Francisca Cabrini nació en Sant'Angelo Lodigiano, en Lombardía (Italia). Tomó los votos religiosos en 1877, convirtiéndose en la madre superiora del orfanato Casa de la Providencia en Codogno, donde ejercía la enseñanza. En 1880 se cerró el orfanato y se convirtió en una de las siete miembros fundadores del Instituto de las Hermanas Misioneras del Sagrado Corazón de Jesús. En 1888 El Obispo de Piacenza, San Juan Bautista Scalabrini la invita a colaborar con sus misiones en América.
América no era el destino que tenía pensado inicialmente, pero los niños de cualquier lugar era su prioridad, salvar vidas de inocentes. Y así, junto a un grupo de hermanas, va a este nuevo destino, un Nueva York plagado de miseria para los inmigrantes italianos, donde la misma Iglesia los tiene abandonados. Una ardua labor le viene a esta mujer, que con una salud debilitada pero el coraje de mil motores está dispuesta a salvar el futuro de pequeños abandonados, de dar sentido a sus vidas. Encontrándose con muchas dificultades, principalmente por ser mujer, se le da la espalda una y otra vez, pero ella es tenaz, y la fuerza de su deseo, ese deseo de verdad, que pocas personas manifiestan de corazón ella lo tenía. No importaba contra quién luchar, ella y sus hermanas tenían un propósito. Y no bajó los brazos. Dio esperanza, dio vida, dio sentido al día a día.
Una historia muy bien ambientada, bien actuada con grandes consagrados del cine, buen vestuario y maquillaje. Bien editada, una cinta que llena el alma de esperanza, de hacernos pensar positivamente, en no ser egoístas, en mirar al lado y tender una mano, en confiar y dar esperanza.
El guion es simple pero muy centrado en la esperanza, en los conflictos y en los cambios.
Y una música bella.
"Las mujeres podemos hacer cosas que los hombres no", decía, pero no como una consigna feminista, sino como una oportunidad que, como mujeres podemos, realizar labores en conjunto con todos, nada de feminismo sino de compañerismo y respeto.
Pues las buenas obras salen en trabajos conjuntos cuando hay buenos corazones, manos para crear y dinero, sí, dinero para conseguir lo material que es necesario, porque ese plato de comida caliente y agradable irá con un gesto cariñoso y compañía que te llenará el alma.
Canonizada en su momento, es un faro para muchos, donde demuestra qué es ser un cristiano de verdad. El estar en altos mandos observando no, es estar con la gente y servir.
Una película sin grandes pretensiones de marketing, pero necesaria de ver.
Disponible actualmente en Cines.
Ficha técnica
Dirección: Alejandro Monteverde
Guion: Alejandro Monteverde y Rod Barr
Música: Gene Back
Fotografía: Gorka Gómez Andreu
Protagonistas: Cristiana Dell'Anna, David Morse, Romana Maggiora Vergano, Federico Ielapi, Virginia Bocelli, Rolando Villazón, Giancarlo Giannini, John Lithgow
País: Estados Unidos. 2024
Género: Cine biográfico, drama y cine histórico
Duración: 142 minutos
Idioma(s) Inglés -Italiano
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