una persona solitaria, en extremo conservadora, apegada a normas y tradiciones que no puede evadir. Por la otra, Bergoglio es alguien que transita por un camino rupturista de aquellos lejanos formalismos, con autenticidad y gestos que desconciertan a sus interlocutores. Ambos son presentados en veredas opuestas lo que también se refleja en las opiniones que expresan sobre temas de actualidad eclesial como el celibato, la comunión a los divorciados, la homosexualidad y tantos otros.

El relato resulta entretenido y sin pausas. El peso dramático lo mantienen ambos protagonistas durante casi todo el metraje y solo en el caso del Cardenal argentino observamos una caracterización del tiempo en que era un joven sacerdote en una época crítica cuando, durante la dictadura militar, desempeñaba el cargo de superior de la Compañía de Jesús en su país.

“Los Dos Papas” es un acierto desde muchos puntos de vista. La polarización asumida por Fernando Meirelles ayuda al relato pues amplifica el conflicto. Las actuaciones personifican a ambas figuras de manera vibrante, usando un tono más cercano a la comedia cuando el drama amenaza con tomarse la historia. La simpatía de los dos actores y una química natural entre ellos permite alcanzar un alto vuelo durante varios momentos de sus múltiples encuentros. Así, la cinta motiva al espectador a profundizar para formarse su propia opinión pues el Papa Francisco está plenamente activo y Benedicto XVI aún vive pese a su avanzada edad y delicado estado de salud. Conocerlos un poco más puede ser un desafío que comience con esta película para alguien que no conoce demasiado y no es cercano a la Iglesia. Para los católicos, una mirada fresca y diferente como esta, ofrece un ángulo que bien vale la pena explorar para recordar momentos importantes de los últimos años y también para acercarse a ambas figuras desde otra perspectiva, tal vez caricaturizada pero también más humana.

Ficha técnica  

Título original: The Two Popes
Año: 2019
Duración: 126 minutos
País: Reino Unido
Productora: Coproducción Reino Unido-Italia-Argentina-Estados Unidos; Netflix. Distribuida por Netflix
Género: Comedia. Drama | Religión. Basado en hechos reales
Guion: Anthony McCarten
Música: Bryce Dessner
Fotografía: César Charlone
Reparto: Jonathan Pryce, Anthony Hopkins, Juan Minujín, Cristina Banegas, Sidney Cole, Luis Gnecco, Federico Torre, María Ucedo, Thomas D Williams, Pablo Trimarchi
Dirección: Fernando Meirelles

jueves, 19 de diciembre de 2019

Star Wars: El Ascenso de Skywalker - Por Carlos Correa

No es sencillo escribir sobre Star Wars. Y no es por la calidad de la producción, o la siempre difícil comparación con la trilogía original de George Lucas, o los nuevos personajes, historias y universos creados desde que Disney tiene los derechos exclusivos de la franquicia, o por el estilo de J.J. Abrams, alabado por algunos y criticado por otros. La verdad es que la dificultad radica en mi propio compromiso emocional con una historia que me acompaña hace 42 años y que hoy concluye, al menos formalmente, en su diseño original de tres trilogías.

“El ascenso de Skywalker” es el Capítulo IX de una saga que marcó mi generación y por cierto a muchas otras. Ahora, al completarse con la pieza que faltaba para cerrar el ciclo, podemos tomar distancia, analizar en perspectiva y valorar en forma integral lo que hemos podido observar durante años y que posiblemente nunca dejaremos de tener presente.

No se trata de la historia de este capítulo en particular ni de los personajes, de los nuevos que recién se incorporan o de quienes ya nos han dejado. La sustancia, lo medular es aquello que sucede conmigo desde el primer acorde musical y las letras inclinadas que forman parte de una obertura que es ya clásica. Lo que sucede que me toca la fibra, me despierta recuerdos de infancia y hace que mis emociones broten sin contención. Tal vez es por ello que agradezco la oportunidad de disfrutar “Star Wars”. Dejo que fluya naturalmente, me entrego al relato y a las andanzas espaciales para volver a ser ese niño de 8 años que vio el Episodio IV cuando se estrenó en el Cine Centenario de La Serena en 1977 y que dio inicio a este universo.

Volviendo a la película, las cosas están así. Kylo Ren -Adam Driver- líder supremo de las fuerzas, viaja al planeta Exogol gracias al dispositivo Sith Wayfinder -hay solo dos y el otro está extremadamente oculto-, para enfrentar a Palpatine -sí, el mismísimo Ian McDiarmid-, el poderoso Emperador de la Primera Orden y que planea la realización de un ataque aniquilador a gran escala con una flota impresionante de destructores. Por su parte, la resistencia liderada por la Generala Leia Organa -gran homenaje a Carrie Fisher-, intercepta información sobre el viaje de Kylo. Leia dispone una misión liderada por Rey -Daisy Ridley-, Finn -John Boyega- y Poe -Oscar Isaac-, cuyo objetivo es ubicar el Wayfinder para luego llegar a Exogol y destruir la amenaza. Las peripecias se suceden en forma continua, la acción es por momentos frenética y la tensión nos mantiene alertas durante todo el metraje. El regreso de viejos personajes, conocidos en las anteriores entregas, nos conectan con esta trilogía final y otros, iconos ya a esta altura, con el resto de la histórica saga, manteniendo siempre a la vista las vertientes y nueva savia de los jóvenes héroes.

“El ascenso de Skywalker” es un épico final para Star Wars. Conmueve porque apela a la emocionalidad de toda esta larga historia permitiendo que afloren rápidamente los recuerdos. En varios pasajes nos reflejamos en los personajes, hacemos nuestro el valor y coraje de la resistencia que transforma esta guerra desigual en un desafío esperanzador. Esta lucha contra el lado oscuro de la fuerza -el mal encarnado-, que por años han liderado los Jedi, la asumimos empáticamente y tal vez la llevamos a la vida diaria, a lo que sentimos o tal vez vivimos en nuestros entornos. La unidad que se logra con “la fuerza” forma una familia llena de valores; lealtad, amor, comprensión, contención, arrojo y valentía surgen espontáneamente; se transforman en caminos y rumbos a imitar y seguir.

La dirección de J.J. Abrams no deja nada al azar. Los escenarios, las coreografías, las batallas, los efectos especiales, todo está en su lugar y al servicio de un guion firmado por él junto a Derek Connolly, Colin Trevorrow y Chris Terrio.

¡Qué decir de la música! esencial y fundamental, núcleo del relato y una vez más a cargo del maestro John Williams. Escribo estas líneas escuchando y gozando los detalles de la banda sonora con los que me vuelvo a encantar. Esta gran “ópera espacial”, repleta de motivos, armonías, explosiones de los bronces, con percusiones arrebatadas y melodías inconfundibles, desarrolla una partitura inseparable de la imagen, con vida propia y que tal vez es de los elementos más logrados del filme, algo que ya es característico en estas películas.

Star Wars llega a su fin, al menos en lo que respecta al diseño original de sus tres trilogías. Ahora el desafío tal vez sea continuar la historia con nuevos bríos, nuevos personajes, nuevas aventuras que se desprendan de este cuerpo vital, de esta idea que tiene mucho que entregar y que está totalmente abierta a la imaginación de creadores y guionistas para entretener y emocionar a más generaciones. Y como no es bueno hacer anticipos, solo concluyo estas palabras señalando que hay muchos detalles presentes en la cinta que tal vez en una primera lectura pasen muy rápido. Yo, al menos, quiero verla de nuevo para apreciar con más calma varios de ellos, disfrutar aún más con algunos retornos y “cameos” -físicos y también de voces-, y escuchar nuevamente la música que hace de Star Wars una experiencia mágica y única.

Ficha técnica

Título original: Star Wars: The Rise of Skywalker
Año: 2019
Duración: 142 minutos
País: Estados Unidos
Productora: Lucasfilm / Bad Robot / Walt Disney Pictures
Género: Ciencia ficción. Fantástico. Aventuras. Acción | Aventura espacial. Secuela. Star Wars
Guion: J.J. Abrams, Chris Terrio (Personajes: George Lucas)
Música: John Williams
Fotografía: Daniel Mindel
Reparto: Daisy Ridley, Adam Driver, John Boyega, Oscar Isaac, Domhnall Gleeson, Kelly Marie Tran, Joonas Suotamo, Ian McDiarmid, Carrie Fisher, Keri Russell, Billie Lourd, Lupita Nyong'o, Naomi Ackie, Richard E. Grant, Billy Dee Williams, Anthony Daniels, Dominic Monaghan, Mark Hamill, Matt Smith
Dirección: J.J. Abrams

Negra Navidad - Por Juan Pablo Donoso

Una pobre película que nunca se define entre ser de terror, suspenso o panfletariamente feminista.

La homónima de 1974, con Olivia Hussey y Keir Dullea, quedó estupenda y se transformó en “culto”. Luego vinieron nuevas versiones - 2006 y 2016 - cada vez peores. Esta ya colmó el vaso.

¿Para qué insisten en rehacerlas?

La única razón pareciera encerrar un mensaje ciego contra el machismo, en general. Pero resulta tan burda que ni siquiera plantea una hipótesis a favor del género femenino.

Lo que comienza con buena fotografía en un internado universitario de EE.UU., da origen a una sucesión de asesinatos de alumnas por compañeros encapuchados.

Lo más ridículo es que la estatua del fundador de la Universidad, un tal señor Hawthorne fallecido 100 años antes, chorrea un líquido negro viscoso por los ojos, y en torno a él existe una confraternidad de estudiantes masculinos que se dedican a violar compañeras y a matarlas. El líder es un antiguo Profesor de literatura descaradamente misógino (Cary Elwes - El Juego del Miedo 2007).

Las muchachas sobrevivientes cometerán incontables imprudencias exponiéndose cada vez más a ser masacradas.

Si la guionista April Wolfe y la directora Sophie Takal pretendieron usar este argumento para ensalzar el feminismo lo confunden con la más torpe expresión de misoandria: despreciar al varón como sexo y con ello todo lo considerado como masculino.

Además de ponerse cada vez más absurda hacia el final, es lamentable que la talentosa Imogen Poots ( Exterminio 2- 2007 y Green Room - 2015) protagonizara este panfleto fallido.

NI BUEN TERROR NI SABIO FEMINISMO. UNA TORPE REALIZACIÓN. NI SIQUIERA ES UNA SÁTIRA.

Ficha técnica


Título Original: Black Christmas 
Terror, misterio, feminismo Andes Films Nva.Zelandia, EE.UU. - 1,32 hrs. 
Fotografía: Mark Schwartzbard 
Edición: Jeff Betancourt 
Música: Brooke Blair, Will Blair 
Diseño Prod.: Mark Robins 
Guionistas: Sophia Takal, April Wolfe 
Actores: Imogen Poots, Cary Elwes, Lily Donoghue 
Directora: Sophia Takal

Los Disidentes - Por Juan Pablo Donoso

Tragicomedia política que nos apasiona desde el comienzo por la pintoresca - y a la vez sincera - caracterización de todos sus personajes tan judíos.

Con este filme se inauguró este año en Chile el Festival SERET de nuevas películas de Israel.

Su tema es la pugna entre ortodoxos sefaraditas versus eskenazis dentro de la misma sociedad. Los primeros se sienten postergados por el poder político de los otros, incluyendo a sus sapientes rabinos viejos.

El conflicto se inicia cuando la hija adolescente de Yaakov Cohen - excelente alumna - es expulsada del colegio eskenazi por llevar vestuario menos riguroso que sus compañeras.

Cohen, sefaradita, dueño de una pequeña imprenta, además del incidente con su hija, pierde clientes por ser levemente menos fundamentalista que sus vecinos.

Angustiado por tamaña discriminación entre los mismos ortodoxos, concibe la idea de crear un nuevo partido político-religioso sefaradita para participar en los comicios municipales.

Poco a poco, con enorme dificultad, va reclutando amigos, conocidos y votos, para al menos tener derecho a levantar la voz en público.

Lo acompañamos en una tarea titánica en que, incluso, recluta a un viejo rabino sefaradí. Es en este recorrido buscando adeptos donde disfrutamos conociendo personajes - hombres y mujeres - cuyos rostros y reacciones, en pleno 1983, son similares a los de tradición milenaria.

Con hermosas imágenes de interiores y calles de Jerusalén el director de fotografía, Yaron Scharf, y el editor Arik Lahav-Leibovich, nos sumergen con ritmo ágil en aquel mundo que nos resulta familiar y distante a la vez.

El director y guionista Eliran Malka establece un paralelo retórico entre el empeño apasionado de Yaakov y el Moisés bíblico. Uno por liberar a su comunidad del abuso político de los eskenazis, y el otro por salvar a su pueblo de la opresión egipcia faraónica.

Cohen hasta debe luchar contra el tartamudeo, como Moisés, y valerse del discurso de sus compañeros para enfrentar a los poderosos.

El fruto de la gesta fue el nacimiento del Partido Shas, cuya humilde convocatoria electoral en un Municipio, captó a tantos ciudadanos que llegó a ocupar un sitio en el Parlamento de la nación.

Admirable actuación, en especial de Shuli Rand, como el burdo pero iluminado Yaakov, y del resto de la galería de personajes típicos tan bien seleccionados por el director Milka.

Un retrato satírico de cómo juegan sucio los políticos de todas partes. Una denuncia dolorosa a la ingratitud que reciben los que dan su sangre por una causa noble, y de cómo hasta los más cercanos son capaces de traicionarlo por la sed de poder y figuración.

UNA DRAMA SEMI-REAL NARRADO EN TONO SATÍRICO SOBRE LA DISCRIMINACIÓN POLÍTICA EN ISRAEL.

Ficha técnica

Título Original: Ha-Bilti Rishmi'im - The Unortodox 
Tragicomedia, historia Embajada de Israel Israel - 1,32 hrs. 
Fotografía: Yaron Scharf 
Edición: Arik Lahav-Leibovich 
Música: Ophir Leibovitch 
Diseño: Ido Dolev Actores: Shuli Rand, Yoav Levi, Shifi Aloni 
Guionista y Director: Eliran Malka

Más que Miel - Por Juan Pablo Donoso

Este documental debiera exhibirse en todos los colegios y universidades del mundo, sin importar la edad de los alumnos.

Más de 6 Premios Internacionales.

“Si desaparecieran las abejas del planeta, a los humanos sólo les quedarían 4 años de vida”. Albert Einstein

Un recorrido a fondo por las grandes colonias apícolas de Suiza, California, China y Australia.

Nos interna en los panales - como tal vez nunca se ha hecho en cine - revelando hasta los más mínimos detalles de aquel universo viviente. ¡Qué gran uso de microscopios y lentes macros de filmación!

Sin embargo, ese prodigio de cómo las flores se abren para que las abejas liben en ellas su néctar, para después llevar en sus patas el polen a fertilizar otras plantas, y así mantener a la naturaleza dando frutos y multiplicándose por millones de años,… está a punto de extinguirse.

Los insectos vuelven a sus panales, alimentan a la reina y a los zánganos para que, tras un vuelo nupcial, la soberana deposite miles de huevos de donde nacerán las obreras incansables de reinos futuros.

Los antiguos habitantes de los Alpes suizos, sin máscaras ni guantes de protección, cultivaban con inmenso cuidado y amor a estas criaturitas de las cuales obtenían la miel más sabrosa y alimenticia.

Era una cadena ancestral de cuidados mutuos, que ensamblaban los ciclos de fecundidad vegetal con las danzas eróticas en los cielos, para obtener de las abejas la sensualidad reproductiva de los seres humanos.

Junto con presenciar esta sublime coreografía, el documental nos revela cómo llega la codicia comercial a los campos, fumigando con veneno las plantas, e intoxicando a cada abejita que lleva la muerte a su panal y contagia a la colmena, hasta extinguirla por completo.

Es como una serpiente que se come su propia cola, eliminándose a sí misma y a su procreador.

Y de cómo se desquita la madre naturaleza generando abejas asesinas para restituir el ciclo vital, aún a costa de exterminar a otras criaturas, incluyendo a las personas.

Su guionista y director - el suizo Markus Imhoof (El Bote está Lleno 1981 - El Dorado 2018) - ha hecho de la ecología su baluarte de lucha, y en cada minucioso documental penetra con su cámara hasta el útero de la Tierra para esgrimir su denuncia bioética.

INELUCTABLE DENUNCIA ECOLÓGICA, HERMOSA, PROVOCATIVA E IMPACTANTE. ESTUPENDO DOCUMENTAL.

Ficha técnica


Título Original: More Than Honey 
Documental ecológico Suiza, Alemania, Austria - 1,35 hrs. 
Fotografía: Attila Boa, Jörg Jeshel 
Edición: Anne Fabini 
Música: Peter Scherer 
Diseño Prod.: Max Linder 
Testimonios: Fred Jaggi, Randolf Menzel, John Miller 
Guionistas: Markus Imhoof, Kerstin Hoppenhaus 
Director: Markus Imhoof 
Goethe Institut, Ciclo Ecológico

sábado, 14 de diciembre de 2019

Historia de un matrimonio - Por Carlos Correa

Los procesos de ruptura de una pareja son siempre dolorosos y complejos por lo que muchas veces al observarlos en una película no permiten acercarse a una realidad difícil de describir y también de entender si no se ha vivido. Por ello, lo que hace el guionista y director Noah Baumbach con “Historia de un matrimonio” es notable. Logra desarrollar un relato profundamente emotivo y real, cuyo resultado es desgarrador.

Charlie -Adam Driver- y Nicole -Scarlett Johansson- son una pareja de artistas. Su vida gira en torno a las artes escénicas: él un talentoso y exitoso director de teatro, ella una bella y versátil actriz cada vez más reconocida. Se conocieron compartiendo los mismos intereses, se casaron, tuvieron un hijo y su vida se ha desarrollado por casi 10 años entre ensayos, funciones y su hogar en Nueva York. Podríamos, con estos antecedentes, caer en el “cliché” de decir que son una pareja normal, sin embargo la realidad dice otra cosa. A pesar de unos profundos y sentidos escritos donde cada uno reconoce lo mejor del otro, aquello que le encanta y por qué se enamoraron, se ven enfrentados a sus diferencias y con ello se precipitan al fin de su relación.

Baumbach escribe un guion estupendo, repleto de contenido y detalles. Justamente por ello es sumamente exigente. Hay mucho texto, muchos niveles, variadas lecturas y sub lecturas, por lo que los actores deben esforzarse al máximo. Secciones del relato corresponden a monólogos, otras a discusiones fuertes que, sin caer en la violencia física, son en extremo hirientes. Los dos protagonistas, Scarlett Johansson y Adam Driver logran un realismo conmovedor con sus actuaciones. No solo viven sus personajes, sino que ellos viven en sus cuerpos y mentes todo el tiempo. Ante este desafío a gran escala, el talento de ambos arrasa con un trabajo que será reconocido y recordado por mucho tiempo.

La cinta mantiene una tensión emocional permanente. Por instantes agobia, porque es imposible sustraerse a lo que sienten y expresan Nicole y Charlie. El director Noah Baumbach filma delicadamente cada escena, con el tiempo y el espacio para que la acción se desarrolle con su propio ritmo, con sus pausas y con dinámica cuando así lo requiere. Para ello cuenta con un reparto de lujo que además incluye a la cada vez más vibrante Laura Dern interpretando a Nora Fanshaw, la estilosa abogada de Nicole, y al carismático Ray Liotta como Jay, su contraparte jurídica.

“Historia de un matrimonio” llega directo a la emoción. Se inscribe con letras mayúsculas dentro de los relatos más directos sobre conflictos de pareja. Además tiene una virtud aún más interesante. Genera reflexiones posteriores, se sigue recordando por días y junto con ello vuelven las escenas, los diálogos, las situaciones y nuevas emociones. También surgen preguntas, muchas preguntas… ¿Qué sucedió, cuándo? ¿Qué no vimos, qué no hicimos? ¿Por qué pasó? ¿En qué nos equivocamos? ¿Cuándo nos perdimos? Todas son preguntas abiertas que buscan alguna respuesta en momentos que tal vez ya sea demasiado tarde…

Punto especial para “Being Alive” la canción del musical “Company”, de George Furth y Stephen Sondheim y que casi al finalizar la cinta es cantada por Charlie en un bar, rodeado de sus amigos y actores de la compañía. Su sentida interpretación enmarca muy bien la sensación que queda -y es para ambos- al final de un proceso tan angustiante como devastador; un juicio de divorcio que les daña profundamente y que deja un vacío muy difícil de llenar. Mirar hacia adelante en un momento así se hace cuesta arriba, se ve como una montaña casi imposible de subir, sin embargo existe algo fundamental para poder volver a creer y sentir; aquello es tomar verdadera conciencia de “estar vivo”

Ficha técnica

Título original: Marriage Story
Año: 2019
Duración: 136 minutos
País: Estados Unidos
Productora: Netflix / Heyday Films. Distribuida por Netflix
Género: Drama | Comedia dramática. Teatro
Guion: Noah Baumbach
Música: Randy Newman
Fotografía: Robbie Ryan
Reparto: Scarlett Johansson, Adam Driver, Laura Dern, Azhy Robertson, Alan Alda, Julie Hagerty, Merritt Wever, Mary Hollis Inboden, Amir Talai, Ray Liotta, Wallace Shawn, Emily Cass McDonnell, Matthew Maher, Ayden Mayeri, Kyle Bornheimer, Mark O'Brien, Gideon Glick, Brooke Bloom, Matthew Shear, George Todd McLachlan, Annie Hamilton, Juan Alfonso, Justin Claiborne, Mickey Sumner
Dirección: Noah Baumbach

viernes, 13 de diciembre de 2019

Doctor Sueño - Por Jackie O.

“De lo que fue un descenso a la locura, pasamos a un asunto paranormal”

Stephen King en el año 2013 decidió lanzar lo que sería la continuación de su exitosa obra “El resplador” de 1977.

Y al saber que se pasaría a la pantalla grande, la locura se desató. Lamentablemente, y aunque las comparaciones son odiosas, quedó por debajo de su antecesora.

La película arranca con escenas de “El Resplandor” para poder recordar hechos anteriores, y también escenas nuevas. Pero no extracto sacados de la película original, si no con nuevos actores relativamente parecidos.

Conocemos al hijo de Jack Torrance, Danny, quien ya de adulto y con sus fantasmas internos con los cuales debe lidiar, es un alcohólico solitario. Su “resplandor” aún lo mantiene (habilidad psíquica).

Danny decide dar un giro a su vida y se establece en un pequeño pueblo, conociendo a Billy quien lo ayuda a adaptarse al lugar, le busca trabajo e incluso lo lleva al grupo de alcohólicos anónimos. Pasan los años y su vida transcurre sin mayores problemas. Hasta que conoce a Abra, una pequeña afroamericana (aunque en el libro es rubia, pero por la inclusión hay que ser generosos) lo contacta telepáticamente por eso del resplandor, pidiéndole ayuda, (en el libro Abra es sobrina de Danny).

Dentro de la trama tenemos a los antagonistas que son un grupo que se hace llamar “Nudo”, quienes viven por años o siglos alimentándose del “vapor” (las almas) de niños con “resplandor” que van ubicando, y al atraparlos los torturan para que crezca su miedo, ya que como IT eso hace que el vapor sea más poderoso para ellos.

La película se mueve entre la vida de Danny, los poderes de Abra y Rose, la cabecilla del Nudo.

La película se alarga innecesariamente, 2 horas y media, con dos horas era suficiente ya que hay momentos muertos donde podría el doctor sueño atacarte. (Entiéndase que tal vez te de sueño).

Importante saber porque se llama doctor sueño. Es porque uno de los trabajos de Danny es en el asilo de ancianos, y ayudado por el gatito del lugar, se acercan a los viejos moribundos y Danny los consuela diciéndoles que solo pasaran a un hermoso sueño al cual no deben temer.

Veremos al Hotel Overlook?, sí, donde terminó uno termina el otro. Un hotel en ruinas pero que mantiene aquellos lugares que nos sorprendieron en la entrega anterior.

La puesta en escena estuvo bien, las escenas de fantasía o ficción estuvieron muy acordes. Las actuaciones estuvieron buenas, salvo los actores que interpretan a los personajes del pasado, eso hizo que mi nostalgia se acrecentara.

El guion adaptado no fue el esperado, y porque: porque faltó suspenso, faltó desarrollar la psicología de Danny ya que es propenso a la ira que no se vio.

Se enfocaron más en las cosas paranormales que en la psicología misma de los personajes, que lo último es lo realmente interesante.

Larga innecesariamente como indiqué.

Sé que fue un desafió para este director, pues su antecesora es un clásico espectacular. Pero de todas formas puso su mejor empeño y salió digno.

Al final igual quedas con preguntas sin responder, y tal vez sea mejor una película sobre el Hotel Overlook en sí, con su significado ambiental, personajes, etc.

En resumen, la película sale digna igual para ver, pero debes haber visto “El resplandor” antes para que enganches bien en esta.

Ficha técnica

2019 ‧ Fantasía/Suspenso 
Duración: 2h 32m
Director: Mike Flanagan
Saga: The Shining
Adaptaciones de: Doctor Sueño, El resplandor
Productores: Jon Berg, Trevor Macy
Diseño Prod.: Maher Ahmad, Patricio M. Farrell 
Actores: Ewan McGregor, Rebecca Ferguson, Kyliegh Curran 
Editor, Guionista y Director: Mike Flanagan

Doctor Sueño - Por José Blanco Jiménez

Es difícil… ¿Qué digo? Es “imposible” igualar la calidad cinematográfica de Stanley Kubrick. A lo más se puede citarlo y es lo que consigue Mike Flanagan, acercándose eso sí mucho más al texto y estilo de Stephen King. Además no es una película claustrofóbica, sino agorafóbica con insistentes secuencias de caminos interminables recorridos por vehículos que parece que no fueran a lugar alguno.

El espectador conoce a Danny Torrance como el niño que jugaba con su triciclo en el desierto Hotel Overloock y que se encontraba, al fondo del pasillo, con las dos gemelas asesinadas. Dotado del “resplandor”, logró escapar con vida de la furia asesina de su padre. Ahora es un huérfano (su padre murió en el albergue, su madre de cáncer por culpa del tabaco), que ha sido rescatado del alcoholismo (interpretado por Ewan McGregor) y que trata de rehacer su vida en un pequeño pueblo de New Hampshire. Lo ayuda Billy (Cliff Curtis, que le encuentra alojamiento y trabajo, insertándolo en un placentero ambiente provinciano. Además de guiar el trencito del parque, pasará a trabajar como enfermero de una clínica geriátrica de pacientes terminales. Allí se gana el título de “Dr. Sueño”, porque convence a los moribundos que todos debemos morir y que la muerte es como un sueño.

Pero, contemporáneamente, el espectador sabe de dos historias paralelas. Una es la de Abra (Kyliegh Curran), una pequeña afroamericana con desarrollado “resplandor”, que se comunica con él para ayudarlo y pedir ayuda. Otra es el grupo del Nudo Verdadero (The True Knot) que – en una EarthCruiser y una Winnebago – se traslada de un Estado a otro buscando a niños con “resplandor” para asesinarlos y alimentarse de éste, conservando así su juventud por siglos. Los capitanea la sensualísima Rose the Hat (Rebecca Ferguson) que, bajo su sombrerito de copa, acoge al Mal de manera refinada y perversa. Y el público es testigo de cómo convierte a una joven desadaptada a través de un rito inquietante.

El grupo pretende apoderarse de Braga, pero Dan se interpone con la ayuda del espíritu de Dick Hallorann (Carl Lumbly), que ya le salvó la vida por tener también el “resplandor” y que le enseña a encerrar a los fantasmas en cajas de seguridad. Después de varias peripecias y enfrentamientos que no relataré, todo termina donde todo comenzó: en el hotel ubicado en las montañas de Colorado. Allí se combinan y replican, de modo un poco postizo, episodios de la primera película con nuevas situaciones.

Stephen King no estuvo de acuerdo con la película de Kubrick en 1980 (que, por lo demás, agregó una serie de mensajes crípticos que han sido variamente interpretados) e, incluso, apreció una versión televisiva de Mick Garris (1997). Muchas personas le preguntaron por años qué había sido del pequeño Danny y se decidió a escribir un nuevo volumen que lleva como título el sobrenombre que le adjudicaron.

Mike Flanagan ya había presentado a un niño con raros poderes en Somnia: Ante de despertar(Before I Wake, 2016), interpretado por Jacob Tremblay (el mismo de La habitación / Room, de Lenny Abrahamson, 2015). Aquí se trata de una niña, pero profundiza también la capacidad de penetrar en las mentes ajenas: es la temática del “sueño dentro del sueño”, que también surge en la mente del alcohólico. Ambos íncubos han sido descritos magistralmente por Edgar Allan Poe.

Veo, eso sí, un riesgo xenófobo. Los miembros de la secta (que masacran a un muchachito sin piedad) me recuerdan a los gitanos con sus modernos carromatos. ¿Se avecina una nueva ola de odio contra los nómadas indocumentados, que – según la tradición - se robaban a los niños? King plantea su temor en la novela, pero es un texto literario y merece un análisis aparte.

(Doctor Sleep. USA, 2019)

jueves, 12 de diciembre de 2019

Midway - Por Carlos Correa

Luego del ataque japonés a Pearl Harbor, las fuerzas armadas que Estados Unidos tenía en la bahía quedaron devastadas. Estaban sufriendo las consecuencias de una gran falla de inteligencia militar que no supo prever la sorpresa y poder de destrucción de la acción bélica llevada a cabo por Japón. Pero Pearl Harbor era el primer paso en la estrategia nipona que continuaba con un ambicioso plan para apoderarse de la costa oeste. Los altos mandos japoneses tenían plena conciencia que una guerra larga no les convenía, por ello el ataque debía ser frontal, rápido y aniquilador. Lo que la nación oriental pareció no contemplar fue que esta planificada acción había logrado que Estados Unidos terminara en forma inmediata su neutralidad hacia la Segunda Guerra Mundial y respondiera aun con más fuerza un ataque que los había dejado disminuidos y había hecho visible su vulnerabilidad.

“Midway” narra la historia inmediatamente posterior a Pearl Harbor. Resalta las figuras del Almirante Chester Nimitz -Woody Harrelson-, del oficial de inteligencia Edwin Layton -Patrick Wilson-, del comandante Wade McClusky -Luke Evans- y del piloto Dick Best -Ed Skrein- quienes con su arrojo y heroísmo cambiaron el curso de los hechos. Junto a ellos, muchos más oficiales y soldados no dudaron en enfrentar una situación de clara desventaja y de la que probablemente tenían mínimas posibilidades de salir airosos. Vemos temor y terror en las fuerzas, vemos humanidad y debilidad, vemos lo difícil que es sobreponerse a las pérdidas, ver morir a sus compañeros y sacar fuerzas de flaqueza desde donde no existen. Contemplamos la resiliencia en uno de sus estados más puros y observamos procesos que, como átomos aislados, al sumarse construyen una fortaleza.

Roland Emmerich filma un guion muy sólido escrito por Wes Tooke. Acostumbrado a la creación de grandes producciones -“El Día de la Independencia” y “El Día después de mañana”, entre otras-, la mano de Emmerich es firme y no escatima elementos para provocar que los sintamos en medio de lo que sucede en la pantalla. Los detalles escenográficos de las batallas aéreas, los brutales bombardeos y el caos destructivo generado por los ataques son vibrantes y llenos de tensión. Esas escenas nos aprietan contra nuestros asientos y por momentos cortan la respiración. Las secuencias, vertiginosas y llenas de realismo, son muy convincentes cada vez que se suceden. El ritmo se mantiene frenético y solo cede cuando las pausas necesarias dan paso a las conversaciones entre oficiales a bordo de grandes portaaviones y en el retrato de la escasa vida familiar que algunos tienen cuando están en tierra firme o preparando alguna nueva misión.

Los 138 minutos que tiene la cinta no se notan para nada porque literalmente pasan volando. La pluma de Emmerich también se nota en aquello pues combina muy bien los tiempos y las secuencias para no cansar y a la vez para no hacer decaer un relato que necesita siempre estar al acecho de un nuevo ataque o una nueva sorpresa.

Es imposible dejar pasar que la cinta es un homenaje a quienes participaron en la famosa batalla de “Midway”, una batalla que fue el contragolpe al desastre de Pearl Harbor. Esta vez, la previsión realizada por el equipo de inteligencia cumplió su rol -incluso desobedeciendo a Washington- y estuvo a favor de las tropas norteamericanas. Este determinante factor sorpresa gracias a una programada anticipación, dejaron a Japón debilitado obligando su retiro. Este retroceso les hizo perder de golpe las posiciones alcanzadas permitiendo el rearme de las fuerzas navales y aéreas de Estados Unidos.

Junto con el realce del patriotismo de los soldados norteamericanos al que ya estamos acostumbrados, la cinta también pone en relieve la actuación de los comandantes japoneses al mostrar su lealtad y también la forma de asumir las responsabilidades que le corresponde a la alta oficialidad en instancias como las vividas. Ejemplos de este tipo, impensables en tiempos actuales, nos hace recordar que aun en las situaciones más crueles y sin sentido que una batalla o una guerra pueda tener, hay códigos que no deben dejar de respetarse porque existe una obligación moral y ética que va mucho más allá de amigos o enemigos y que aquello también es algo que aplica de igual forma con pares y subordinados.

Ficha técnica

Título original: Midway
Año: 2019
Duración: 138 minutos
País: Estados Unidos
Guion: Wes Tooke
Música: Harald Kloser, Thomas Wanker
Fotografía: Robby Baumgartner
Productora: Coproducción Estados Unidos-China; Centropolis Entertainment / Starlight Culture Entertainment Group / The Mark Gordon Company. Distribuida por Lionsgate
Género: Bélico. Acción | Basado en hechos reales. II Guerra Mundial. Histórico. Años 40. Pearl Harbor. Cine épico
Reparto: Ed Skrein, Woody Harrelson, Patrick Wilson, Luke Evans, Aaron Eckhart, Nick Jonas, Mandy Moore, Dennis Quaid, Darren Criss, Luke Kleintank, Alexander Ludwig, Mark Rolston, James Carpinello, Tadanobu Asano, Jake Manley, Ellen Dubin, Keean Johnson, Kevan Ohtsji, Brandon Sklenar, Russell Dennis Lewis, Tyler Elliot Burke, Nobuya Shimamoto, Garret Sato, Robert Crooks, Johan Strombergsson-Denora, Alexandre Dubois, Michael Daniel Murphy, Jason Smiley, Dean Schaller, Adam Rogers, Svitlana Campbell, James Hicks
Dirección: Roland Emmerich

Doctor Sueño - Por Juan Pablo Donoso

Se siente como una secuela abultada y errática de aquella obra maestra que fue El Resplandor de Stanley Kubrick en 1980.

Si bien Mike Flanagan tiene oficio y talento para realizar historias de terror y suspenso (Hush - 2013, El Juego de Gerald - 2017), esta vez, por darle gusto al autor Stephen King y ceñirse más a la novela, nos entrega un relato sobrecargado y cuya médula se le escapa varias veces de las manos.

La factura audiovisual y las actuaciones son de buen nivel. Hay momentos en que logra atmósferas mágicas e inquietantes. Por tratar de ser tan fiel al propósito literario de King le falló la síntesis dramática, cosa que Kubrick logró al adaptar el texto original del novelista.

El resultado es una sucesión dispersa de situaciones siniestras y paranormales, con varios clímax menores, que sólo se integran en las secuencias finales. Para poder culminar el relato, debieron echar mano a escenas, y escenarios, del mismo Resplandor de Kubrick. De lo contrario, los incidentes parciales seguirían multiplicándose “ad infinitum”.

En un libro se pueden contar muchas historias paralelas y describir con calma los tormentos de cada personaje. Nadie nos apura y, si es necesario, podemos volver atrás, y hasta releer pasajes y capítulos. El ejemplo más universal son las novelas de Dostoievsky.

Aquí fueron demasiados los ingredientes para armar esta torta de terror: telepatía, humos de longevidad, traumas de infancia, telekinesis, alcoholismo, poderes hipnóticos y, finalmente, el retorno de almas malditas del Hotel Overlock que cobran venganza eterna.

Empatizamos con los personajes centrales: el ahora adulto Danny Torrence y la pequeña negrita Abra. Más, son tantas las referencias, unas dentro de otras, que ya nada nuevo nos impresiona.

Siempre atractiva la sueca Rebecca Ferguson (Misión Imposible 2018), como la “perversa bruja” Rosa Sombrero. Sobrio en sus matices Ewan McGregor (Moulin Rouge 2001, Agosto 2013), y carismática la pequeña Kyliegh Curran como la negrita con poderes sobrenaturales. Esas mismas virtudes debieron concentrar los elementos patéticos en un todo más selectivo y aterrador.

UNA ALCACHOFA CON DEMASIADAS HOJAS. PIERDE NÚCLEO Y TRASCENDENCIA. 

Ficha técnica


Título Original: Doctor Sleep Drama, fantasía, horror 
Warner Bros. EE.UU., Inglaterra - 2,32 hrs. 
Fotografía: Michael Fimognari 
Música: The Newton Brothers 
Diseño Prod.: Maher Ahmad, Patricio M. Farrell 
Actores: Ewan McGregor, Rebecca Ferguson, Kyliegh Curran 
Editor,Guionista y Director: Mike Flanagan

Midway - Por Juan Pablo Donoso

Enorme y dinámica producción bélica. US$ 100.000.000. Pretende recordarnos aquel evento histórico, y nos informa de nuevos datos y héroes que participaron en él.

Aunque tiene varios actores conocidos se acerca más a un documental, con algunas interacciones personales para acercarnos a los protagonistas más importantes.

A diferencia de otros filmes estadounidenses que trataron este tema - La Batalla de Midway (1976) y La Primera Victoria (1965) junto a otras como Tora, Tora, Tora, etc., aquí evitan las historias secundarias, o los recursos sentimentales.

Esta vez el director Roland Emmerich, especialista en grandes gestas de acción (El Patriota - 2000, Día de la Independencia - 1996, Godzilla - 1998), optó por ceñirse más a los hechos - que ya eran demasiados, que a internarse en las vivencias personales.

El resultado es una película larga - 2,18 hrs. - con muchos personajes de ambos países - EE.UU. y Japón - y una sucesión de estupendos combates aéreos y en alta mar.

Por más que uno trate de abanderizarse con los norteamericanos, las escenas entre los altos mandos japoneses nos permiten sentir lo aberrante que es una guerra para todos los combatientes.

La batalla de Midway fue la culminación de la ofensiva militar sorpresiva efectuada por la Armada Imperial Japonesa contra la base naval de los Estados Unidos en Pearl Harbor (Hawái) en la mañana del domingo 7 de diciembre de 1941. El bombardeo pretendió evitar la intervención de la Flota del Pacífico de los Estados Unidos en las acciones militares que el Imperio del Japón planeaba realizar en el Sureste Asiático contra las posesiones ultramarinas del Reino Unido, Francia y Países Bajos.

Esa batalla- naval y aérea - marcó el punto de inflexión en la 2ª Guerra Mundial. Alteró el curso de la guerra en el Pacífico. Cuando los japoneses se sentían superiores y seguros del éxito, el coraje y la intrepidez de los norteamericanos logró derrotarlos.

Rol muy importante jugaron los encargados de la Inteligencia estadounidense, primero fallando en Hawaii y más tarde arriesgándose casi a ciegas con respecto a la ubicación de la flota nipona.

A pesar de la enorme envergadura argumental, su guionista Wes Tooke y el director Emmerich logran que en todo momento sigamos la trama con claridad y empaticemos con sus personajes.

Admirable uso de efectos computacionales y sonoros. Los actores principales, en un ritmo vertiginoso sacrifican el lucimiento personal en favor de la sobriedad histórica del relato.

Hasta hay espacio para ver al legendario director John Ford registrando el evento con su equipo de filmación.

Y una vez más - durante los títulos finales - disfrutamos conociendo el rostro de los verdaderos oficiales y soldados de la hazaña, y lo que fue de sus vidas posteriores.

EXCELENTE SUPERPRODUCCIÓN DE UN MOMENTO HISTÓRICO DECISIVO Y MUY APEGADO A LA REALIDAD DE LOS HECHOS. IMPRESIONANTE.

Ficha técnica


Historia, acción, guerra Diamond Films EE.UU., China - 2,18 hrs. 
Fotografía: Robby Baumgartner 
Edición: Adam Wolfe 
Música: Harald Kloser, Thomas Wanker 
Diseño Prod.: Kirk M. Petruccelli 
Guion: Wes Tooke 
Actores: Ed Skrein, Patrick Wilson, Woody Harrelson 
Director: Roland Emmerich

Downton Abbey - Por Juan Pablo Donoso

Un manjar para los que gozaron con la serie de TV inglesa durante tantos años.

En este largometraje la acaudalada familia Crawley deberá recibir por dos días la visita - ni más ni menos - que del Rey y la Reina de Inglaterra en la mansión campestre de Downton Abbey.

El revuelo que esto provoca en los propietarios y entre la servidumbre dará pie para revivir durante más de 2 horas las múltiples relaciones de toda esa gente.

Como los monarcas traen consigo un séquito propio de cocineros, costureras, mayordomos y mucamas, los empleados locales se sentirán desplazados y ofendidos en su pundonor. Y harán lo posible por demostrar que son excelsos en su oficio.

Para lucir esta eficiencia, la hija Lady Mary (Michelle Dockery) trae de vuelta, sólo por esos días, al legendario mayordomo Mr. Carson (Jim Carter) quien ya estaba jubilado.

La galería de personajes de la serie fue inmensa. Y el carácter de cada uno enriqueció la trama de esta saga en un enjambre de historias románticas, tristes y alegres, satíricas e históricas de la primera mitad del siglo XX.

Ello fue mérito primordial del dramaturgo Julian Fellows quien supo mantener el estilo, la elegancia y la ironía de un relato magistralmente ambientado, y con actores ingleses de primera categoría.

En este filme - que podría ser la yuxtaposición de dos nuevos capítulos - nos reencontramos con los añorados habitantes de esa mansión. Vuelven a la vida con todos sus rasgos, defectos y virtudes, que los hicieron tan entrañables en la serie.

Por ejemplo, la gran Maggie Smith vuelve a encarnar a la vieja tía Violet, con el ingenio, flema, y sarcasmo que la hizo inolvidable. Julian Fellows se inspiró en su propia tía abuela para concebir a tan emblemática criatura.

Quienes más disfrutarán con esta recreación serán quienes vieron la serie televisiva y evolucionaron con sus eventos. Quedaron incrustados en su ADN.

Aunque se dan por conocidos muchos antecedentes, igual nos sumergen otra vez en ese mundo ya extinguido haciéndonos reír, admirar y también lagrimear en algunos momentos.

LAS VIRTUDES DE DOWNTON ABBEY RECREADAS MAGISTRALMENTE EN UN LARGOMETRAJE. SUGERIMOS VERLO AHORA EN LA PANTALLA GRANDE DE UN BUEN CINE. ESTUPENDA. 

Ficha técnica


Drama familiar histórico Universal - Andes Films Inglaterra - 2,02 hrs. 
Fotografía: Ben Smithard 
Edición: Mark Day Música: John Lunn 
Diseño Prod.: Donal Woods 
Guion: Julian Fellowes 
Actores: Maggie Smith, Jum Carter, Elizabeth McGovern 
Director: Michael Engler

El Gurú - Por Juan Pablo Donoso

Prolijo documental chileno sobre nuestro campeón de box Carlos Ruiz, alias El Guru.

Muy bella fotografía en blanco y negro, con sugestivas imágenes a contraluz, condimentado con detalles de planos muy cerrados de rincones, objetos, máquinas y rostros populares.

Loable trabajo de tres camarógrafos para captar en forma simultánea la misma escena desde ángulos diversos, en especial de los combates en el ring y de las reacciones del público.

Tomas largas - sin narrador. Todo se comprende por las imágenes y las breves frases cotidianas.

Carlos Ruiz - el Guru Guru - es obrero en una fábrica de alimentos salmoneros en Castro, Chiloé. Es el ídolo deportivo de niños y adultos de la región.

Lo acompañamos tanto en sus entrenamientos rigurosos como en la intimidad de su modesto hogar junto a su esposa y pequeña hijita.

El proceso del relato va en un ascenso preparatorio para el encuentro final con un retador argentino - Joel Masseo - por el título de Súper Campeón Mediano. El ganador será clasificado para combatir en Estados Unidos.

Se nos presenta como similar a un Rocky chileno, con secuencias paralelas entre su trabajo en la industria, los entrenamientos y pesajes previos a las peleas anteriores, y con el cariño y fe de su entrenador en las capacidades del alumno.

Sus méritos principales son revelarnos a un eximio boxeador chileno que va camino a la cumbre; acercarnos a su ambiente hogareño y laboral bajo los cielos chilotes fríos y lluviosos; al fervor de sus coterráneos, con niños que lo idolatran y sueñan llegar a ser como él, y además, con un lenguaje audiovisual en blanco y negro que recupera el valor estético de ese cromatismo hoy día tan escaso en el cine.

UN DOCUMENTAL DEPORTIVO, SOBRE CHILENOS, DIGNO DE REPRESENTARNOS EN EL MUNDO POR SU BELLEZA VISUAL Y POR SU MÍSTICA DE SUPERACIÓN.

Ficha técnica


Documental biográfico deportivo Chile - 1,09 hrs.
Storyboard Media 
Cámaras: Lester Rojas Romero, Jerman Catalán Barros, Henry Bórquez 
Sonido Directo: Lester Rojas Romero 
Productor Técnico; Cristian Sandoval 
Subtitulaje: Joel Poblete y Cristian Sandoval 
Fotografía, Edición, Guion y Dirección: Rory Barrientos Lamas 
Ganador del Work in Progress - 2017 - Sanfic Industria. 
Exhibido en el festival de documentales Visions du Réel en Nyon, Suiza

miércoles, 11 de diciembre de 2019

Doctor Sueño - Por Carlos Correa

La expectativa es alta. Se promociona como la secuela de "El resplandor" -1980- dirigido por Stanley Kubrick y la historia es del mismísimo Stephen King quien ha alabado esta realización del director Mike Flanagan. No obstante todos estos títulos, “Doctor Sueño” queda al debe y por varias razones.

El relato sucede algunos años después de los hechos que narra "The Shining”. Esta vez sigue a un ya adulto Danny Torrance -Ewan McGregor- que tiene severos traumas y problemas graves con el alcohol. Sus habilidades psíquicas se mantienen aunque están algo alteradas por su condición actual, asunto que no le impide tomar contacto telepático con Abra Stone -Kyliegh Curran- a raíz de un brutal asesinato que un culto de psíquicos conocido como el “Nudo Verdadero” ha cometido en su búsqueda insaciable del escaso y fundamental “vapor", elixir producido en los momentos de la muerte de personas con habilidad brillante y que para quienes lo reciben implica retrasar el envejecimiento.

Hasta allí, lo que va de cinta es interesante y no hay mayores pistas sobre lo que viene a continuación. Rose the Hat -brillante y divina Rebecca Ferguson-, quien lidera el culto, va acercándose lentamente tanto a Abra como a Dan. Los poderes mentales se enfrentan y disputan una cerrada lucha a distancia que tiene tanto de misterio como de inexplicable fuerza sobrenatural. Justamente es en ese momento cuando la cinta se torna evidente y cede terreno al exponer los elementos demasiado explícitos dejando poco y nada a nuestra imaginación.

La extensión desde su segundo tercio se siente. Existe un alargue innecesario que cae en la pereza sin aportar demasiado a la centralidad del argumento. Al entrar al último tercio todo pareciera encarrilarse cuando la historia vuelve al escenario del famoso y recordado “Hotel Overlook”. Y en parte casi lo logra, porque la recreación es estupenda pero al mismo tiempo la configuración del relato nuevamente cae en lo lineal y en lo evidente.

“Doctor Sleep” es víctima de sus propias y altas expectativas. ¡Cuán diferente es imaginarse los relatos de las novelas y luego observarlos en imágenes! Aquí, sin haber leído la novela, podemos inferir que la gran imaginación de Stephen King debe plantear en sus diferentes capítulos un desafío enorme. Recogerlo en formato guión y luego filmarlo debe ser tremendamente difícil, en especial por la cantidad de posibilidades que tiene y las limitaciones que implica la toma decisiones para configurar una película. La deuda entonces queda, no ha sido saldada y “El Resplandor” aún goza de excelente salud a pesar de no ser del agrado del escritor. Quienes la recordamos como un icono del cine del Siglo XX la continuamos admirando y su impronta se engrandece cada día más.

Ficha técnica

Título original: Doctor Sleep
Año: 2019
Duración: 151 minutos
País: Estados Unidos
Productora: Warner Bros. / Intrepid Pictures / Vertigo Entertainment. Distribuida por Warner Bros.
Género: Terror. Thriller | Thriller psicológico. Sobrenatural. Secuela
Guion: Akiva Goldsman, Mike Flanagan (Novela: Stephen King)
Música: The Newton Brothers
Fotografía: Michael Fimognari
Reparto: Ewan McGregor, Rebecca Ferguson, Kyliegh Curran, Zahn McClarnon, Carl Lumbly, Alex Essoe, Bruce Greenwood, Jacob Tremblay, Catherine Parker, Robert Longstreet, Carel Struycken, Emily Alyn Lind, Selena Anduze, Jocelin Donahue, Chelsea Talmadge, Juan Gaspard, Deadra Moore, David Michael-Smith, Kevin Petruski Jr., Mistie Gibby, Met Clark
Dirección: Mike Flanagan

El Guru - Por Carlos Correa

Este documental chileno sigue de cerca al boxeador Carlos “Guru” Ruiz. Filmado en blanco y negro y con un inquieto trabajo de cámaras y edición, muestra un trabajo diferente a lo acostumbrado. Su mirada nos abre una ventana a lo cotidiano de la vida de Ruíz, quien se gana el sustento como operario en una industria de alimentos para salmones en Castro, Chiloé.

Rory Barrientos Lamas desarrolla un trabajo casi unipersonal con este filme pues el sonido, el montaje, la fotografía, el guion y la dirección están bajo su firma, mientras las cámaras a cargo de Lester Rojas Romero, Jerman Catalán Barros y Henry Bórquez entregan perspectiva a un relato que se centra en el protagonista sin dejar de lado el entorno familiar y social que le rodea.

En sus 70 minutos, el tiempo transcurre corre a favor del joven púgil. En un comienzo no sabemos mucho de qué se trata y qué camino tomará la historia. A poco andar podemos enlazar elementos y sentimos algo de tierra firme. Al avanzar y profundizar, empatizamos con las situaciones que observamos y llama especialmente la atención el carisma y sencillez de “el Guru” despertando nuestra simpatía pues, incluso en los combates en los que participa, ya somos parte de sus seguidores.

Este trabajo documental tuvo su estreno mundial el año 2019 en el prestigioso festival de documentales “Visions du Réel” -Nyon, Suiza-, participó recientemente en la competencia de cine chileno en el Festival de Valdivia y también en FIDOCS, el Festival Internacional de Documentales de Santiago.

Carlos “Guru” Ruiz va por la gloria y nosotros lo apoyamos en su desafío. También quisiéramos acompañarlo; ya nos hemos encariñado con él. El boxeo es duro, una disciplina que es siempre cuestionada por ser un deporte que provoca daño y cuyo fin es aturdir al rival, sin embargo logramos superar esa difícil primera capa para entrar en el interior del “Guru”, dejarnos encantar por su insospechado espíritu de superación, por su deseo incontenible de vencer, por representar fervientemente a su pueblo y también con ello a su país.

Ficha Técnica

Dirigida por: Rory Barrientos Lamas
Guion: Rory Barrientos Lamas
Casa productora: Hay que Hacerlo Producciones - Storyboard Media
Producción ejecutiva: Carlos Núñez - Gabriela Sandoval - Rory Barrientos Lamas
Dirección de fotografía: Rory Barrientos Lamas
Montaje: Rory Barrientos Lamas
Sonido: Rory Barrientos Lamas

martes, 10 de diciembre de 2019

Entre Navajas y Secretos - Por Carlos Correa

Todo gira en torno a una reunión familiar. Se trata del cumpleaños número 85 del famoso novelista Harlan Thrombey -Christopher Plummer-. Pero esto lo sabremos después, luego de una excelente obertura audiovisual que da paso a la primera sorpresa: Harlan es encontrado muerto en el altillo de su mansión.

La cinta se visualiza como una obra de teatro o, haciendo un paralelo musical, como una “película de cámara”. Hay pocos exteriores y la acción se desarrolla principalmente al interior de la lujosa y antigua casa en sucesivas reuniones del grupo familiar que compartió la celebración del octogenario magnate. Lo primero que observamos es una nueva sesión de interrogatorios por parte de la policía, esta vez acompañados de una enigmática figura que no se revela desde el comienzo y que es Benoit Blanc -Daniel Craig-, un carismático detective privado que ha sido anónimamente contratado para indagar sobre las causas de la muerte del anciano y sus circunstancias.

Desfilan por el filme los hijos de Harlan, sus familias, sus nietos y también las personas que ayudan en la casa, su enfermera personal y la encargada del servicio. Nos vamos enterando poco a poco que cada uno tiene una relación particular con el difunto millonario. La cinta agrega imágenes de lo sucedido en la fiesta, diálogos, conversaciones escuchadas detrás de las paredes, tomas desde diferentes ángulos y las declaraciones de los involucrados, en la mayoría de los casos no coincidentes con la verdad de lo sucedido.

El director y guionista Rian Johnson hace un trabajo de joyería con esta película. Con muchos toques de humor y caracterizaciones muy logradas -Jamie Lee Curtis, Michael Shannon, Chris Evans, Don Johnson, Toni Collette y Ana de Armas están geniales-, conduce esta intriga con ritmo de comedia. El guion es inteligente y asertivo; nos hace recordar las novelas clásicas de investigación de Arthur Conan Doyle, Agatha Christie con ingredientes de investigadores modernos tipo “Columbo”. Los hilos se van enredando cada vez más porque la visión de cada uno de los familiares protagonistas vela por su propia conveniencia. Es cierto, hay coincidencias, pero en temas de fondo claramente cada uno tiene su propia verdad y por supuesto tiene objetivos distintos.

Convertida en una sorpresa desde su inicio, “Knives Out” es embriagante. No solo la historia resulta muy entretenida sino también la forma en que Johnson la relata. Las confusiones generadas y las diferentes salidas que va vislumbrando su intrincada trama nos mantienen alerta y concentrados en cada uno los detalles. Además, es mucho lo que está en juego sobre la mesa cuando se trata de una familia extensa, con evidencias disfuncionales y que además se encuentra “ad portas” de una cuantiosa herencia. El carisma de cada uno de sus protagonistas -muy bien equilibrados en participación y definición- aporta al excelente resultado final, un resultado que es a la vez sólido y gratificante.

Ficha técnica

Título original: Knives Out
Año: 2019
Duración: 130 minutos
País: Estados Unidos
Productora: Filmnation Entertainment / Ram Bergman Productions / Media Rights Capital (MRC). Distribuida por Lionsgate
Género: Intriga | Crimen
Guion: Rian Johnson
Música: Nathan Johnson
Fotografía: Steve Yedlin
Reparto: Daniel Craig, Ana de Armas, Chris Evans, Jamie Lee Curtis, Toni Collette, Don Johnson, Michael Shannon, Christopher Plummer, Keith Stanfield, Katherine Langford, Jaeden Martell, Riki Lindhome, Edi Patterson, Raúl Castillo, Frank Oz, M. Emmet Walsh
Dirección: Rian Johnson

domingo, 8 de diciembre de 2019

Contra lo imposible - Por José Blanco Jiménez

El objetivo principal de los protagonistas de esta película de James Mangold (Logan, 2017; The Wolverine, 2013) es ganar Las 24 horas de Le Mans. Dedicada a los “tuercas”, las dos horas y media pueden hacerse densas para los que no se interesan por saber acerca de las características del Ford GT40 o de las proezas de Carroll Shelby (Matt Damon) y Ken Miles (interpretado magistralmente por un Christian Bale, que también se merecía el Premio Oscar por su Dick Cheney de El vice / Vice, de Adam McKay, 2018).

Este último ganó las 24 horas de Daytona, las 12 horas de Sebring y también Le Mans, como verán los espectadores (y no digo más). Excelentes también Mollie, la esposa (Caitriona Balfe) de armas tomar y absolutamente comprometida con su hombre. De antología la secuencia en que trae una silla y una revista para mirar como Carroll y Ken se dan de golpes en la placita frente a la casa. Y no puedo olvidar al hijo Peter (Noah Jupe; el Jack Will de Extraordinario / Wonder, de Stephen Chbosky, 2017) con el que el piloto sostiene conversaciones que son un verdadero testamento humano y profesional.

Pero la lucha entre titanes no es entre conductores, sino entre dos grandes empresas: la italiana Ferrari y la norteamericana Ford, como reza el título original. De ahí la denuncia de la pequeñez de la venganza y del poder, que nada tienen que ver con lo deportivo.

Hace ya bastantes años que vi en cinerama Gran Prix, de John Frankenheimer (1966) con un reparto de lujo, que incluía a James Garner, Yves Montand y Toshirô Mifune, entre otros. Se puede decir que es una película definitiva sobre el tema y es, por sobre todo, un gran espectáculo con pequeñas historias intercaladas, que incluyen un romántico adulterio.

Esta producción es distinta. La lucha entre los titanes empresariales lleva a reflexionar acerca de la maestría contra la vendibilidad. El talento lo tienes o no lo tienes: la técnica se encarga sólo de afinarlo. Es difícil reconocer un talento, pero aun más admitirlo y aceptarlo. Y – sobre todo – cuando no se deja corromper ni complacer visto que no pertenece a una élite ni a lobby alguno. Miles es irascible, testarudo, intratable; pero sobre todo tenaz.

Como señala la voz en off, cuando vas a 7.000 revoluciones por minuto, el automóvil desaparece y sólo queda un cuerpo que atraviesa el tiempo y el espacio: a esa velocidad, si quieres saber quién eres, no puedes mentir si es que logras encontrar una respuesta.

Tal vez lo imposible esté en la superación de la inutilidad de la fama.

(Ford v. Ferrari. USA, 2019)

sábado, 7 de diciembre de 2019

Un día lluvioso en Nueva York - Por Jackie O.

"Solo basta un fin de semana para cambiar tu vida"

Woody Allen tiene la costumbre de dar uno que otro dato de su bullada vida en las películas que realiza. 

En esta oportunidad nos presenta a un joven de buena familia, que siendo muy inteligente no quiere estudiar, sólo desea tocar el piano, disfrutar del ruido capitalino, jugar póquer y pasar un grandioso fin de semana con su hermosa novia Ashleigh en Nueva York.

Ashleigh es bella, una ingenua provinciana, que viene a Nueva York a entrevistar a un renombrado director de cine y disfrutar del lugar con su novio. 

El director es un alcohólico con una depresiva confusión artistica, que al conocer a la entrevistadora quiere transformarla en su musa inspiradora. Algo que descoloca a esta chica, quien además aprovecha de conocer al guionista del director. Una chica muy impresionada por todo lo sucedido, por conocer en un par de horas a gente muy influyente, como a un latinlover que bajo la confusión alcohólica tienen un "leve encuentro".

Nuestro joven protagonista Gatsby, ve frustrado su fin de semana romántico y deambula por la ciudad encontrándose con su familia y viejos amigos. Como la hermana de su antigua novia, una chica directa, mordaz y agradable.

En un solo fin de semana, la vida de varias personas vivirá momentos que cambiarán su futuro. Con situaciones anécdoticas que disfrutarás y secretos que saldrán a flote.

Un día lluvioso en la ciudad limpiara y dejara al descubierto su intimidad, como si cada persona desnudara a su otro yo y lo dejara salir en un acto colectivo de catarsis. 

Todos tienen algo que esconder. Desde lo más pequeño a lo más grande. Deseos insatisfechos, engaños, mentiras, pasiones y hasta vidas ocultas. 

Un guion interesantemente entretenido. Una música fascinante, en un NY que sólo sale de la imaginación de Woody.

El elenco es genial, y todos cumplen muy bien su parte. Experiencia y juventud se mezclan perfecto.

En que puede fallar, en que la encuentres teatral y lenta, pero vale verla. A quienes le gustan el estilo comedia romántica estarán fascinados. Y a quienes no, dense la oportunidad y verán que no habrán desperdiciado el tiempo.
Porque nunca sabrás lo que pasará en tu vida de un momento a otro.

Recomendada.

viernes, 6 de diciembre de 2019

Entre navajas y secretos - Por Jackie O.

“Ágil, entretenido e ingenioso juego de Clue” 

Sin necesidad de efectos especiales, automóviles o helicópteros en carrera, balaceras por mil, o persecuciones adrenalínicas. No se necesitó, ya que cuando hay un interesante guion, buena dirección y excelentes actuaciones, no es necesario.

La extraña muerte del patriarca de la familia Harlan Thrombey, un novelista famoso quien aparece con el cuello cortado con una navaja la noche después de haber celebrado su cumpleaños, parece un suicidio. Pero eso no convence al prestigioso detective Benoit Blanc, quien tratará de descubrir que sucedió en realidad.

Y conociendo a la familia del difunto, todos podrían tener motivos suficientes para matar a este escritor multimillonario: su fría hija, el yerno infiel, el que quiere manejar la editorial, la oveja negra, la nuera arribista, así como aquellos nietos cada uno en su rollo, una enfermera inmigrante considerada parte de la familia, y la abuela.

Tenemos una película que no defrauda. Es entretenida, ágil, misteriosa, con giros en su trama que son conocidos pero muy bien conducidos que te mantiene engachado. Las actuaciones son verosímiles donde muestran a una familia que vive a costa del difundo Harlan, codiciosos, mentirosos, de oscuras intenciones y poco confiables, que da para sospechar de todos ellos.

Con movimientos de cámaras muy acertados, así como un diseño de producción que le daba la estética necesaria para captar aún más nuestra atención al delicado detalle. Sin dejar de mencionar que el montaje fue muy bien efectuado.

Como señalé el elenco fue muy verosímil, escogido adecuadamente. Su guion fluido, entretenido, con chistes en el momento justo, creíble, ameno y fresco. No decae en ritmo.

En que puede fallar para algunos, en que encuentren la trama trillada, O que se parodia el género detectivesco.

Lo que de todas formas la hace entretenida.

Una visión de la sociedad, y un misterio donde no faltan los motivos.

Recomendada.

Ficha técnica

Título original: Knives Out
Año 2019
Duración:  130 minutos
País: Estados Unidos
Reparto: Daniel Craig, Ana de Armas, Chris Evans, Jamie Lee Curtis, Toni Collette, Don Johnson, otros
Director: Rian Johnson

jueves, 5 de diciembre de 2019

Un día lluvioso en Nueva York - Por José Blanco Jiménez

En este homenaje a Jerome David Salinger, el joven Holden se llama Gatsby (homenaje adicional a Francis Scott Fitzgerald) y el cazador (o guardián) no está en el centeno sino en

Como siempre, Woody Allen es un excelente director de actores y – en este caso – se sirve de tres jóvenes que se están destacando cada vez más: Timothée Chalamet, Elle Fanning y Selena Gómez.

Todo empieza cuando Gatsby y Ashleigh deciden pasar un fin de semanas en New York. Él quiere mostrarle la ciudad donde nació y donde viven sus padres (la excusa es, justamente, el cumpleaños de su mamá). Ella viene de Tucson (Arizona), escribe en el diario de su modesta universidad y quedará literalmente deslumbrada por la gran ciudad, al punto de olvidar hasta su nombre cuando se encuentra con un famoso actor.

Los dos jóvenes se separan y, durante un día de lluvia, correrán aventuras que les ayudarán a crecer. Dejo el relato hasta ahí para no ser un spoiler. Sin embargo, quiero decir que ese weekend romántico se resuelve en una victoria absoluta de la ciudad. Woody ya lo había hecho en Manhattan, con un adulto joven inmaduro afectivamente, que no se decidía entre una adolescente y una coetánea suya igualmente inmadura.

Allí están el Central Park (con su reloj) y el Metropolitan Musem of Art, ahí está la música de jazz y los locales rétro. En esta ciudad idealizada, no existe el crimen ni las autoridades corruptas apoyadas por una policía violenta y aún más corrupta. Todo es hermoso y romántico, como un beso juvenil.

Sí están las prostitutas de 500 dólares y el mundo del dinero, que todo lo compra y domina. Si está el guiño semita que, como siempre, divierte a Allan Stewart Konigsberg, que acaba de cumplir los 84 años y que está más activo que nunca.

(A Rainy Day in New York. USA, 2019).

Contra lo imposible - Por Carlos Correa

Basada en el libro de A.J. Baime e inspirada en hechos reales, “Ford v. Ferrari” se centra en los esfuerzos desplegados por el equipo dispuesto por la fábrica norteamericana de automóviles para derrocar a la italiana Ferrari de su dominio hegemónico en las famosas 24 Horas de Le Mans. Años de triunfos consecutivos de la famosa “Scuderia” junto a sus pobres resultados en ventas, detonan la decisión de Ford de construir un auto para competir al más alto nivel en el automovilismo mundial.

La tarea no se ve sencilla. Es más, prácticamente es imposible. No obstante aquello, el enorme desafío recae en el prestigioso Carroll Shelby -Matt Damon- otrora piloto triunfador en Le Mans y ahora convertido en exitoso fabricante y vendedor de autos. Shelby no duda un segundo en aceptar un encargo que proviene del mismísimo Henry Ford II a través de su ejecutivo Lee Iacocca: construir un veloz deportivo desde cero para desbancar a Ferrari teniendo para ello un cheque en blanco pero solo 90 días de plazo. Carroll puede hacer su parte pero necesita si o si al mejor piloto. Aquello se transforma en lo más complejo, porque su elección, Ken Miles -Christian Bale-, es decidido, arriesgado y tal vez el más veloz y preparado de todos, pero su fama -en realidad no solo su fama sino realmente sus reacciones- de díscolo frena toda confianza en él por parte de los ejecutivos mandamases.

La dinámica de la cinta es vertiginosa. No solo tiene escenas magníficas de los autos, tanto en sus etapas de preparación, pruebas y en carrera, sino que adiciona una serie de detalles técnicos que aportan lo suyo al relato sin ser demasiado específicos o mayoritariamente aburridos. Observamos con extrema claridad que la competencia es de autos, o sea de fierros, piezas y ensamblajes, sin embargo también se explicita lo importante que es el papel del piloto para tener éxito. Es fundamental tener un conductor que conozca en profundidad la mecánica de los bólidos y que pueda aportar desde su experiencia en el desarrollo del coche en forma conjunta con los ingenieros, diseñadores y mecánicos que tienen a cargo las exigentes responsabilidades técnicas. Miles reúne todas las condiciones; empuja, cuestiona y también pelea contra sí mismo, contra su carácter y rebeldía.

La cinta funciona de manera espléndida por muchas razones. Su guion es fluido y equilibrado, los diálogos son certeros, las imágenes por momentos impactan y las escenas más reposadas están llenas de una emocionalidad a flor de piel que recae principalmente en la familia de Ken, en su cariñosa esposa y en su hijo pequeño, quizá el más fiel de sus admiradores. Emotiva es la escena entre ambos contemplando “la vuelta perfecta”, también lo es cuando el pequeño escucha por radio una carrera y cuando ven Le Mans por televisión junto a su madre.

La templanza, el coraje y el riesgo son fundamentales y, sobre todo, si deben sobreponerse a la comodidad de los ejecutivos de escritorio que toman decisiones solo en base a informes y a conveniencias políticas y comerciales, ignorando la realidad cotidiana. Shelby y Miles forman una dupla explosiva que tiene sus mayores detractores y competidores al interior de la misma compañía, algo difícil de entender si supuestamente todos están alineados hacia un objetivo común. Es por ello que en la lectura de esta cinta el antagonista no sea la poderosa competencia italiana sino que sea un ejecutivo de la propia empresa, de cuello y corbata, quien no se ensucia las manos y solo vela por sus propios intereses particulares.

“Contra lo imposible”, su deficiente título en español, ofrece dos horas y media de tensión de la que no podemos escapar. Si conocemos la historia, sabemos el final y si no la conocemos, sospechamos como se puede resolver el argumento. Por ello tiene mayor valor aún la forma de narrar elegida por el director James Mangold pues logra suspenso y emoción permanente agregando el aporte sustantivo que la dupla actoral Damon-Bale entregan a una película que es pura humanidad -sueños, fracasos, algunos éxitos, amistad, lealtad, amor, contención, valor y coraje- con una competencia de fábricas de autos como telón de fondo.

Ficha técnica

Título original: Ford v. Ferrari
Año: 2019
Duración: 152 minutos
País: Estados Unidos
Productora: Coproducción Estados Unidos-Francia; Chernin Entertainment / 20th Century Fox
Género: Drama. Acción | Biográfico. Coches / Automovilismo. Amistad. Años 60
Guion: Jason Keller, James Mangold, Jez Butterworth, John-Henry Butterworth (Libro: A.J. Baime)
Música: Marco Beltrami
Fotografía: Phedon Papamichael
Reparto: Matt Damon, Christian Bale, Jon Bernthal, Caitriona Balfe, Noah Jupe, Josh Lucas, Tracy Letts, JJ Feild, Ray McKinnon, Rudolf Martin, Ward Horton, Bridie Latona, Lachlan Buchanan, Christopher Darga, Sean Carrigan, Ian Harding, Wallace Langham, Wyatt Nash, Jonathan LaPaglia, Stefania Spampinato, Jenelle McKee, Marisa Petroro, Benjamin Rigby, Brea Bee, Andrew Burlinson, Adam Stuart, Roberta Sparta, Remo Girone
Dirección: James Mangold