domingo, 1 de octubre de 2023

Paradise - Por Carlos Correa Acuña

Disponible en Netflix.

Un vendedor de años de vida, Max -Kostja Ullmann-, es elegido el mejor del año. Realmente lo hace bien, es capaz de convencer a sus donantes de los beneficios que entrega la empresa que representa y del valor agregado que significa ceder tiempo futuro para tener un mejor presente. En algunos casos, esta transacción es la única salida para situaciones que involucran desesperación, condiciones de vida deplorables, ínfimas, o incluso miserables.

Sabemos que Elena -Marlene Tanczik-, fue contacto de Max, sin embargo, ese negocio no prosperó porque se enamoraron, se casaron, y ahora viven muy bien en un amplio departamento ubicado en un excelente distrito. Ambos son felices y buscan tener un hijo, sin embargo la vida les deja de sonreír al momento de producirse un siniestro en su hogar, accidente que el seguro no cubre, y que deja al descubierto que Elena ha hipotecado años de su vida como garantía.

Esta película ofrece varias perspectivas. Primero, el tema vanguardista de su temática distópica, puesto que esta nueva tecnología de transferencia de vida parece imponerse como el nuevo oro de la sociedad. En segundo lugar, ¿quién no haría su mayor esfuerzo por comprar años de vida, o quién no vendería su alma -sus años en este caso-, al estar en una posición crítica? En tercer término, el reto económico que significa una revolución de este tipo indudablemente provoca una separación entre vencedores y perdedores, lo que siempre acarrea resentimientos, divisiones, y una gran sed de venganza y/o reivindicación por una causa justa.

Boris Kunz firma un guion conjunto con Simon Amberger y Peter Kocyla que resulta interesante gracias a una acertada combinación de una visión futurista que choca de frente con los principios morales involucrados. Desde ya llama la atención que mencionen a quienes ceden sus años como “donantes”, porque en rigor esta compra, o transferencia, es una venta hecha y derecha. Estamos hablando de una compraventa de tiempo, el bien más preciado -porque finalmente es vida-, y donde también es evidente que la parte más delgada corresponde a quien ofrece vender y la más gruesa para quien obtiene dicho tesoro.

Poco sabemos de los efectos que se producen una vez realizados los procedimientos, los vamos descubriendo. Casi automáticamente se produce el envejecimiento y el rejuvenecimiento, en un efecto inversamente proporcional que provoca inmediatos cuestionamientos. El enriquecimiento y poder que la empresa biotecnología Aeon obtiene gracias a su gestión es innegable, y por eso no es extraño que tenga fieros detractores, que en este caso están representados por un orgánico llamado “Grupo Adam”, que se ha propuesto tomar represalias también contra los beneficiarios, independiente de sus condiciones o buenas intenciones.

Pasando de lo futurista a la dimensión ética, es en esta última donde se sitúa el mayor conflicto que esta película alemana pone sobre la mesa. En pocas palabras, podría reducirse a que una cosa es que esto le pase al resto y otra muy distinta que me pase a mí. En ese momento, el giro puede ser de 180 grados, radical, pasando de defender un modelo, a combatirlo en todos sus puntos, vulnerables y también en los no vulnerables.

“Paradise”, si bien no innova en cuanto a la dimensión de la transacción del tiempo por conveniencia económica, sí ofrece una línea interesante en la evolución del comportamiento de sus personajes. Hay allí cambios, profundos, que quizá necesitan un poco más de elaboración, pero que sin embargo quedan suficientemente a la vista como para representar adecuadamente un dilema que tal vez no está muy lejos de nosotros y que podríamos hoy día ejemplificar con el real acceso a la salud para la mayoría de la población.

Ágil y bien filmada por Boris Kunz, aún tomando en cuenta ciertos baches narrativos producto de su edición, esta película entretiene y ofrece bastantes tema de conversación. Convengamos que no es necesariamente su objetivo sentar las bases de un debate ético-moral, pero que intente exponer algunos puntos y deje otros para la reflexión en nuestro lado, siempre resulta más interesante que una argumentación débil y solo funcional a una determinada acción. Tal vez por ello las casi dos horas no se sienten largas, y permitan pensar en una continuación, porque la historia queda completamente abierta gracias a una buena asignación de caracteres y roles.

Ficha técnica

Título original: Paradise
Año: 2023
Duración: 109 minutos
País: Alemania
Compañías: NEUESUPER. Distribuidora: Netflix
Género: Ciencia ficción. Acción. Thriller
Guion: Simon Amberger, Peter Kocyla, Boris Kunz
Música: David Reichelt
Fotografía: Christian Stangassinger
Reparto: Kostja Ullmann, Corinna Kirchhoff, Marlene Tanczik, Iris Berben, Alina Levshin, Lisa-Marie Koroll
Dirección: Boris Kunz

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