Alex Garland no es un desconocido para los amantes del cine, más específico, para lo que es “cine de autor”, que involucra historias creativas y que no siguen el molde que está de moda hoy en día en la industria (secuelas, precuelas, remakes, reboots).
Su película debut, Ex Machina (2014), sentó las bases para lo que vendría mas adelante con Aniquilación (2018), o Men (2022), y 10 años después llega con una propuesta que se beneficia por su realismo y cercanía con acontecimientos de hoy en día. Hablo de Guerra Civil.
Como alguien que estuvo a full involucrado en las protestas del “18-O” en Chile tomando fotos y aprendiendo en el camino sobre fotoperiodismo, me llegó de cierta manera tanto la historia, personajes y el sacrificio que se hace en pos de encontrar ESA foto, ese momento, ese click.
Entiendo a la gente que le molestó la película en el sentido de "Ay, me falta historia, no entiendo por qué está pasando esto". Pero a mí no, no lo veo necesario. El argumento de la película se sostiene por sí mismo, hay bandos, "si te disparan, tú devuelves", y eso es suficiente motivo para pelear (argumento que da en un momento de la película y te das cuenta que para algunos, esta guerra civil ya se ha desvirtuado).
Civil War es más una road movie periodística, un viaje de crecimiento profesional para unos, un viaje para encontrar la entrevista de su vida para otros, y para algunos, enfrentar sus fantasmas.
Kristen Dunst está BRUTAL, su personaje está a full demostrando por qué una actriz como ella debe seguir vigente en la industria, y que por favor, por favor, por favor, esté nominada a premios en la próxima temporada.
Si bien ella es la protagonista, de a poco ese papel lo va tomando Cailee Spaney como Jessie, una fotoperiodista novata que viaja con el grupo porque quiere aprender de su ídola, y ahí va descubriendo cuánto se sacrifica por encontrar esa toma perfecta.
Hay una escena que involucra al -y me pongo de pie- increíble Jesse Piemons, quien sin tener protagonismo y compartir un breve instante, nos entrega los minutos más tensos, horribles, angustiantes y brutales de la película.
Porque a la larga, da lo mismo si eres americano, sino ¿cuán americano eres?
Guerra Civil se perfila fácil como candidata para mi Top 10 de fin de año. Tiene una fotografía hermosa, una banda sonora envolvente, personajes con los que te puedes identificar, y una historia que, si bien sientes que llegaste tarde porque el conflicto está en su punto más alto, simplemente no importa, lo disfrutas igual.
No todo tiene que tener inicio, intermedio y final. A veces sirve partir ya con la historia avanzada y que vayas aprendiendo de esta mientras corre su tiempo.
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