Basada en la novela homónima del mismo nombre, de la escritora Miriam Toews de 2018. Nos cuenta la historia de ocho mujeres de una colonia aislada menonita de Bolivia (una rama pacifista del movimiento cristiano), quienes luchan por reconciliar la realidad de su fe después que se revela que los hombres de su comunidad las drogaron y violaron durante años.
No tenía antecedentes de esta película antes de verla, por lo que creí que estaba viendo un filme ambientado dentro de la primera mitad del siglo pasado, todo ello por la vestimenta de nuestras féminas y por la situación, esto era, analfabetas, ya que su “colonia” (secta), les prohibía a las mujeres estudiar, cero posibilidad de opinar, y sometidas al abuso constante de los hombres, sea físico o psicológico.
Pero en una escena donde vi un objeto más actual, dije “algo raro tiene esta película, no puede ser que a la producción se le haya pasado algo así”. Y no, estábamos en este siglo, en un hecho ocurrido el año 2010 más o menos. Sí, actual.
¿¡Cómo pueden existir comunidades así?! Sí las hay, y muchas que desconocemos a veces.
Pero vamos a la película, su presentación es muy teatral, ya que ocupa pocos espacios, incluso si se le quitara los exteriores igual funcionaría bien.
Estas ocho mujeres toman una decisión que afecta a todas las mujeres del sector, y es que deciden sacar la voz y no aguantar más los ataques sexuales de los hombres, supuestamente religiosos, del sector. Es más, estos sujetos les hacían creer a ellas que era el mismo diablo quien las violaba, ella eran unas pecadoras. Hasta que una de ellas ve el rostro de sus agresores, y denunciaron el hecho, siendo algunos aprehendidos, pero como no había condena aún, iban a pagarles la fianza los otros hombres y saldrían esa noche y volverían a sus hogares, y estas mujeres ya no quieren a “sus hombres” en el hogar, por lo ya expuesto. Y además, no quieren que sus hijas pasen por lo mismo.
Así que hacen una votación todas las mujeres, a quienes, por su analfabetismo, ayudaba uno de los hombres de la comunidad, un joven profesor, enamorado de una de estas mujeres atacadas. Las ayuda como secretario de actas, un escribano, sin opinión, salvo que le preguntaran algo. Y él obedece, escribe lo que ellas consideran necesario, pues representan a todas las mujeres de esa colonia.
Cuáles son las alternativas por las cuales votaron estas mujeres: quedarse y luchar, hacer nada, huir.
La votación se hizo, y una de esas posturas ganó.
La conversación que tienen estas ocho mujeres (ojo, Frances McDormand tuvo una participación mínima, aunque interesante si se analiza bien, pero no está dentro de las ocho protagonistas, solo está en el cartel por ser rostro conocidísimo y una de las productoras), mujeres de personalidades muy diferentes, dan su opinión, algunas con una rabia incontrolable, otras con la fe de Dios en que todo se arreglará, y otras con incertidumbre de lo que sucederá.
La película es lenta, pues se basa en solo conversaciones entre ellas; sí, hay algunas escenas externas donde nos muestran a estas mujeres atacadas, para entender el contexto.
Sus conversaciones son muy interesantes, desde un punto de vista femenino, sin ser feminista, pero también sumidas en la ignorancia donde ellas se esfuerzan en salir de ese hoyo, y no saben cómo. No pierden la fe, sus creencias cristianas están ahí.
Yo, como mujer, veo y escucho eso, y me molesta, pero hay que situarse en la realidad de ellas.
Pero de todas formas me pregunto, ¿Por qué tanta sumisión al punto de esclavizarse?
Una película actual, donde, como dije, deben existir muchas sectas igual de apartadas o muy cerca de nosotros, que viven en un mundo aparte, de supuesta paz, iluminación y alejamiento de todo lo mundano, simples sectas para esclavizar al ser humano, y tenerlos de objeto, y usan el nombre de Dios para sus, muchas veces, locuras.
Un trabajo cinematográfico interesante, no sé si para ser nominado a los Óscar en Mejor Película, pero sí sus actuaciones son geniales, estas ocho mujeres que protagonizan esta película cada una en su rol perfecto.
La ambientación buena, la música adecuada, la fotografía bella que se contradice a la maldad vivida. El maquillaje realista, bien. Un guion muy bien adaptado.
Película para verla con calma, escuchar con atención y analizar.
Ficha técnica
Women Talking.
Dirección y guion: Sarah Polley
Protagonistas: Rooney Mara, Claire Foy, Jessie Buckley, Judith Ivey, Sheila McCarthy, Michelle McLeod, Kate Hallett, Liv McNeil, Emily Mitchell, Ben Whishaw,
Música: Hildur Guðnadóttir
Fotografía: Luc Montpellier
Montaje: Christopher Donaldson
País: EEUU
Año: 2022
Género: Drama
Duración: 104 minutos
Género: Drama
Duración: 104 minutos
No hay comentarios.:
Publicar un comentario