Venganza Silenciosa - Por Jackie O.

"Las acciones valen más que mil palabras"

Los primeros minutos estamos algo desconcertados, vemos a un hombre que viste un sweater navideño correr, correr y correr, con rastros de sangre, y dos vehículos en una persecución, disparándose entre ellos.
Él, Godluck, tiene la adrenalina a full y se enfrenta sin medir consecuencias con estos malandrines, y sale herido. Específicamente, se mira a los ojos con su atacante y este, con mucha calma, le dispara en la garganta, dejándolo desangrarse.

De un momento a otro lo vemos en el hospital, un vacío de guión, qué salto es este. Su mujer ensangrentada está ahí preocupada.
Aún no sabemos que ha pasado, nos lo preguntamos.
Godluck no solo tiene un disparo en la garganta que hizo que perdiera sus cuerdas vocales, sino que un disparo en la espalda donde tendrá que hacer los esfuerzos por volver a caminar bien.
Mientras está en el hospital, frustrado por su situación, y su esposa a su lado, comenzamos a meternos en sus recuerdos.

Cuando le dan de alta, es lo peor para él, sus recuerdos se hacen presentes y nos enteramos de que en vísperas de Navidad, mientras disfrutaba en el antejardin con su pequeño hijo y esposa, dos bandas de maleantes rivales, en una persecución en automóvil, comienzan a dispararse, y una "bala loca" alcanza a este menor y muere.
Un matrimonio desconsolado, ella retoma su trabajo, es su forma de canalizar el dolor, la relación con su esposo se quebró, él se vuelve alcohólico y distante, además no tiene voz. Se encerró en su pena.
Hasta que un día encuentra la tarjeta de un detective que lo fue a visitar al hospital, lo va a ver, pero se demoran en atender, y comienza a mirar las fotos de la pared encontrándose con la de su atacante y pandilla. Toma una decisión y se retira del lugar. El policía lo ve irse.
Es marzo, y decide tomar venganza, la justicia no es para él, él será juez y verdugo, por lo que su mentalidad cambia y comienza a ejercitarse, tomar clases de disparo, aprende artes marciales, de manejo agresivo y un sin fin de cosas. Marca el calendario donde, en la misma fecha del asesinato de su hijo, los matará a todos. Es su juramento.

Así y predeciblemente vemos como este hombre ya educado en varias disciplinas hace su justicia. Lo vemos actuar en lugares y situaciones exageradas. Pero el final, por muy predecible que se vea, ¿qué sucederá? Él muere tranquilo porque se vengó, o vive consciente de que hizo algo malo pero no le importan las consecuencias?

Tenemos muchas escenas de acción exageradas, inverosímiles otras, pero te mantiene prendido en todo momento, aunque no logra encantar del todo. John Woo al dirigir se va perdiendo entre la coherencia de su guión y la profundidad de las actuaciones, no dando personajes secundarios sólidos.
Lo curioso de esta cinta que sale de lo común es que nadie habla, solo se escuchan transmisiones radiales y sonidos ambiente. Nadie conversa, incluso se escriben por WhatsApp. Novedoso, no original, pero se agradece su cuota de ingenio donde nos deja en claro que las acciones valen más que mil palabras, pero juega en contra que no todos son buenos actores y actrices, ya que al no haber diálogos deben gesticular con precisión.
Pero hay agunas escenas de acción bien coreografiadas.

Cinta que nos muestra realidades, como estar en el momento y lugar inadecuado, de las pandillas enemigas e incontrolables por la autoridad, del quiebre matrimonial donde ambos deben poner de su parte ya que las culpas son compartidas, sobre el duelo y pasar por sus ciclos pidiendo ayuda de profesionales, si es necesario. De la ira. De perdonarse.

Estamos ante una película violenta, donde no hay paz solo tormento.

Ficha técnica

Título Original: Silent Night
Director: John Woo
Duración. 104 minutos

Año: 2023

País: EEUU

Guion: Robert Archer Lynn
Música: Marco Beltrami
Fotografía: Sharone Meir
Elenco: Joe Kinnamman, Catalina Sandino Moreno, Kid Cudi, Vinny O’Brien, Yoko Hamamura, John Pollack, Anthony Giulietti y Harold Torres.