miércoles, 30 de junio de 2021

Patines de Plata - Por Carlos Correa

Disponible en Netflix.

Cuando Matvey -Fedor Fedotov, pierde su trabajo como repartidor en la famosa confitería “Le Grand Pie", se ve en problemas. Su talento sobre aquellos patines que su padre le obsequió hace muchos años ya no le sirve para ser el más veloz en las entregas a domicilio, sin embargo llama la atención de un grupo de jóvenes liderados por Alex -Yuri Borisov-, quienes justamente usan y abusan de sus habilidades para robar en el mercado y en las calles para luego huir como relámpagos sobre los ríos y canales congelados de San Petersburgo.

En otro extremo, vemos cómo Alisa -Sofya Priss-, hija del poderoso ministro zarista Nikolai Nikolaevich, tiene interés en la ciencia y quiere estudiar química, algo que le es vedado por no considerarse necesario. Además, ante la insistencia de sus padres, la joven se ve obligada a asumir un compromiso matrimonial con el Capitán Príncipe Arkadiy Trubetskoy -Kirill Zaytsev- joven oficial del Departamento de Guardia a quien apenas conoce de vista.

El encuentro de ambos protagonistas es totalmente casual y fortuito. Matvey se ha unido a la banda de Alex con el fin de ahorrar dinero para poder enviar a su padre enfermo a un sanatorio y una noche trepa en un balcón que resulta ser, nada menos, que el dormitorio de Alisa. Desde ese momento comienzan las aventuras y desventuras, los enredos y desenredos, en un relato bastante ameno y sin grandes preocupaciones.

Esta película la dirige Michael Lockshin, quien saca provecho de los paisajes naturales de la bella ciudad congelada. Gran parte del atractivo son las coreografías sobre hielo, las persecuciones y escapadas, todas muy bien filmadas y que resultan originales y entretenidas. Y aunque el guion de Roman Kantor ofrece varios matices, da la impresión que estos solo quedan como buenas intenciones, pues temas que podrían resultar importantes no son abordados con mayor profundidad.

Observamos en esta cinta muchos guiños -algunos más interesantes y otros menos- que son usados, principalmente, como pié forzado para delinear algún tono de comedia. Por ejemplo, tenemos la fascinación/envidia por Paris y su cultura, la referencia al sufragio femenino, las luchas ideológicas, la religión y también las menciones musicales que aporta la banda sonora compuesta por Guy Farley. Son varios los elementos presentes que aparecen en diferentes niveles y permiten aliñar un relato cuya historia tenemos la sensación de haber visto muchas veces.

“Patines de Plata” resulta más entretenida por su forma que por su fondo. No obstante aquello, enuncia algunas cosas y no deja de ser interesante su procedencia Rusa, lo que confirma que el visitar una historia clásica en un escenario diferente entrega valor agregado. Y en el caso de esta película del año 2020, no son solo los patines y su ubicación geográfica, sino que suma una serie de detalles entretenidos para ir descubriendo en el transcurso de sus 130 minutos.

Ficha técnica

Título original: Serebryanye konki
Año: 2020
Duración: 130 minutos
País: Rusia
Productora: Kinoslovo, Studio Trite, Central Partnership, Gazprom Media, KIT Film Studio
Género: Aventuras. Drama. Romance. Fantástico
Guion: Roman Kantor
Música: Guy Farley
Fotografía: Igor Grinyakin
Reparto: Fedor Fedotov, Sonia Priss, Yuriy Borisov, Kirill Zaytsev, Aleksei Guskov, Severija Janusauskaite, Cathy Belton, Vasiliy Kopeikin, Mikhail Shelomentsev, Bato Shoinjonov, Aleksandra Revenko, Timofey Tribuntsev, Yuri Kolokolnikov, ver 4 más
Dirección: Michael Lockshin

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