Corto animado ganador del Oscar el 2001 como mejor Cortometraje de Animación, Gran premio y Premio del público en el Festival de Annecy en Francia, y Mejor cortometraje Internacional de Animación en el Festival de Clermont-Ferrand, también en Francia.
Tiene entre sus virtudes el no poseer diálogos, con lo cual deja todo el relato al desarrollo de la figura animada y la música.
Esta animación cuenta con los ingredientes de "art house", pues se desarrolla con una gran libertad creativa y tiene recursos narrativos no necesariamente convencionales del cine.
La música, aquí, es clave en la ambientación, ocupando toda la banda de sonido con piano y acordeones y repitiéndose constantemente.
Es interesante la construcción de primeros planos para destacar la naturaleza y el paso del tiempo a través de las estaciones; hablan de las escalas del tiempo cinematográfico y lo marcan.
Los personajes ocupan el espacio en el encuadre sin abarcar todo el cuadro, solo lo justo y necesario.
Los cuadros pintadas con dibujos nos recuerdan los bocetos del arte chino tanto en sus líneas como en el color.
Es un corto emotivo de una pérdida, pero la hija descubrirá que la vida se puede transformar y no es necesario ir a buscar a otros lugares si los que amamos están en nuestro ser.
Invitación a una mirada en la rueda de la vida, evocando emociones intensas y posibles reencuentros de pérdidas que, con una segunda vuelta, nos daremos cuenta que nunca se han ido, sino que viven en nosotros.
Sencillo corto para una profunda reflexión del espectador.
Disponible en YouTube.
Ficha técnica
Título original: Father and Daughter
País: Holanda-Inglaterra
Duración: 9 minutos
Director: Michael Dudok de Wit
Animación: Michael Dudok de Wit and Arjan Wilschut
Sonido: Jean-Baptiste Roger
Género: Drama, animación, art-house
Productora: Cinété and Cloudrunne
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