Intensa, realista, y esencialmente desgarradora, resulta ser esta película dirigida por el italiano Matteo Garrone. La explotación y violencia que deben enfrentar estos dos jóvenes senegaleses es máxima, un viaje donde su abrupta pérdida de inocencia se combina con unas pequeñas gotas de esperanza junto a una resiliencia que emerge, literalmente, desde sus vísceras.
Desde su natal Dakar, donde el ambiente familiar es protegido a pesar de las acuciantes necesidades económicas, estos primos, Seydou -Seydou Sarr-, y Moussa -Moustapha Fall-, se plantean un desafío que les quita el sueño. Quieren buscar un nuevo rumbo y cumplir su sueño de ser cantantes famosos en Italia. Han decidido ahorrar cada moneda, cada billete, cada centavo para lograrlo, porque para llegar a Europa necesitan dinero, pero también una gran dosis de convicción. No es fácil la decisión. En un cierto sentido es huir, o escapar, pero en el otro puede ser “LA” oportunidad para surgir y desarrollar todas sus capacidades al máximo nivel posible.
El escenario que muestra esta cinta es angustiante. El trayecto de por sí es larguísimo. Implica transitar desde la costa africana hacia Nigeria, luego atravesar el desierto del Sahara, recalar en Tripoli, Libia, para desde allí cruzar el mediterráneo hacia las costas Sicilianas. Eso, si todo sale bien. Parecen cuatro pasos de lo más lógicos, sin embargo lo que encuentran en el camino son peligros que no estaban en ninguno de sus peores vaticinios, porque así es la migración, está sujeta a todo tipo de imprevistos, agravados por el tráfico de personas y una corrupción generalizada, explotación humana diversificada en todas sus formas que llega incluso hasta la tortura, con condiciones infrahumanas que ponen en peligro la integridad y la vida de personas que son, en extremo, vulnerables.
Los engaños están a la orden del día, pero los primos desconfían. Así y todo, es fácil dejarse llevar por cualquiera que les preste atención y que les prometa el oro y el moro a cambio de dinero. Como ya están inmersos en el desafío, por ningún motivo quieren renunciar, ni menos regresar, porque eso sería rendirse ante una adversidad que creen capaces de superar. Obtienen pasaportes, atraviesan el desierto y allí, los contrastes son tan grandes que el espejismo no es solo son un oasis, es también la ensoñación, aquello que quieren ver, y que les moviliza para seguir adelante.
El drama se acrecienta cuando ambos se separan luego de ser interceptados por una patrulla fronteriza. Responde el hecho a un punto de inflexión, porque la sensación de abandono no puede ser más grande. ¿En qué momento se pasa de una tragedia absoluta a generar resiliencia? Porque cuando vemos esclavitud no imaginamos que pudiera revertirse tal situación. Sin embargo, en los peores momentos suelen aparecer las mayores capacidades de los seres humanos, y Seydou parece volver a nacer. Es cierto que recibe la ayuda de un “ángel” en su camino, pero es él quien comienza a pararse frente al mundo de forma distinta, con otra mirada, con cuidado, preocupación y, principalmente, con amor.
“Io capitano”, aunque predecible en su construcción y desarrollo, tiene un gran espacio para reflexionar. Ayuda muchísimo que sus protagonistas sean actores aficionados, porque entregan frescura y naturalidad al relato, lo hace verosímil. De hecho son sus mismos nombres los usados, simples y cercanos, porque la historia la vamos construyendo nosotros como cómplices de esta odisea de marca mayor. Es impactante el tránsito desde esa fragilidad suprema hacia una valentía que nos deja, literalmente, sin aliento. ¿Cómo se produce? ¿Cuánto hay de las circunstancias lo provocan? Cientos quedan en el camino y no lo logran nunca, pero, ¿estos primos lograrán finalmente concretar su objetivo? El mensaje central tiene que ver con la decisión y la determinación con que se enfrenta la adversidad y cómo se logra pasar de la pasividad a la acción, independiente del resultado final, aunque sin duda, y por las características de esta película, se transforme en un aspecto trascendente. Imperdible.
Ficha técnica
Título original: Io capitano
Año: 2023
Duración: 121 minutos
País: Italia
Compañías: Coproducción Italia-Bélgica-Francia; Archimede, RAI Cinema, Tarantula, Pathé, Logical Content Ventures, Proximus
Género: Drama | Inmigración. Supervivencia. África. Drama social
Guion: Massimo Ceccherini, Matteo Garrone, Massimo Gaudioso, Andrea Tagliaferri
Música: Andrea Farri
Fotografía: Paolo Carnera
Reparto: Seydou Sarr, Moustapha Fall
Dirección: Matteo Garrone
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jueves, 7 de marzo de 2024
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