miércoles, 24 de mayo de 2023

Demonio Negro - Por Carlos Correa Acuña

¿Una clásica película de tiburones atacando a humanos? ¿O tal vez de un monstruo que emerge desde las profundidades? Ni lo uno, ni lo otro, sino todo lo contrario, como dice otro amigo querido, porque luego de un inicio clásico, la cinta se desliza a través de varias vertientes que es pertinente mencionar y analizar.

El comienzo inquieta. Una plataforma petrolera, en medio del océano, y un accidente de rigor para dejar presentado el misterio de la criatura submarina. Tras ello, seguimos en modo tradicional, porque observamos a una familia en viaje de fin de semana de descanso. Y la presentación no es breve, porque vemos lo cotidiano, también lo intrascendente, las infaltables peleas, las discusiones, los juegos, y algo más. Concita interés la llegada a aquel pueblo casi abandonado, que ha perdido auge desde que los problemas achacados a la extracción de petróleo han revivido la famosa leyenda del “Demonio Negro”.

Ya es tendencia clara usar más de un idioma en las filmaciones actuales, y acá funciona bien, apelando al coloquial mexicano que se entremezcla con el mayoritario inglés de la producción. Ayuda también la presencia de la chilena Fernanda Urrejola, que, de manera muy natural, se mueve como pez en el agua (valga la referencia con la temática).

Mientras la película prepara lo que es evidente, la ansiada aparición del megalodón, es decir la forma en que lo veremos por primera vez en gloria y majestad, el guion va derrapando entre conexiones a mitos, leyendas y culturas de la región. Es verdad que todo es disperso y no logra sostener su peso, algo que lamentablemente no se revierte en el transcurso del relato. Al mismo tiempo, y en una clara denuncia, se va dibujando consistentemente ese odio a las empresas petroleras, también a la acción humana que provoca devastación, y a las fatales consecuencias que aquello produce en los ecosistemas afectados.

Y llega el esperado cruce, y los protagonistas ya están encerrados en medio del mar. El problema es que ahí nos quedamos, encerrados nosotros también, porque definitivamente lo que viene a continuación no logra concretar ninguno de los potenciales enlaces que ha expuesto en su extensa introducción.

Respecto a las actuaciones, Urrejola está un paso adelante de Josh Lucas, en especial en los recursos del arco dramático al que apela en los estados de desesperación. Lucas no convence, sus progresiones son equívocas, y eso quita verosimilitud a un personaje que es obligado girar sobre sí mismo sobre el tercio final. Quien sí destaca, por su naturalidad, es “Chato” -Julio Cesar Cedillo-, mucho más centrado y en buena línea con la demanda de su rol de soporte. Asimismo, el hijo menor de la pareja se distancia también un poco, básicamente por su espontaneidad, lo que deja al descubierto una irregular dirección de actores.

Cuando la cinta se quiere explicar, aparecen los temas de fondo. Por ejemplo, el reclamo ante los daños a la naturaleza por esta intervención de empresas, carentes de regulación, que arrasan todo a su paso. También emerge el sentido de venganza, o de restablecer el orden natural, basado en esas historias míticas sobre las que se construye la premisa. Todo aquello, que podría funcionar bien, se desaprovecha por la básica argumentación, y porque se ve todo un poco fuera de foco, desconectado del hilo conductor de la historia global.

Dirigida por Adrian Grunberg, “The Black Demon” funciona a medias. Al no centrarse en las andanzas de la criatura, destina mucho espacio a lo relacional, intenta proponer una reflexión, y no resulta convincente. Además, tiene algunas inconsecuencias básicas como los cambios de ropa de los protagonistas en la plataforma, escenas submarinas muy parecidas unas con otras, y algunas secuencias donde la edición no es todo lo pulcra que uno esperaría de este tipo de realizaciones.

Al final, ¿es una película de terror o pretende ser una lección moral? En ese sentido, y al no estar claro el objetivo, el rumbo se difumina pues podría haber logrado acentuar mejor su moraleja, y con ello obtener un satisfactorio resultado final.

Ficha

Título original: The Black Demon
Año: 2023
Duración: 100 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Coproducción Estados Unidos-Rep. Dominicana; Mucho Mas Media, Silk Mass, Chocolatito, Lantica Media
Género: Thriller. Acción | Tiburones. Monstruos
Guion: Boise Esquerra. Historia: Carlos Cisco
Fotografía: Antonio Riestra
Reparto: Josh Lucas, Fernanda Urrejola, Julio Cesar Cedillo, Venus Ariel, Jorge A. Jimenez
Dirección: Adrian Grunberg

No hay comentarios.:

Publicar un comentario