¿Existe la perfección? “Lo mejor es enemigo de lo bueno”, decía mi padre, y en esta película el dicho parece apuntar de lleno. ¿Por qué? Veamos.
Iris -Sophie Thatcher-, y Josh -Jack Quaid-, parecen ser la pareja perfecta. Enamorados, se tienen el uno al otro, sin ataduras ni complejos. Amantes de la tecnología, conducen un coche autónomo y todo les sale a pedir de boca. Pero todo cambia cuando son invitados a pasar un fin de semana en una apartada casa en compañía de un grupo de amigos. Allí saldrán a la luz detalles que no conocíamos, y la historia se quebrará definitivamente.
Drew Hancock escribe y dirige esta cinta, un thriller de ciencia ficción que, con muy pocos materiales, logra tenernos en suspenso por una hora y media. Ya lo señalaba al comienzo, la perfección y la tecnología juegan un papel esencial en el guion, porque llegamos a esto dado que existe una empresa -FindYourCompanion.com-, que ofrece encontrar el compañero(a) perfecto(a), según las necesidades de cada persona, para satisfacción de todos y cada uno de sus deseos.
La cinta comienza en modo tradicional pero muy pronto surgen las primeras sospechas. La búsqueda afanosa por lo “correcto”, las posturas sociales, el fingir o sonreír para ser aceptados. También genera dudas el comportamiento “sumiso” de Iris, versus el empoderamiento vigoroso de Kat -Megan Suri-, la anfitriona, por lo demás, muy cercana a Josh. Iris y Kat son opuestas, agua y aceite, luz y sombra, desparpajo y timidez total.
Pero viene el giro radical que no podemos anticipar de ninguna manera, y eso lo cambia todo.
Estamos frente a lo que podríamos asociar a un capítulo extendido de la ya icónica “Black Mirror”. La premisa, estupenda, “se desarrolla in crescendo”, y ciertamente no sabemos en qué podría terminar una bola de nieve que se agiganta con cada minuto que pasa. ¿Qué es lo que la tecnología pervierte? ¿Qué papel juega el amor en todo esto?
“Companion” es hábil para tratar temas de fondo y bien actuales. Es el poder lo que está cuestionado, el abuso, la cultura de lo utilitario y, sobre todo la idea de que si algo no sirve, se desecha. El cruce con lo real es absoluto, por más que se recurra a las artimañas robóticas para representar las situaciones. Parece que no estamos tan lejos de los escenarios que nos muestran. De hecho, los comportamientos, aquello verdaderamente esencial en este filme, son parte de lo cotidiano y tal vez donde debiéramos poner nuestra mayor atención. La tecnología es accesoria; usarla para bien o para mal es asunto de formación y criterio humano, y eso viene a ser siempre lo más complejo y delicado.
Ficha técnica
Título original: Companion
Año: 2025
Duración: 97 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: BoulderLight Pictures, New Line Cinema, Vertigo Entertainment. Productor: Zach Cregger. Distribuidora: Warner Bros.
Género: Thriller. Ciencia ficción | Inteligencia artificial. Terror tecnológico
Guion: Drew Hancock
Música: Hrishikesh Hirway
Fotografía: Eli Born
Reparto: Sophie Thatcher, Jack Quaid, Lukas Gage, Megan Suri, Harvey Guillén, Rupert Friend
Dirección: Drew Hancock

La misión global de SIGNIS es colaborar con profesionales de los medios de comunicación y ayudar a transformar la cultura a través de valores artísticos, promoviendo la dignidad humana, la justicia y la reconciliación. La directiva en Chile está formada por Juan Pablo Donoso, Presidente, Elizabeth Salazar T., Vicepresidenta, y Jackie P. Olivo, Secretaria. Son miembros, Bernardita Santander Navarro, Pablo Crocquevielle, José Luis Nicolás, Alejandro Caro Contreras y Carlos Correa Acuña.
viernes, 31 de enero de 2025
Emilia Pérez - Por José Luis Nicolás
Manitas del Monte es uno de los criminales más temidos de México. Pero tanto poder y dinero malamente acumulado no es suficiente. Los únicos que iluminan su oscura existencia son sus dos pequeños hijos, pero ni ellos pueden liberarlo de la vida que eligió. Para salir de la espiral de desgracia que conforma su mundo deberá abandonar su naturaleza masculina y convertirse en una mujer. En este empeño, convoca a la discreta abogada Rita Mora Castro, quien arriesgará todo para cumplir con los deseos de su empleador.
Esta es Emilia Pérez, una película dirigida por Jacques Audiard. El propio Audiard adapta aquí la novela Écoute de Boris Razon. Pero no solo acomoda el relato literario, también lo musicaliza. Para conseguir esta ambiciosa empresa, el realizador francés se hizo acompañar de Clement Ducol y Camille. Ambos le dan melodía y ritmo a los diálogos del filme.
Esta cinta francesa, ambientada mayoritariamente en México es protagonizada por una española: Karla Sofia Gascón en el rol de “Manitas-Emilia”. Con una dilatada carrera, que comenzó a fines de la década de 1980, no es hasta 2013 que logró cierto renombre gracias a la película Nosotros, los nobles. En ese entonces se llamaba Carlos. Cinco años después hizo pública su transición.
A Karla Sofia la secunda Zoe Saldana, una intérprete oriunda de New Jersey (Estados Unidos) pero con raíces dominicanas. Saldana no es una novata en la gran pantalla: Las sagas de Star Trek, Avatar y Los Guardianes de la Galaxia conforman los episodios más destacados de su currículum. Ella es la licenciada Mora Castro: una mujer postergada por la necedad del “patriarcado”.
También figura entre las principales del reparto Selena Gómez. Otrora promesa, que hizo sus primeras artes con apenas 10 años de edad en el show de Barney y sus amigos -y luego como parte del elenco permanente de las series de Disney Channel-, en este largometraje da vida a Jessi: la infiel esposa de Manitas del Monte.
Karla Sofía Gascón se lleva los aplausos imprimiendo credibilidad a los dos roles que encarna. Zoe Saldana no se queda atrás y consigue con destreza las exigencias de la producción: su español es fluido cuando habla y canta. De Selena Gómez se esperaba más. Esta reconocida actriz y cantante es empañada por una edición que minimiza su presencia en pantalla, y solo la hace relucir hacia el final de la película.
Con todo, Emilia Pérez presenta de forma aceptable una historia que buscará probar que la redención no es posible a través del engaño: la mentira tiene “patas cortas” y es definitivamente letal.
En cines.
Ficha técnica
Año: 2024
Duración: 132 minutos
País: Francia
Dirección: Jacques Audiard
Guión: Jacques Audiard. Novela: Boris Razon
Reparto: Karla Sofìa Gascón, Zoe Saldana, Selena Gómez
Música: Clément Ducol, Camille
Fotografía: Paul Guilhaume
Compañías: Coproducción Francia-México; Why Not Productions, Page 114, Pathé, France 2 Cinema, Saint Laurent, Pimienta Films, Zima Entertainment. Distribuidora: Pathé
Esta es Emilia Pérez, una película dirigida por Jacques Audiard. El propio Audiard adapta aquí la novela Écoute de Boris Razon. Pero no solo acomoda el relato literario, también lo musicaliza. Para conseguir esta ambiciosa empresa, el realizador francés se hizo acompañar de Clement Ducol y Camille. Ambos le dan melodía y ritmo a los diálogos del filme.
Esta cinta francesa, ambientada mayoritariamente en México es protagonizada por una española: Karla Sofia Gascón en el rol de “Manitas-Emilia”. Con una dilatada carrera, que comenzó a fines de la década de 1980, no es hasta 2013 que logró cierto renombre gracias a la película Nosotros, los nobles. En ese entonces se llamaba Carlos. Cinco años después hizo pública su transición.
A Karla Sofia la secunda Zoe Saldana, una intérprete oriunda de New Jersey (Estados Unidos) pero con raíces dominicanas. Saldana no es una novata en la gran pantalla: Las sagas de Star Trek, Avatar y Los Guardianes de la Galaxia conforman los episodios más destacados de su currículum. Ella es la licenciada Mora Castro: una mujer postergada por la necedad del “patriarcado”.
También figura entre las principales del reparto Selena Gómez. Otrora promesa, que hizo sus primeras artes con apenas 10 años de edad en el show de Barney y sus amigos -y luego como parte del elenco permanente de las series de Disney Channel-, en este largometraje da vida a Jessi: la infiel esposa de Manitas del Monte.
Karla Sofía Gascón se lleva los aplausos imprimiendo credibilidad a los dos roles que encarna. Zoe Saldana no se queda atrás y consigue con destreza las exigencias de la producción: su español es fluido cuando habla y canta. De Selena Gómez se esperaba más. Esta reconocida actriz y cantante es empañada por una edición que minimiza su presencia en pantalla, y solo la hace relucir hacia el final de la película.
Con todo, Emilia Pérez presenta de forma aceptable una historia que buscará probar que la redención no es posible a través del engaño: la mentira tiene “patas cortas” y es definitivamente letal.
En cines.
Ficha técnica
Año: 2024
Duración: 132 minutos
País: Francia
Dirección: Jacques Audiard
Guión: Jacques Audiard. Novela: Boris Razon
Reparto: Karla Sofìa Gascón, Zoe Saldana, Selena Gómez
Música: Clément Ducol, Camille
Fotografía: Paul Guilhaume
Compañías: Coproducción Francia-México; Why Not Productions, Page 114, Pathé, France 2 Cinema, Saint Laurent, Pimienta Films, Zima Entertainment. Distribuidora: Pathé
jueves, 30 de enero de 2025
Amenaza en el Aire - Por Jackie O.
"Vuelo turbulento"
Madelyn Harris es una agente federal que tiene como misión transportar desde una ciudad a otra a un relevante testigo, Winston, quien debe ir a la corte a testificar contra un mafioso. Su testimonio es clave, así que todo se realiza con sumo cuidado; solo la agente, el testigo y el piloto de la aeronave que los transportará es el grupo que viaja, casi nadie de la oficina sabe de esta misión con el fin de no alertar y salga a la perfección.
Solo tres personas en un pequeño aeroplano, en un viaje que no debería durar tanto. Pero a los pocos minutos nos enteramos que el piloto fue contratado para matar a la agente y en especial al testigo. El mafioso debe seguir siendo intocable, por lo que se transforma en un viaje caótico.
Estamos ante una historia con buenos elementos y además difíciles, como, por ejemplo, pocos personajes. Tenemos a tres personas, y un par de otros que solo escuchamos sus voces. Otro elemento es el espacio, pequeño y sin salida, un pequeño avión que va cruzando gélidas montañas. Con estos elementos, la tensión debe apoderarse, más cuando sabemos quien es el antagonista principal. ¿Cómo salir de esto?
Las actuaciones son buenas, empatizas con todos: uno es un insoportable hablador que está muy asustado, ella una contenida policía, y el malvado, encantador lunático, un rol que Mark debe seguir explotando más.
Y como señalé, otras voces al teléfono que son protagonistas importantes que también arman la trama.
¿Pero, solo el piloto es el malvado en esta historia? Nos hacen dudar, o ¿solo es nuestra imaginación?
La fotografía es muy bella, estamos volando sobre esas hermosas y peligrosas montañas.
Como estamos ante un escenario que es además pequeño, como dije, los movimientos de cámaras deben ser precisos y acá estuvo bien. Cada plano se muestra bien, y me encantan los primeros y primerísimos planos que le dan esa intimidad que provoca.
Temas como el cumplimiento del deber de una agente del estado que debe proteger a un testigo, pero que, además, mantiene un secreto que de a poco se devela, lo que la tiene afectada. Así como de la ambición de las personas, donde el dinero fácil y mal habido provoca tentaciones y problemas. Eso y más encontraremos en esta película.
Un thriller que te mantiene expectante, y aunque esperaba mucho más tensión, eso no le resta mérito, ya que estamos ante una cinta de buen entretenimiento. Además, Gibson es un buen director.
Ficha técnica
Título original: Flight Risk.
Dirección: Mel Gibson
Guion: Jared Rosenberg
ProtagonistasMark Wahlberg, Topher Grace, Michelle Dockery
Estados Unidos. Año 2025
Madelyn Harris es una agente federal que tiene como misión transportar desde una ciudad a otra a un relevante testigo, Winston, quien debe ir a la corte a testificar contra un mafioso. Su testimonio es clave, así que todo se realiza con sumo cuidado; solo la agente, el testigo y el piloto de la aeronave que los transportará es el grupo que viaja, casi nadie de la oficina sabe de esta misión con el fin de no alertar y salga a la perfección.
Solo tres personas en un pequeño aeroplano, en un viaje que no debería durar tanto. Pero a los pocos minutos nos enteramos que el piloto fue contratado para matar a la agente y en especial al testigo. El mafioso debe seguir siendo intocable, por lo que se transforma en un viaje caótico.
Estamos ante una historia con buenos elementos y además difíciles, como, por ejemplo, pocos personajes. Tenemos a tres personas, y un par de otros que solo escuchamos sus voces. Otro elemento es el espacio, pequeño y sin salida, un pequeño avión que va cruzando gélidas montañas. Con estos elementos, la tensión debe apoderarse, más cuando sabemos quien es el antagonista principal. ¿Cómo salir de esto?
Las actuaciones son buenas, empatizas con todos: uno es un insoportable hablador que está muy asustado, ella una contenida policía, y el malvado, encantador lunático, un rol que Mark debe seguir explotando más.
Y como señalé, otras voces al teléfono que son protagonistas importantes que también arman la trama.
¿Pero, solo el piloto es el malvado en esta historia? Nos hacen dudar, o ¿solo es nuestra imaginación?
La fotografía es muy bella, estamos volando sobre esas hermosas y peligrosas montañas.
Como estamos ante un escenario que es además pequeño, como dije, los movimientos de cámaras deben ser precisos y acá estuvo bien. Cada plano se muestra bien, y me encantan los primeros y primerísimos planos que le dan esa intimidad que provoca.
Temas como el cumplimiento del deber de una agente del estado que debe proteger a un testigo, pero que, además, mantiene un secreto que de a poco se devela, lo que la tiene afectada. Así como de la ambición de las personas, donde el dinero fácil y mal habido provoca tentaciones y problemas. Eso y más encontraremos en esta película.
Un thriller que te mantiene expectante, y aunque esperaba mucho más tensión, eso no le resta mérito, ya que estamos ante una cinta de buen entretenimiento. Además, Gibson es un buen director.
Ficha técnica
Título original: Flight Risk.
Dirección: Mel Gibson
Guion: Jared Rosenberg
ProtagonistasMark Wahlberg, Topher Grace, Michelle Dockery
Estados Unidos. Año 2025
Dragon Ball Daima - Por Elizabeth Salazar T.
"El regreso de Goku a las aventuras"
Su gran legión de fanáticos, va a estar contenta con el arribo de los tres primeros episodios de “Dragon Ball Daima”, en los cines chilenos. Esta vez Goku y sus compañeros, llevaban una vida tranquila hasta que, de repente se hicieron pequeños de forma inexplicable. Pronto descubren que la causa podría estar vinculada a un mundo conocido como el “Reino Demoníaco”, donde un misterioso joven Majin llamado Glorio aparece ante ellos.
Con los doblajes originales latinoamericanos, ofrece la experiencia definitiva de Dragon Ball para el público hispanohablante y cuenta con un elenco estelar que incluye a Mario Castañeda como Goku, Laura Torres como Goku (Mini), Analiz Sánchez como el Supremo Kai (Mini) y José Ángel Torres como Glorio.
Han pasado cuarenta años del estreno de “Dragon Ball”, creado por Akira Toriyama. Su protagonista Goku, ha traspasado generaciones. Grandes y chicos se divierten con las aventuras de este personaje, que tiene un humor muy particular, es irreverente y simpático.
Una gran experiencia para los fanáticos de la saga, que disfrutan de gran manera los episodios, manifestando cariño por los personajes y divirtiéndose con el entrañable Goku.
Director: Yoshitaka Yashima
Duración: 75 Minutos.
Distribuye: BF Distribution
Su gran legión de fanáticos, va a estar contenta con el arribo de los tres primeros episodios de “Dragon Ball Daima”, en los cines chilenos. Esta vez Goku y sus compañeros, llevaban una vida tranquila hasta que, de repente se hicieron pequeños de forma inexplicable. Pronto descubren que la causa podría estar vinculada a un mundo conocido como el “Reino Demoníaco”, donde un misterioso joven Majin llamado Glorio aparece ante ellos.
Con los doblajes originales latinoamericanos, ofrece la experiencia definitiva de Dragon Ball para el público hispanohablante y cuenta con un elenco estelar que incluye a Mario Castañeda como Goku, Laura Torres como Goku (Mini), Analiz Sánchez como el Supremo Kai (Mini) y José Ángel Torres como Glorio.
Han pasado cuarenta años del estreno de “Dragon Ball”, creado por Akira Toriyama. Su protagonista Goku, ha traspasado generaciones. Grandes y chicos se divierten con las aventuras de este personaje, que tiene un humor muy particular, es irreverente y simpático.
Una gran experiencia para los fanáticos de la saga, que disfrutan de gran manera los episodios, manifestando cariño por los personajes y divirtiéndose con el entrañable Goku.
Director: Yoshitaka Yashima
Duración: 75 Minutos.
Distribuye: BF Distribution
miércoles, 29 de enero de 2025
Amenaza en el Aire - Por Carlos Correa Acuña
El transporte de un informante clave en una avioneta privada marca la trama de esta nueva película dirigida por Mel Gibson. Se trata de Winston -Topher Grace-, quien debe declarar como testigo contra un importante jefe de la mafia. A cargo de su custodia se encuentra Madelyn Harris -Michelle Dockery-, Sheriff adjunta y nuevamente responsable de una operación de campo luego de algún tiempo ausente. El tercer personaje es el piloto de la aeronave, Daryl Booth -Mark Wahlberg-, un tipo con experiencia en aventuras aéreas y que no desperdicia ocasión para echar a la broma cualquier conversación. El tema es que, a poco andar (o volar, mejor dicho), Harris comienza a sospechar de Booth, situación que se confirma tras algunos inesperados acontecimientos.
Este filme es bastante sencillo, tanto en su premisa como en su ejecución. La mayoría del tiempo están solo los tres protagonistas en pantalla, dentro del avión, por lo que no existen muchos elementos distractores que desvíen la atención hacia otros temas. Mel Gibson filma bien, va directo al grano, siembra las sospechas mientras construye una excelente representación de un vuelo sobre montañas nevadas y preciosos paisajes.
El manejo de la tensión es el punto más destacado de “Flight Risk”, su título original. La construcción del suspenso, aquello que nos mantiene en vilo, está muy lograda. Con escasos elementos, Gibson logra concentrar el nervio. Sabemos que una pelea, o el uso de armas de fuego en un avión puede traer consecuencias mortales. Pues bien, el director las reserva para momentos especiales que están muy bien diseñados en el paño integral del relato.
En el momento en que el avión pierde el rumbo y prácticamente no existe comunicación con el exterior, un teléfono satelital lo pone nuevamente en órbita. Ahí comienza la segunda parte de la película, con la adición de personajes que están en tierra y que van armando un rompecabezas que es bastante más complejo de lo que imaginábamos. Hay historia pasada en Madelyn y detalles desconocidos sobre Winston. La mafia no está quieta, se encuentra en plena operación, por lo que es vital lo que sucede tanto en el aire como en el lugar donde les están esperando.
¿En quién confiar? La pregunta surge espontáneamente, porque están muy bien puestos los elementos para que podamos imaginar libremente lo que sucede en los operativos terrestres solo a través de acotadas conversaciones telefónicas, algunas hechas casi en clave. La secuencia final es para agarrarse al asiento. Está muy bien filmada y parece muy real. Excelente esfuerzo de producción que entrega justo lo que uno espera en escenas de ese tipo.
“Amenaza en el Aire” funciona perfectamente. Además, tiene una duración óptima -una hora y media-, tiempo suficiente para acompañar este accidentado viaje y proponer nosotros mismos la continuación de la historia. ¿Será que viene algo más para la Sheriff adjunta Madelyn Harris? Muy pronto podremos salir de la duda.
Ficha técnica
Título original: Flight Risk
Año: 2025
Duración: 91 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Hammerstone Studios, Davis Entertainment, Icon Productions, Flight Risk Films, Kathy McKee Casting
Género: Thriller. Acción | Aviones
Guion: Jared Rosenberg
Fotografía: Johnny Derango
Reparto: Mark Wahlberg, Michelle Dockery, Topher Grace
Dirección: Mel Gibson
Este filme es bastante sencillo, tanto en su premisa como en su ejecución. La mayoría del tiempo están solo los tres protagonistas en pantalla, dentro del avión, por lo que no existen muchos elementos distractores que desvíen la atención hacia otros temas. Mel Gibson filma bien, va directo al grano, siembra las sospechas mientras construye una excelente representación de un vuelo sobre montañas nevadas y preciosos paisajes.
El manejo de la tensión es el punto más destacado de “Flight Risk”, su título original. La construcción del suspenso, aquello que nos mantiene en vilo, está muy lograda. Con escasos elementos, Gibson logra concentrar el nervio. Sabemos que una pelea, o el uso de armas de fuego en un avión puede traer consecuencias mortales. Pues bien, el director las reserva para momentos especiales que están muy bien diseñados en el paño integral del relato.
En el momento en que el avión pierde el rumbo y prácticamente no existe comunicación con el exterior, un teléfono satelital lo pone nuevamente en órbita. Ahí comienza la segunda parte de la película, con la adición de personajes que están en tierra y que van armando un rompecabezas que es bastante más complejo de lo que imaginábamos. Hay historia pasada en Madelyn y detalles desconocidos sobre Winston. La mafia no está quieta, se encuentra en plena operación, por lo que es vital lo que sucede tanto en el aire como en el lugar donde les están esperando.
¿En quién confiar? La pregunta surge espontáneamente, porque están muy bien puestos los elementos para que podamos imaginar libremente lo que sucede en los operativos terrestres solo a través de acotadas conversaciones telefónicas, algunas hechas casi en clave. La secuencia final es para agarrarse al asiento. Está muy bien filmada y parece muy real. Excelente esfuerzo de producción que entrega justo lo que uno espera en escenas de ese tipo.
“Amenaza en el Aire” funciona perfectamente. Además, tiene una duración óptima -una hora y media-, tiempo suficiente para acompañar este accidentado viaje y proponer nosotros mismos la continuación de la historia. ¿Será que viene algo más para la Sheriff adjunta Madelyn Harris? Muy pronto podremos salir de la duda.
Ficha técnica
Título original: Flight Risk
Año: 2025
Duración: 91 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Hammerstone Studios, Davis Entertainment, Icon Productions, Flight Risk Films, Kathy McKee Casting
Género: Thriller. Acción | Aviones
Guion: Jared Rosenberg
Fotografía: Johnny Derango
Reparto: Mark Wahlberg, Michelle Dockery, Topher Grace
Dirección: Mel Gibson
Golpe de Suerte en París - Por Juan Pablo Donoso
Aunque mantiene el oficio y el encanto, es una de las obras menores de Woody Allen.
Anécdota que mezcla romance con crimen emulando un tenue suspenso de Hitchcock.
Lo más rescatable son las bellísimas tomas de Paris en otoño, la elegante ambientación, y la habitual espontaneidad de sus actores.
Grata de seguir, con escenas cortas y precisas, aun cuando esta vez los diálogos pecan de innecesaria obviedad.
Tal vez por ser la primera película de Allen hablada completamente en francés, echamos de menos los sarcasmos verbales tan típicos de sus filmes anteriores.
El título responde a la importancia que el azar juega en nuestras vidas. Pero, como se trata de un filme policial se encarga de contradecir al marido de nuestra protagonista quien, en medio sus tropelías, se ufanaba diciendo “Yo provoco la suerte”.
Si bien esta vez lo detectivesco predomina sobre las neurosis y conflictos existenciales de sus personajes, igual aborda temas de infidelidad, crimen, intrigas románticas y de la inexorable mano del destino.
Los actores se ven cómodos en sus roles. Destacamos la presencia de Valerie Lemercier, como la suegra, quien despliega una sabia obsesión a medida que avanzan los misterios de la trama.
Mención especial merece el laureado director de fotografía Vittorio Storaro (Apocalipsis, Novecento, El Último Tango en París), creador del sistema “Univision”, que universaliza los formatos para cine y TV. Aprovechó la fluidez narrativa de Allen para hacer alarde de bellísimas imágenes, internas y externas, de París en otoño.
A pesar de tener una premisa provocativa y un suspenso gradual, la resolución quedó arbitraria y poco impactante, como un soufflé al que le faltó más levadura.
COMEDIA NEGRA FRANCESA DE WOODY ALLEN - DE HERMOSOS COLORES - CON ROMANCE, INTRIGAS, CRÍMEN Y SUSPENSO. AUNQUE DE MENOR NIVEL, DELEITARÁ A LOS FANÁTICOS DE SUS PELÍCULAS.
Ficha técnica
Anécdota que mezcla romance con crimen emulando un tenue suspenso de Hitchcock.
Lo más rescatable son las bellísimas tomas de Paris en otoño, la elegante ambientación, y la habitual espontaneidad de sus actores.
Grata de seguir, con escenas cortas y precisas, aun cuando esta vez los diálogos pecan de innecesaria obviedad.
Tal vez por ser la primera película de Allen hablada completamente en francés, echamos de menos los sarcasmos verbales tan típicos de sus filmes anteriores.
El título responde a la importancia que el azar juega en nuestras vidas. Pero, como se trata de un filme policial se encarga de contradecir al marido de nuestra protagonista quien, en medio sus tropelías, se ufanaba diciendo “Yo provoco la suerte”.
Si bien esta vez lo detectivesco predomina sobre las neurosis y conflictos existenciales de sus personajes, igual aborda temas de infidelidad, crimen, intrigas románticas y de la inexorable mano del destino.
Los actores se ven cómodos en sus roles. Destacamos la presencia de Valerie Lemercier, como la suegra, quien despliega una sabia obsesión a medida que avanzan los misterios de la trama.
Mención especial merece el laureado director de fotografía Vittorio Storaro (Apocalipsis, Novecento, El Último Tango en París), creador del sistema “Univision”, que universaliza los formatos para cine y TV. Aprovechó la fluidez narrativa de Allen para hacer alarde de bellísimas imágenes, internas y externas, de París en otoño.
A pesar de tener una premisa provocativa y un suspenso gradual, la resolución quedó arbitraria y poco impactante, como un soufflé al que le faltó más levadura.
COMEDIA NEGRA FRANCESA DE WOODY ALLEN - DE HERMOSOS COLORES - CON ROMANCE, INTRIGAS, CRÍMEN Y SUSPENSO. AUNQUE DE MENOR NIVEL, DELEITARÁ A LOS FANÁTICOS DE SUS PELÍCULAS.
Ficha técnica
Título Original: Coup de Chance
2023 Tragicomedia negra, romance EE.UU., Francia, Reino Unido - 1, 33 hrs.
Fotografía: Vittorio Storaro
Edición: Alisa Lepselter
Diseño Prod.: Véronique Melery
Actores: Lou de Laâge, Niels Schneider, Melvil Poupaud, Valerie Lemercier
Guionista y Director: Woody Allen
Compañera Perfecta - Por Juan Pablo Donoso
Interesante suposición de lo que ocurriría si los robots reaccionaran frente a la codicia y la maldad humana.
Sobrevendría un impulso libertario, como el de la tierna y sumisa robot Iris (Sophie Thatcher) cuando decide vengarse de Josh, su adorado amo y señor.
El guionista y director Drew Hancock - exitoso en teleseries como Blue Mountain State y Suburgatory - en este, su primer largometraje, expone con claridad su mensaje y lo entrega en un relato fino y rico en sorpresas.
Sin recurrir a “screamers” (manidos sustos imprevistos) opta por un controlado suspenso. Crea una atmósfera inquietante, incluso durante el día, a pleno sol. Buena conjunción de diálogos, ritmo y giros inesperados.
Gradual evolución de Josh, el personaje de Jack Quaid (hijo de Dennis Quaid) quien comienza encantador y que, gracias a la inevitable honestidad de su robot, va revelando facetas menos honorables.
Aborda tanto las virtudes como los peligros de la creciente Inteligencia Artificial en nuestra era tecnológica. Nos advierte de sus peligros, sin predicar ni tampoco abrumarnos. Cosa que agradecemos.
Nos invita a reflexionar sobre los afectos y relaciones personales. Cómo navegamos entre ellas, cómo cambian, y en qué pueden transformarse en un próximo futuro. Expone una realidad en que, gracias a la tecnología, la línea divisoria entre la comunicación y la soledad se hace cada vez más difusa.
Crea un mundo en apariencia futurista pero, a la vez, muy real. Juguetea con elementos de comedia negra mientras por debajo circula una tensión siniestra.
Revela factores ideales, pero que por algo imprevisible podrían fallar.
Deleitará a los aficionados al gore sangriento, a los que aman la ficción tecnológica, o a los que simplemente disfrutan de historias de amor - hétero y gay - bien narradas.
Inocente selección de canciones románticas incidentales, envueltas durante los créditos de inicio y final, en un primoroso fondo rosado.
Advertencia: ¡cuidado, los instintos de LIBERACIÓN y SUPERVIVENCIA también pueden yacer ocultos en la Inteligencia Artificial!
SUSPENSO AMENO, SARCÁSTICO Y PROVOCATIVO SOBRE UN POSIBLE DESTINO DE LA HUMANIDAD. ¿HABRÁ MORAL TODAVÍA?
Ficha técnica
Título Original: Companion
Sobrevendría un impulso libertario, como el de la tierna y sumisa robot Iris (Sophie Thatcher) cuando decide vengarse de Josh, su adorado amo y señor.
El guionista y director Drew Hancock - exitoso en teleseries como Blue Mountain State y Suburgatory - en este, su primer largometraje, expone con claridad su mensaje y lo entrega en un relato fino y rico en sorpresas.
Sin recurrir a “screamers” (manidos sustos imprevistos) opta por un controlado suspenso. Crea una atmósfera inquietante, incluso durante el día, a pleno sol. Buena conjunción de diálogos, ritmo y giros inesperados.
Gradual evolución de Josh, el personaje de Jack Quaid (hijo de Dennis Quaid) quien comienza encantador y que, gracias a la inevitable honestidad de su robot, va revelando facetas menos honorables.
Aborda tanto las virtudes como los peligros de la creciente Inteligencia Artificial en nuestra era tecnológica. Nos advierte de sus peligros, sin predicar ni tampoco abrumarnos. Cosa que agradecemos.
Nos invita a reflexionar sobre los afectos y relaciones personales. Cómo navegamos entre ellas, cómo cambian, y en qué pueden transformarse en un próximo futuro. Expone una realidad en que, gracias a la tecnología, la línea divisoria entre la comunicación y la soledad se hace cada vez más difusa.
Crea un mundo en apariencia futurista pero, a la vez, muy real. Juguetea con elementos de comedia negra mientras por debajo circula una tensión siniestra.
Revela factores ideales, pero que por algo imprevisible podrían fallar.
Deleitará a los aficionados al gore sangriento, a los que aman la ficción tecnológica, o a los que simplemente disfrutan de historias de amor - hétero y gay - bien narradas.
Inocente selección de canciones románticas incidentales, envueltas durante los créditos de inicio y final, en un primoroso fondo rosado.
Advertencia: ¡cuidado, los instintos de LIBERACIÓN y SUPERVIVENCIA también pueden yacer ocultos en la Inteligencia Artificial!
SUSPENSO AMENO, SARCÁSTICO Y PROVOCATIVO SOBRE UN POSIBLE DESTINO DE LA HUMANIDAD. ¿HABRÁ MORAL TODAVÍA?
Ficha técnica
Título Original: Companion
2024 Tragicomedia negra, suspenso psicológico EE.UU. - 1,35 hrs.
Fotografía: Eli Born
Edición: Brett W. Bachman, Josh Ethier
Música: Hrishikesh Hirway
Diseño Prod.: Scott Kuzio
Actores: Sophie Thatcher, Jack Quaid, Harvey Guillén
Guionista y director: Drew Hancock
martes, 28 de enero de 2025
Luz Negra - Por Carlos Correa Acuña
“Pasar sin pena ni gloria” ¿Les suena este dicho? Es duro, porque, en síntesis, significa que aquello a lo que se alude es bastante cercano a la nada misma. Fuerte, pero muy apropiado para esta película, y ojo que me cuento entre los fans de Liam Neeson y he tratado de ver todos sus papeles. Esta casi, casi no la veo, pero me lo propuse. ¿El resultado? Veamos.
Luego de un inicio bien impactante, sobreviene la tragedia y Travis Block -Liam Neeson-, un agente extraoficial del FBI, ingresa al escenario para ayudar al agente Dusty Crane -Taylor John Smith-, que se encuentra devastado por el mal resultado de una operación y está muy cerca de entregar toda la información a la prensa. El joven Crane está confundido, y la periodista contactada, Mira Jones -Emmy Raver-Lampman-, sabe que tiene una historia sobre el caso de Sofía Flores -Melanie Jarnson-, pero le faltan antecedentes para terminar de armar el puzzle.
Con el contexto develado, esta cinta se mueve entre electrizantes persecuciones, diálogos irrelevantes, múltiples sospechosos y la complicada vida familiar de Travis. Sabemos del papel de los medios periodísticos cuando se trata de revelar escándalos. Y aquí justamente se trata de evitar que salgan a la luz operaciones turbias ordenadas por los altos mandos de la principal agencia de investigación de los Estados Unidos.
Esa premisa está bien, la idea original funciona y tiene potencial; el tema es que su puesta en práctica no cuaja. Las razones podrán ser muchas, pero básicamente la cinta no se mueve desde su eje central, no transmite ningún sentido de urgencia y finalmente no logra mover un solo pelo.
“Blacklight” es planita. En general, pasa muy poco, los nudos de conflicto son débiles y la acción se diluye con el correr de los minutos, y eso que no es larga. Rescato, eso sí, el trabajo de los dobles de riesgo en las persecuciones automovilísticas, filmadas muy decididamente por el director Mark Williams. Pero no es suficiente.
Aunque en el último cuarto la película logra remontar un poco, no logra superar la línea de flotación y Liam Neeson se hunde junto a su barco. Es una lástima, porque sin duda es un gran actor, pero si se queda pegado en personajes tan similares, difícilmente podrá dejar atrás “Taken”. Y, además, ya las fuerzas no acompañan como antes.
Ficha técnica
Título original: Blacklight
Año: 2022
Duración: 108 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Coproducción Estados Unidos-China-Australia; Zero Gravity Management, Sina Studios, Film Victoria, Lightstream Pictures Australia, Screen Australia, Solution Entertainment Group. Distribuidora: Open Road Films, Briarcliff Entertainment, Eagle Films, Rialto Distribution
Género: Acción. Thriller
Guion: Nick May, Mark Williams. Historia: Nick May, Brandon Reavis
Música: Mark Isham
Fotografía: Shelly Johnson
Reparto: Liam Neeson, Emmy Raver-Lampman, Taylor John Smith, Aidan Quinn
Dirección: Mark Williams
Luego de un inicio bien impactante, sobreviene la tragedia y Travis Block -Liam Neeson-, un agente extraoficial del FBI, ingresa al escenario para ayudar al agente Dusty Crane -Taylor John Smith-, que se encuentra devastado por el mal resultado de una operación y está muy cerca de entregar toda la información a la prensa. El joven Crane está confundido, y la periodista contactada, Mira Jones -Emmy Raver-Lampman-, sabe que tiene una historia sobre el caso de Sofía Flores -Melanie Jarnson-, pero le faltan antecedentes para terminar de armar el puzzle.
Con el contexto develado, esta cinta se mueve entre electrizantes persecuciones, diálogos irrelevantes, múltiples sospechosos y la complicada vida familiar de Travis. Sabemos del papel de los medios periodísticos cuando se trata de revelar escándalos. Y aquí justamente se trata de evitar que salgan a la luz operaciones turbias ordenadas por los altos mandos de la principal agencia de investigación de los Estados Unidos.
Esa premisa está bien, la idea original funciona y tiene potencial; el tema es que su puesta en práctica no cuaja. Las razones podrán ser muchas, pero básicamente la cinta no se mueve desde su eje central, no transmite ningún sentido de urgencia y finalmente no logra mover un solo pelo.
“Blacklight” es planita. En general, pasa muy poco, los nudos de conflicto son débiles y la acción se diluye con el correr de los minutos, y eso que no es larga. Rescato, eso sí, el trabajo de los dobles de riesgo en las persecuciones automovilísticas, filmadas muy decididamente por el director Mark Williams. Pero no es suficiente.
Aunque en el último cuarto la película logra remontar un poco, no logra superar la línea de flotación y Liam Neeson se hunde junto a su barco. Es una lástima, porque sin duda es un gran actor, pero si se queda pegado en personajes tan similares, difícilmente podrá dejar atrás “Taken”. Y, además, ya las fuerzas no acompañan como antes.
Ficha técnica
Título original: Blacklight
Año: 2022
Duración: 108 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Coproducción Estados Unidos-China-Australia; Zero Gravity Management, Sina Studios, Film Victoria, Lightstream Pictures Australia, Screen Australia, Solution Entertainment Group. Distribuidora: Open Road Films, Briarcliff Entertainment, Eagle Films, Rialto Distribution
Género: Acción. Thriller
Guion: Nick May, Mark Williams. Historia: Nick May, Brandon Reavis
Música: Mark Isham
Fotografía: Shelly Johnson
Reparto: Liam Neeson, Emmy Raver-Lampman, Taylor John Smith, Aidan Quinn
Dirección: Mark Williams
lunes, 27 de enero de 2025
De Vuelta a la Acción - Por Carlos Correa Acuña
Disponible en Netflix.
Sinopsis: Emily y Matt renunciaron hace años a ser espías de la CIA para formar una familia. Pero, cuando se descubre su tapadera, se ven arrastrados de nuevo a ese mundo.
Esta propuesta del director Seth Gordon tiene un aroma que ya hemos sentido antes. Claro, lo hemos visto, y más de una vez. Me viene a la memoria la ya clásica “Mr. & Mrs. Smith”, de hace unos 20 años, y quizá un par más… La idea es sencilla pero no por eso de fácil ejecución. Se requiere pulso firme, protagonistas fuertes y un equipo de producción que dé el tono. ¿Lo consigue? Veamos.
Primero, vamos con la producción. Los efectos especiales contienen de todo. Algunos algo burdos, pero vibrantes, como el accidente de avión. Otros bastante bien logrados, como las persecuciones en auto, donde lucen bien las imágenes tomadas por cámaras en drones, especialmente cuando son los autos los que vuelan. En ese sentido, la filmación es de los puntos altos de esta película que, desde ya, promete secuela.
Por el lado de las actuaciones, varias cosillas que comentar. El regreso de Cameron Díaz, luego de once años, no es menor. Fiel a su estilo, no ha perdido encanto para interpretar una comedia infiltrada por hilos de acción en los que se desenvuelve bastante bien. Su contraparte, Jamie Foxx, también está bien, sobre todo por dejar que la química entre ambos los guíe a través de los diversos recovecos que la trama les propone. El triángulo lo cierra Glenn Close, con una prestancia y señorío que no deja lugar a dudas, incluso apareciendo escasos minutos en pantalla.
De la historia, poco, muy poco. Espionaje, matonaje, enredos entre agencias de seguridad, rusos metidos entre medio, todos interesados en una llave digital que permite, al portador, hacer de las suyas en casi cualquier sistema tecnológico del mundo. Las dosis de humor son acotadas, en general referidas a situaciones básicas usadas como elementos distractores para unir otros puntos de un mapa argumental lleno de clichés y escasa originalidad.
En “Back in Action” se anticipa todo, o casi todo. Parece ser un videojuego donde todos los protagonistas representan caricaturas. Ante el mínimo contenido, surge un fenómeno curioso, pues la película igual resulta entretenida y hasta permite que la veamos con simpatía. Es verdad que no tiene nada nuevo que aportar, pero al menos funciona como un producto ideal para un viaje en bus o en avión en vacaciones.
Ficha técnica
Título original: Back in Action
Año: 2025
Duración: 114 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Exhibit A, Good One Productions, Chernin Entertainment, Marzano Films. Distribuidora: Netflix
Género: Comedia. Acción | Espionaje
Guion: Seth Gordon, Brendan O'Brien
Música: Christopher Lennertz
Fotografía: Ken Seng
Reparto: Jamie Foxx, Cameron Díaz, Andrew Scott, Jamie Demetriou, Kyle Chandler y Glenn Close.
Dirección: Seth Gordon
Primero, vamos con la producción. Los efectos especiales contienen de todo. Algunos algo burdos, pero vibrantes, como el accidente de avión. Otros bastante bien logrados, como las persecuciones en auto, donde lucen bien las imágenes tomadas por cámaras en drones, especialmente cuando son los autos los que vuelan. En ese sentido, la filmación es de los puntos altos de esta película que, desde ya, promete secuela.
Por el lado de las actuaciones, varias cosillas que comentar. El regreso de Cameron Díaz, luego de once años, no es menor. Fiel a su estilo, no ha perdido encanto para interpretar una comedia infiltrada por hilos de acción en los que se desenvuelve bastante bien. Su contraparte, Jamie Foxx, también está bien, sobre todo por dejar que la química entre ambos los guíe a través de los diversos recovecos que la trama les propone. El triángulo lo cierra Glenn Close, con una prestancia y señorío que no deja lugar a dudas, incluso apareciendo escasos minutos en pantalla.
De la historia, poco, muy poco. Espionaje, matonaje, enredos entre agencias de seguridad, rusos metidos entre medio, todos interesados en una llave digital que permite, al portador, hacer de las suyas en casi cualquier sistema tecnológico del mundo. Las dosis de humor son acotadas, en general referidas a situaciones básicas usadas como elementos distractores para unir otros puntos de un mapa argumental lleno de clichés y escasa originalidad.
En “Back in Action” se anticipa todo, o casi todo. Parece ser un videojuego donde todos los protagonistas representan caricaturas. Ante el mínimo contenido, surge un fenómeno curioso, pues la película igual resulta entretenida y hasta permite que la veamos con simpatía. Es verdad que no tiene nada nuevo que aportar, pero al menos funciona como un producto ideal para un viaje en bus o en avión en vacaciones.
Ficha técnica
Título original: Back in Action
Año: 2025
Duración: 114 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Exhibit A, Good One Productions, Chernin Entertainment, Marzano Films. Distribuidora: Netflix
Género: Comedia. Acción | Espionaje
Guion: Seth Gordon, Brendan O'Brien
Música: Christopher Lennertz
Fotografía: Ken Seng
Reparto: Jamie Foxx, Cameron Díaz, Andrew Scott, Jamie Demetriou, Kyle Chandler y Glenn Close.
Dirección: Seth Gordon
sábado, 25 de enero de 2025
Patio de Chacales - Por Juan Pablo Donoso
Prolijo drama de suspenso, miedo, culpa, paranoia y esquizofrenia.
Combina política con misterio y terror psicológico.
Primer filme chileno en recibir el premio al Mejor Director - Diego Figueroa - categoría de Óperas Primas - en el Tallinn Black Nights Film Festival de Estonia.
Explora las profundidades del pavor de algunas personas en una época chilena de represión y torturas.
1975. Raúl (Néstor Cantillana), un maquetista para el Ejército, soltero, vive en un tranquilo barrio de clase media, al cuidado de su anciana madre postrada e inconsciente (Grimanesa Jiménez).
Todo se altera cuando llegan extraños vecinos a la casa pareada, y por las noches se escuchan aterradores gritos de suplicio.
Muy inquieto e intrigado, recurrirá a una amiga (Blanca Lewin) para averiguar quiénes son aquellos torvos individuos que pululan y vigilan el barrio. Hasta tienen en el patio un perro doberman, con bozal, al que amaestran en técnicas de ataque.
El 85% del protagonismo - visual y anímico - recae sobre el personaje de Raúl, muy bien matizado, con primerísimos planos, por Néstor Cantillana.
Última actuación de la actriz Grimanesa Jiménez, a cuya memoria se rindió homenaje en la ceremonia de Avant Premier y en los créditos finales.
Caracterización diferente esta vez - en maquillaje y vestuario - de la habitualmente glamorosa Blanca Lewin.
Carismática naturalidad de la joven actriz María Jesús Marcone. Su inocente simpatía contribuye al misterio y desconfianza del trasfondo político.
Irreconocible Consuelo Holzapfel, como la temerosa vecina que sabe más de lo que expresa.
Los sonidos son parte principal de la trama - los espectadores sólo escuchamos las torturas, nunca las vemos. Nuestra imaginación hace el resto Ruidos estridentes y pausas largas en momentos de clímax.
El protagonista, cuando hizo el servicio militar, se disparó en la pierna para no seguir ahí. Esa bala lo acompañó durante años, recordándole a través del dolor y una cojera, su cobardía y vergüenza.
Con el paso de las escenas, esa bala empieza a salir de su cuerpo, reivindicando sus errores y comenzando una nueva etapa en su vida.
Envenena al perro negro con su canario asesinado por los mismos agentes. Le agrega vidrio molido y la bala que tenía en su pierna, que simboliza sus culpas del pasado.
Filme lleno de claves aparentemente dispersas, que conducen al ambivalente giro final. Denuncia el desquicio al que se expone la propia identidad cuando es alienada por el miedo.
Como en todo relato de guerra expone los horrores que pueden cometer los seres humanos (chacales).
El final sugiere varias interpretaciones. Por su elaborada factura, podría quedar como cine de culto chileno.
AUNQUE DE NUEVO DEBEMOS SOPORTAR TEMAS ALUSIVOS AL PERIODO DE DICTADURA, ESTA VEZ EL REALIZADOR DIEGO FIGUEROA LOGRA COMUNICARNOS LAS ANGUSTIAS DE SU ENAJENADO PROTAGONISTA.
Combina política con misterio y terror psicológico.
Primer filme chileno en recibir el premio al Mejor Director - Diego Figueroa - categoría de Óperas Primas - en el Tallinn Black Nights Film Festival de Estonia.
Explora las profundidades del pavor de algunas personas en una época chilena de represión y torturas.
1975. Raúl (Néstor Cantillana), un maquetista para el Ejército, soltero, vive en un tranquilo barrio de clase media, al cuidado de su anciana madre postrada e inconsciente (Grimanesa Jiménez).
Todo se altera cuando llegan extraños vecinos a la casa pareada, y por las noches se escuchan aterradores gritos de suplicio.
Muy inquieto e intrigado, recurrirá a una amiga (Blanca Lewin) para averiguar quiénes son aquellos torvos individuos que pululan y vigilan el barrio. Hasta tienen en el patio un perro doberman, con bozal, al que amaestran en técnicas de ataque.
El 85% del protagonismo - visual y anímico - recae sobre el personaje de Raúl, muy bien matizado, con primerísimos planos, por Néstor Cantillana.
Última actuación de la actriz Grimanesa Jiménez, a cuya memoria se rindió homenaje en la ceremonia de Avant Premier y en los créditos finales.
Caracterización diferente esta vez - en maquillaje y vestuario - de la habitualmente glamorosa Blanca Lewin.
Carismática naturalidad de la joven actriz María Jesús Marcone. Su inocente simpatía contribuye al misterio y desconfianza del trasfondo político.
Irreconocible Consuelo Holzapfel, como la temerosa vecina que sabe más de lo que expresa.
Los sonidos son parte principal de la trama - los espectadores sólo escuchamos las torturas, nunca las vemos. Nuestra imaginación hace el resto Ruidos estridentes y pausas largas en momentos de clímax.
El protagonista, cuando hizo el servicio militar, se disparó en la pierna para no seguir ahí. Esa bala lo acompañó durante años, recordándole a través del dolor y una cojera, su cobardía y vergüenza.
Con el paso de las escenas, esa bala empieza a salir de su cuerpo, reivindicando sus errores y comenzando una nueva etapa en su vida.
Envenena al perro negro con su canario asesinado por los mismos agentes. Le agrega vidrio molido y la bala que tenía en su pierna, que simboliza sus culpas del pasado.
Filme lleno de claves aparentemente dispersas, que conducen al ambivalente giro final. Denuncia el desquicio al que se expone la propia identidad cuando es alienada por el miedo.
Como en todo relato de guerra expone los horrores que pueden cometer los seres humanos (chacales).
El final sugiere varias interpretaciones. Por su elaborada factura, podría quedar como cine de culto chileno.
AUNQUE DE NUEVO DEBEMOS SOPORTAR TEMAS ALUSIVOS AL PERIODO DE DICTADURA, ESTA VEZ EL REALIZADOR DIEGO FIGUEROA LOGRA COMUNICARNOS LAS ANGUSTIAS DE SU ENAJENADO PROTAGONISTA.
Ficha técnica
2024 - Suspenso psicológico Chile - 1,48 hrs.
2024 - Suspenso psicológico Chile - 1,48 hrs.
Fotografía: Martín Hurtado
Música: Diego de la Fuente
Dirección de Arte: Karla Molina Donoso
Actores: Néstor Cantillana, Blanca Lewin, Consuelo Holzapfel
Editor, Guionista y Director: Diego Figueroa
viernes, 24 de enero de 2025
El Robo Perfecto: Pantera - Por Carlos Correa Acuña
Enrevesada película. Tal vez lo mejor es la secuencia inicial, un robo perfecto en el Aeropuerto de Amberes. Entre aviones, hangares, contenedores y vehículos policiales, se fragua una operación vigilada al detalle desde la ventana de un hotel cercano. Tensión y suspenso de comienzo a fin, con pocas palabras y mucha acción. Lo malo es que anticipa una falsa idea de lo que vendrá a continuación, y eso, más tarde, resulta un poco decepcionante.
La trama nos lleva al compromiso de Donnie Wilson -O'Shea Jackson Jr.-, con la llamada mafia Pantera, con el fin de ejecutar un ambicioso atraco a la bóveda de diamantes del WDC. Entre tanto, Nicholas "Nick" O'Brien -Gerard Butler-, cansado y en franca decadencia, viaja especialmente para hacerle a Wilson una propuesta muy poco convencional, sobre todo si tomamos en cuenta que hasta hace poco había sido su enconado perseguidor. Nick quiere sumarse a la banda en formación para ser parte de este golpe a la cátedra que podría transformarse en el más grande de la historia.
Podríamos decir que esta película comienza como caballo inglés y se desinfla en el camino. Claro, nos tienen que entregar los contextos, nos deben mostrar operaciones y muchos datos, todo esto en un prólogo extenso y un poco tedioso. Pero con el robo más cerca, el ritmo acelera, sin embargo, una buena cantidad de enredos hace que el relato se complejice, que entren y salgan personajes, y que el argumento cada vez sea más difuso.
La totalidad de la banda recién se reúne cerca de la hora de metraje para planear los detalles del asalto. Y antes, ¿qué pasaba? ¿Podríamos habernos saltado toda esa introducción? La verdad, es demasiada historia para robar un diamante en particular: muchas telarañas y ramificaciones que nublan los propósitos esenciales del filme.
Escrita y dirigida por Christian Gudegast, “Den of Thieves 2: Pantera” se hace larga porque transcurre lento y se siente pesada. Ni siquiera Gerard Butler y O’Shea Jackson Jr. logran levantar un metraje árido con demasiada información y muchas escenas en las que, simplemente, no pasa nada.
La persecución del Porsche, casi al final de la cinta, corona un tercio final que mejora bastante. Es una secuencia que está muy bien filmada y que saca a relucir todo el oficio del director. Pero me pregunto, ¿unas pocas escenas pueden sostener una película de más de dos horas? Mi respuesta no es favorable, y a la luz del resultado, se confirma la gran dificultad que tienen las segundas partes para estar a la altura del éxito de sus antecesoras.
Ficha técnica
Título original: Den of Thieves 2: Pantera
Año: 2025
Duración: 130 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Atmosphere Entertainment MM, Diamond Film Productions, G-BASE, G-Unit Film & Television, Sierra/Affinity, Eone Entertainment, Palma Pictures, Shaken Not Stirred, Tucker Tooley Entertainment. Distribuidora: Lionsgate
Género: Thriller. Acción. Drama | Robos & Atracos. Crimen. Secuela
Guion: Christian Gudegast
Música: Kevin Matley
Fotografía: Terry Stacey
Reparto: Gerard Butler, O’Shea Jackson Jr., Evin Ahmad, Salvatore Esposito, Meadow Williams, Swen Temmel
Dirección: Christian Gudegast
La trama nos lleva al compromiso de Donnie Wilson -O'Shea Jackson Jr.-, con la llamada mafia Pantera, con el fin de ejecutar un ambicioso atraco a la bóveda de diamantes del WDC. Entre tanto, Nicholas "Nick" O'Brien -Gerard Butler-, cansado y en franca decadencia, viaja especialmente para hacerle a Wilson una propuesta muy poco convencional, sobre todo si tomamos en cuenta que hasta hace poco había sido su enconado perseguidor. Nick quiere sumarse a la banda en formación para ser parte de este golpe a la cátedra que podría transformarse en el más grande de la historia.
Podríamos decir que esta película comienza como caballo inglés y se desinfla en el camino. Claro, nos tienen que entregar los contextos, nos deben mostrar operaciones y muchos datos, todo esto en un prólogo extenso y un poco tedioso. Pero con el robo más cerca, el ritmo acelera, sin embargo, una buena cantidad de enredos hace que el relato se complejice, que entren y salgan personajes, y que el argumento cada vez sea más difuso.
La totalidad de la banda recién se reúne cerca de la hora de metraje para planear los detalles del asalto. Y antes, ¿qué pasaba? ¿Podríamos habernos saltado toda esa introducción? La verdad, es demasiada historia para robar un diamante en particular: muchas telarañas y ramificaciones que nublan los propósitos esenciales del filme.
Escrita y dirigida por Christian Gudegast, “Den of Thieves 2: Pantera” se hace larga porque transcurre lento y se siente pesada. Ni siquiera Gerard Butler y O’Shea Jackson Jr. logran levantar un metraje árido con demasiada información y muchas escenas en las que, simplemente, no pasa nada.
La persecución del Porsche, casi al final de la cinta, corona un tercio final que mejora bastante. Es una secuencia que está muy bien filmada y que saca a relucir todo el oficio del director. Pero me pregunto, ¿unas pocas escenas pueden sostener una película de más de dos horas? Mi respuesta no es favorable, y a la luz del resultado, se confirma la gran dificultad que tienen las segundas partes para estar a la altura del éxito de sus antecesoras.
Ficha técnica
Título original: Den of Thieves 2: Pantera
Año: 2025
Duración: 130 minutos
País: Estados Unidos
Compañías: Atmosphere Entertainment MM, Diamond Film Productions, G-BASE, G-Unit Film & Television, Sierra/Affinity, Eone Entertainment, Palma Pictures, Shaken Not Stirred, Tucker Tooley Entertainment. Distribuidora: Lionsgate
Género: Thriller. Acción. Drama | Robos & Atracos. Crimen. Secuela
Guion: Christian Gudegast
Música: Kevin Matley
Fotografía: Terry Stacey
Reparto: Gerard Butler, O’Shea Jackson Jr., Evin Ahmad, Salvatore Esposito, Meadow Williams, Swen Temmel
Dirección: Christian Gudegast
jueves, 23 de enero de 2025
Patio de Chacales - Por Carlos Correa Acuña
Sinopsis: Ambientada en 1975, la película cuenta la historia de Raúl, un maquetista que vive tranquilamente en un barrio aparentemente apacible. Sin embargo, la llegada de nuevos vecinos desata una espiral de eventos violentos que revelan los oscuros secretos que se ocultan tras las puertas cerradas.
Eminentemente sensorial, esta ópera prima del director Diego Figueroa se sumerge en un tema recurrente de la filmografía nacional. Se trata del período de la dictadura militar, y en este caso, sus primeros años, donde la información con la que se contaba era mínima y el temor que provocaba era mayúsculo.
Raúl -Néstor Cantillana-, parece absorto en su mundo, vive para cuidar a su madre enferma y no tiene gran vocación social. A lo más se reúne con Laura -Blanca Lewin-, con quien comparte algunos momentos especiales para pasear y capturar sonidos. La rutina de Raúl es sencilla. Escucha la radio, brinda cuidados a su postrada progenitora y dedica bastante tiempo a su afición por hacer detalladas maquetas a escala. Sin embargo, su día a día -o mejor dicho, su noche a noche-, se ve alterada por nuevos y misteriosos vecinos. No es necesario ser demasiado perceptivos para darnos cuenta que se trata de la DINA, y un posible centro de torturas clandestino instalado justo al lado de su domicilio.
Raúl no quiere problemas, es tímido y quitado de bulla, no obstante se arma de valor para denunciar a Carabineros lo que está sucediendo. Cuando ve que sus esfuerzos son infructuosos y que, por el contrario, se devuelven contra él con más brío, no sabe qué más hacer y se desespera. Laura está por viajar a Francia, por lo que no es mala la idea grabar los ruidos nocturnos para hacer una denuncia ante algún medio internacional. La historia no tiene pausa y las cosas no resultan según lo proyectado. ¿Qué pasará finalmente con los protagonistas de este relato?
La propuesta de Diego Figueroa es principalmente sonora. La partitura de Diego de la Fuente se funde muy bien con las imágenes, aunque en ocasiones se pasa un poquito de revoluciones, pues la cinta tiene pocos momentos de acción y aún menos diálogos. Parece ser más importante lo que podemos interpretar que aquello que vemos realmente. Tomando eso como base, la ejecución resulta interesante, pues efectivamente podemos imaginar perfectamente lo que sucede al otro lado de la pared. La amenaza es latente y persigue a Raúl permanentemente. Él lleva un diario, anota todo, es una hoja de vida que, con lujo de detalles, describe detalladamente cada circunstancia que vive. El miedo y el terror son más que palpables. Los agentes están cada vez más presentes y, además, son intocables.
“Patio de chacales” posee más de un trasfondo. Quisiera leerla más como una historia íntima, un amor platónico no desarrollado, más que como solo una denuncia de torturas y ejecuciones. Y no es que sea menos importante esto último, todo lo contrario, sin embargo me parece que es trascendente observar el impacto que la dictadura pudo provocar en personas comunes y corrientes que estuvieron muy cerca de los centros de detención.
Blanca Lewin contiene a un Néstor Cantillana introvertido pero tremendamente expresivo. Él está bloqueado, paralizado, pero desea hacer algo, quiere moverse, quiere denunciar, cambiar el estado de las cosas, pero no puede. No está en sus manos. La desconfianza se manifiesta en toda circunstancia, desde lo mínimo a lo más complejo. Es el horror el que inmoviliza, y cuando la muerte ronda, todo es aún más dramático y complejo.
Como reflexión final, esta cinta se mueve en varios planos, tanto físicos como sensoriales. Hay un giro inesperado y posiblemente más explicaciones de las que concretamente se entregan al final. Y eso la hace más interesante aún, porque nos desafía a interpretar y a medir el peso de los acontecimientos.
Una perspectiva diferente para un tema que indudablemente nos cuesta mucho y que seguirá presente a mediano y largo plazo.
Ficha técnica
Título original: Patio de chacales
Año: 2024
Duración: 108 minutos
País: Chile
Compañías: Infractor Films. Distribuidora: Storyboard Media, MPM Premium
Género: Thriller. Terror. Drama | Años 70
Guion: Diego Figueroa
Música: Diego de la Fuente
Fotografía: Martin Hurtado
Reparto: Néstor Cantillana, Blanca Lewin, María Jesús Marcone, Rodrigo Pérez, Juan Cano, Grimanesa Jiménez, Consuelo Holzapfel, Pablo Schwarz
Dirección: Diego Figueroa
Eminentemente sensorial, esta ópera prima del director Diego Figueroa se sumerge en un tema recurrente de la filmografía nacional. Se trata del período de la dictadura militar, y en este caso, sus primeros años, donde la información con la que se contaba era mínima y el temor que provocaba era mayúsculo.
Raúl -Néstor Cantillana-, parece absorto en su mundo, vive para cuidar a su madre enferma y no tiene gran vocación social. A lo más se reúne con Laura -Blanca Lewin-, con quien comparte algunos momentos especiales para pasear y capturar sonidos. La rutina de Raúl es sencilla. Escucha la radio, brinda cuidados a su postrada progenitora y dedica bastante tiempo a su afición por hacer detalladas maquetas a escala. Sin embargo, su día a día -o mejor dicho, su noche a noche-, se ve alterada por nuevos y misteriosos vecinos. No es necesario ser demasiado perceptivos para darnos cuenta que se trata de la DINA, y un posible centro de torturas clandestino instalado justo al lado de su domicilio.
Raúl no quiere problemas, es tímido y quitado de bulla, no obstante se arma de valor para denunciar a Carabineros lo que está sucediendo. Cuando ve que sus esfuerzos son infructuosos y que, por el contrario, se devuelven contra él con más brío, no sabe qué más hacer y se desespera. Laura está por viajar a Francia, por lo que no es mala la idea grabar los ruidos nocturnos para hacer una denuncia ante algún medio internacional. La historia no tiene pausa y las cosas no resultan según lo proyectado. ¿Qué pasará finalmente con los protagonistas de este relato?
La propuesta de Diego Figueroa es principalmente sonora. La partitura de Diego de la Fuente se funde muy bien con las imágenes, aunque en ocasiones se pasa un poquito de revoluciones, pues la cinta tiene pocos momentos de acción y aún menos diálogos. Parece ser más importante lo que podemos interpretar que aquello que vemos realmente. Tomando eso como base, la ejecución resulta interesante, pues efectivamente podemos imaginar perfectamente lo que sucede al otro lado de la pared. La amenaza es latente y persigue a Raúl permanentemente. Él lleva un diario, anota todo, es una hoja de vida que, con lujo de detalles, describe detalladamente cada circunstancia que vive. El miedo y el terror son más que palpables. Los agentes están cada vez más presentes y, además, son intocables.
“Patio de chacales” posee más de un trasfondo. Quisiera leerla más como una historia íntima, un amor platónico no desarrollado, más que como solo una denuncia de torturas y ejecuciones. Y no es que sea menos importante esto último, todo lo contrario, sin embargo me parece que es trascendente observar el impacto que la dictadura pudo provocar en personas comunes y corrientes que estuvieron muy cerca de los centros de detención.
Blanca Lewin contiene a un Néstor Cantillana introvertido pero tremendamente expresivo. Él está bloqueado, paralizado, pero desea hacer algo, quiere moverse, quiere denunciar, cambiar el estado de las cosas, pero no puede. No está en sus manos. La desconfianza se manifiesta en toda circunstancia, desde lo mínimo a lo más complejo. Es el horror el que inmoviliza, y cuando la muerte ronda, todo es aún más dramático y complejo.
Como reflexión final, esta cinta se mueve en varios planos, tanto físicos como sensoriales. Hay un giro inesperado y posiblemente más explicaciones de las que concretamente se entregan al final. Y eso la hace más interesante aún, porque nos desafía a interpretar y a medir el peso de los acontecimientos.
Una perspectiva diferente para un tema que indudablemente nos cuesta mucho y que seguirá presente a mediano y largo plazo.
Ficha técnica
Título original: Patio de chacales
Año: 2024
Duración: 108 minutos
País: Chile
Compañías: Infractor Films. Distribuidora: Storyboard Media, MPM Premium
Género: Thriller. Terror. Drama | Años 70
Guion: Diego Figueroa
Música: Diego de la Fuente
Fotografía: Martin Hurtado
Reparto: Néstor Cantillana, Blanca Lewin, María Jesús Marcone, Rodrigo Pérez, Juan Cano, Grimanesa Jiménez, Consuelo Holzapfel, Pablo Schwarz
Dirección: Diego Figueroa
Emilia Pérez - Por Jackie O.
“El pasado no se borra”
Rita Mora es una abogada de poca trayectoria en México, y debe escribir una defensa donde no está de acuerdo con lo que le requirieron, yendo en contra de su conciencia. Después de ganar el caso, Rita recibe una llamada anónima con una oferta misteriosa pero muy lucrativa. Reflexionando sobre su descontento trabajo, Rita acepta una reunión con la persona anónima. El cliente, que se revela como el capo del cártel de drogas, Juan "Manitas" Del Monte, expresa el deseo de someterse de forma encubierta a una cirugía de cambio de género.
Rita asustada, ya que prácticamente fue amenazada por “Manitas”, viaja a buscar un cirujano que realice la operación, ya que "Manitas" lleva dos años con la ingesta de hormonas, por lo que está preparado. A pesar de tener mujer y dos hijos, él quiere ser mujer y comenzar una nueva vida.
Luego de recabar la información y encontrar el médico adecuado, y este último hablar con "Manitas", ya que necesita saber más de su paciente, la cirugía se realiza, y Juan Manitas se transforma en Emilia Pérez. Así pasan los años, y Rita ya no trabaja para el Estado. Con el dinero que recibió, y su inteligencia, se mueve en otros sectores. Y en Londres se encuentra con Emilia Pérez, algo que la descoloca, y Emilia le pide que lleve a su nuevo hogar, Suiza, a su ex esposa Jessi, y a sus pequeños hijos porque los extraña, inventando que ella es prima de "Manitas", quien supuestamente murió.
Jessi es llevada con sus hijos al hogar de Emilia, obligada. No sabía de la existencia de esta “prima” de su difundo marido, quien la recibe muy amorosamente pero más a sus hijos, a quienes llena de regalos y mimos. Pero a Jessi comienza a cansarle su exceso de atenciones y control.
Al volver a México, todos, Emilia y Rita se vuelven las mejores amigas, y Emilia luego de ver a una mujer angustiada buscando a su hijo desaparecido por los cárteles del sector, toma conciencia del mal que hizo en su pasado y quiere enmendarlo, por lo que crea una asociación que se encarga de buscar a los desaparecidos que por años y años arrastra el país mexicano, y que las autoridades muchas veces se ven atados de manos.
Emilia, con su dinero e influencias, comienza a encontrar esos cuerpos y darle sepultura, y por sobre todo, tranquilidad a sus familias. En esa búsqueda, aparece Epifanía, una mujer que quiere verificar si el cuerpo encontrado de una de esas tantas personas era su marido. Y sí, era él, pero ella está contenta porque fue un sujeto malo. La cercanía que comienza a tener con Emilia las hace amantes. Emilia se siente por primera vez enamorada.
Pero no todo sale como quiere, y el cuento hermoso que vive Emilia se desmorona cuando Jessi desaparece con sus hijos. Emilia saca el Juan “Manitas” que siempre estuvo en ella, desatándose un gran problema que puede constarle la vida a alguien.
Una cinta demasiado controversial, principalmente por los mexicanos que se sienten ofendidos por cómo retrataron a su país y sus costumbres. Se puede empatizar con su molestia, pero las películas son ficción. Para ver realidades están los documentales.
¿Cuántas películas hechas en otros países, con actores de diferentes nacionalidades, hemos visto, y no se levanta tanto polvo?
Pero vamos a lo que realmente es importante:
Guion; la historia tiene muchos matices. Habla de LGTB+ , un hombre siente que nació en un cuerpo diferente y se cambia de sexo, vive la vida loca pero de repente extraña a sus hijos, y cuando no se hace lo que él, ella, quiere, saca su real naturaleza que siempre estuvo ahí. El cambio de genero no cambia tu esencia.
Otro tema abordado es la desaparición de miles de persona que ha vivido dicho país, y otros, producto de los cárteles que prácticamente manejan la nación. Mostrando a su protagonista, un ser malvado, querer reivindicarse de la maldad que provocó cuando era el jefe, y que ahora, siendo “la jefa”, quiere enmendar.
¿Y por qué no puede un ser humano cambiar en cuanto a que si dañó, quiera reparar ese mal causado?
Pero el problema, creo, radica en que el guion quiere abordar diferentes temas. Quisieron ser “creativos”, pero su mensaje se pierde entre muchos clichés re-conocidos, a veces caricaturizados, que en lugar de inspirar reflexión, incitan a la confusión e incluso generan violencia (que ya se ve en las redes).
Las actuaciones, las principales no son mexicanas y fue lo más indignante para los mexicanos. Pero queda en el director a quién contrata, y no le gustó ninguna mexicana (salvo una: Epifanía) Bueno, es decisión del director. El problema se genera en que el acento de ellas no es de los mejores, aunque el de Selena Gómez fue el peor. Su personaje debió haber sido siempre norteamericano. Mal el guion acá. No hacerla pasar por mexicana o de crianza mexicana, ese es el real problema. Escucharla hablar es hacer sangrar los oídos. Lamentablemente tanto Selena, como Karla, no son ni grandes actrices ni tampoco malas, pero nada que destacar en ellas. Creo que sus múltiples nominaciones ofendes a grandes actrices que se han perdido. Pero Zoe es quien lleva la película y demuestra un gran profesionalismo en cada escena que maneja.
En la banda Sonora tenemos un mix de canciones. Algunas bien cantadas, principalmente por Zoe Saldaña; hay algunas con letras muy significativas, como por ejemplo “Mi camino”, de Selena Gomez; pero otras, es un horror escucharlas, como a la misma Selena en “Bienvenida”. Su grito iracundo es reflejo de mala modulación. O “Vaginoplastía”. Que alguien me explique ese adefesio de canción, o escuchar a la misma Karla Sofía cantar, es lo peor que he escuchado en años.
Las coreografías están bien estructuradas y acordes al tema. Se juega mucho con la oscuridad en cada baile para llevarnos a la negrura de sus historias y el mundo en que se desenvuelven.
Fotografía, luz y muchas sombras por lo antes señalado, lo cual se sabe manejar bien.
En resumen, estamos ante una cinta muy controversial, para quererla u odiarla, dicen. No es lo mejor que he visto, pero no es mala, tiene su cuota de encanto que vale ver.
Ficha técnica
Dirección y guion: Jacques Audiard
Música: Camille y Clément Ducol
Fotografía: Virginie Montel
Montaje: Juliette Welfling
Escenografía: Emmanuelle Duplay
Protagonistas: Zoe Saldaña, Karla Sofía Gascón, Selena Gomez, Adriana Paz, Edgar Ramírez
País: Francia
Año: 2024
Género: Comedia Musical, Crimen, LGBT
Duración: 130 minutos
Idioma(s): Español, Inglés y Francés
Rita Mora es una abogada de poca trayectoria en México, y debe escribir una defensa donde no está de acuerdo con lo que le requirieron, yendo en contra de su conciencia. Después de ganar el caso, Rita recibe una llamada anónima con una oferta misteriosa pero muy lucrativa. Reflexionando sobre su descontento trabajo, Rita acepta una reunión con la persona anónima. El cliente, que se revela como el capo del cártel de drogas, Juan "Manitas" Del Monte, expresa el deseo de someterse de forma encubierta a una cirugía de cambio de género.
Rita asustada, ya que prácticamente fue amenazada por “Manitas”, viaja a buscar un cirujano que realice la operación, ya que "Manitas" lleva dos años con la ingesta de hormonas, por lo que está preparado. A pesar de tener mujer y dos hijos, él quiere ser mujer y comenzar una nueva vida.
Luego de recabar la información y encontrar el médico adecuado, y este último hablar con "Manitas", ya que necesita saber más de su paciente, la cirugía se realiza, y Juan Manitas se transforma en Emilia Pérez. Así pasan los años, y Rita ya no trabaja para el Estado. Con el dinero que recibió, y su inteligencia, se mueve en otros sectores. Y en Londres se encuentra con Emilia Pérez, algo que la descoloca, y Emilia le pide que lleve a su nuevo hogar, Suiza, a su ex esposa Jessi, y a sus pequeños hijos porque los extraña, inventando que ella es prima de "Manitas", quien supuestamente murió.
Jessi es llevada con sus hijos al hogar de Emilia, obligada. No sabía de la existencia de esta “prima” de su difundo marido, quien la recibe muy amorosamente pero más a sus hijos, a quienes llena de regalos y mimos. Pero a Jessi comienza a cansarle su exceso de atenciones y control.
Al volver a México, todos, Emilia y Rita se vuelven las mejores amigas, y Emilia luego de ver a una mujer angustiada buscando a su hijo desaparecido por los cárteles del sector, toma conciencia del mal que hizo en su pasado y quiere enmendarlo, por lo que crea una asociación que se encarga de buscar a los desaparecidos que por años y años arrastra el país mexicano, y que las autoridades muchas veces se ven atados de manos.
Emilia, con su dinero e influencias, comienza a encontrar esos cuerpos y darle sepultura, y por sobre todo, tranquilidad a sus familias. En esa búsqueda, aparece Epifanía, una mujer que quiere verificar si el cuerpo encontrado de una de esas tantas personas era su marido. Y sí, era él, pero ella está contenta porque fue un sujeto malo. La cercanía que comienza a tener con Emilia las hace amantes. Emilia se siente por primera vez enamorada.
Pero no todo sale como quiere, y el cuento hermoso que vive Emilia se desmorona cuando Jessi desaparece con sus hijos. Emilia saca el Juan “Manitas” que siempre estuvo en ella, desatándose un gran problema que puede constarle la vida a alguien.
Una cinta demasiado controversial, principalmente por los mexicanos que se sienten ofendidos por cómo retrataron a su país y sus costumbres. Se puede empatizar con su molestia, pero las películas son ficción. Para ver realidades están los documentales.
¿Cuántas películas hechas en otros países, con actores de diferentes nacionalidades, hemos visto, y no se levanta tanto polvo?
Pero vamos a lo que realmente es importante:
Guion; la historia tiene muchos matices. Habla de LGTB+ , un hombre siente que nació en un cuerpo diferente y se cambia de sexo, vive la vida loca pero de repente extraña a sus hijos, y cuando no se hace lo que él, ella, quiere, saca su real naturaleza que siempre estuvo ahí. El cambio de genero no cambia tu esencia.
Otro tema abordado es la desaparición de miles de persona que ha vivido dicho país, y otros, producto de los cárteles que prácticamente manejan la nación. Mostrando a su protagonista, un ser malvado, querer reivindicarse de la maldad que provocó cuando era el jefe, y que ahora, siendo “la jefa”, quiere enmendar.
¿Y por qué no puede un ser humano cambiar en cuanto a que si dañó, quiera reparar ese mal causado?
Pero el problema, creo, radica en que el guion quiere abordar diferentes temas. Quisieron ser “creativos”, pero su mensaje se pierde entre muchos clichés re-conocidos, a veces caricaturizados, que en lugar de inspirar reflexión, incitan a la confusión e incluso generan violencia (que ya se ve en las redes).
Las actuaciones, las principales no son mexicanas y fue lo más indignante para los mexicanos. Pero queda en el director a quién contrata, y no le gustó ninguna mexicana (salvo una: Epifanía) Bueno, es decisión del director. El problema se genera en que el acento de ellas no es de los mejores, aunque el de Selena Gómez fue el peor. Su personaje debió haber sido siempre norteamericano. Mal el guion acá. No hacerla pasar por mexicana o de crianza mexicana, ese es el real problema. Escucharla hablar es hacer sangrar los oídos. Lamentablemente tanto Selena, como Karla, no son ni grandes actrices ni tampoco malas, pero nada que destacar en ellas. Creo que sus múltiples nominaciones ofendes a grandes actrices que se han perdido. Pero Zoe es quien lleva la película y demuestra un gran profesionalismo en cada escena que maneja.
En la banda Sonora tenemos un mix de canciones. Algunas bien cantadas, principalmente por Zoe Saldaña; hay algunas con letras muy significativas, como por ejemplo “Mi camino”, de Selena Gomez; pero otras, es un horror escucharlas, como a la misma Selena en “Bienvenida”. Su grito iracundo es reflejo de mala modulación. O “Vaginoplastía”. Que alguien me explique ese adefesio de canción, o escuchar a la misma Karla Sofía cantar, es lo peor que he escuchado en años.
Las coreografías están bien estructuradas y acordes al tema. Se juega mucho con la oscuridad en cada baile para llevarnos a la negrura de sus historias y el mundo en que se desenvuelven.
Fotografía, luz y muchas sombras por lo antes señalado, lo cual se sabe manejar bien.
En resumen, estamos ante una cinta muy controversial, para quererla u odiarla, dicen. No es lo mejor que he visto, pero no es mala, tiene su cuota de encanto que vale ver.
Ficha técnica
Dirección y guion: Jacques Audiard
Música: Camille y Clément Ducol
Fotografía: Virginie Montel
Montaje: Juliette Welfling
Escenografía: Emmanuelle Duplay
Protagonistas: Zoe Saldaña, Karla Sofía Gascón, Selena Gomez, Adriana Paz, Edgar Ramírez
País: Francia
Año: 2024
Género: Comedia Musical, Crimen, LGBT
Duración: 130 minutos
Idioma(s): Español, Inglés y Francés
Se7en: los siete pecados capitales - Por Elizabeth Salazar T.
"Un asesino misterioso y macabro"
¿Pueden creer que ya se cumplen treinta años, del estreno de este filme? Es por ese motivo que regresa a la cartelera, pero en una versión remasterizada. La trama se centra en Somerset (Morgan Freeman), un veterano detective que se encuentra a punto de jubilarse y que conoce al joven policía Mills (Brad Pitt). Ellos acaban de empezar a trabajar juntos cuando les asignan investigar una serie de asesinatos cometidos por un psicópata, John Doe (Kevin Spacey), que se basa en los siete pecados capitales: gula, pereza, soberbia, avaricia, envidia, lujuria e ira. Pero, de hecho, ha planeado la forma de revelar su pecado más retorcido…
Este filme fue un éxito de taquilla y consagró a David Fincher como director de películas. Debe tener uno de los asesinos más misteriosos y estratégicos del cine. Una de las curiosidades es cómo de a poco se va develando información de John Doe, y de su forma de actuar en cada uno de sus crímenes.
A pesar de que al comienzo Somerset (Morgan Freeman), no quiere trabajar con Mills (Brad Pitt), el encanto Tracy (Gwyneth Paltrow), la esposa de Mills y lo curioso del caso, logra captar su atención para que acepte formar dupla con el joven detective.
La intensa lluvia que cae durante la investigación de los crímenes le da aún mayor dramatismo a lo que vemos. El asesino siempre parece ir un paso por delante de ellos, porque los asesinatos no dejan de ocurrir y la lista de pecados se irá acortando dramáticamente, cada vez más.
El thriller psicológico se encuentra basado en la obra de Dante “El infierno”, y también en las experiencias de la vida real del escritor Andrew Kevin Walker, quien se trasladó de un pueblo pequeño a la ciudad de Nueva York. Las historias que escuchó y lo que vio en la ciudad que nunca duerme, lo inspiraron para sus escritos.
El filme tiene buenas actuaciones, la dupla de Brad Pitt con Morgan Freeman, es excelente. Una joven Gwyneth Paltrow también realiza una buena interpretación, pero quien se luce es Kevin Spacey, como un asesino culto y totalmente, loco. El soundtrack que tiene es buenísimo, incluye a David Bowie, Marvin Gaye y a Charlie Parker, entre otros.
Reestreno en cines desde el 23 de enero, que por primera vez se exhibirá en IMAX, y también, en salas regulares, y realmente vale la pena verlo, la remasterización hace ganar mucho al filme, visualmente y en sonido.
Director: David Fincher
Duración: 128 Minutos
Distribuye: Warner Bros Chile
¿Pueden creer que ya se cumplen treinta años, del estreno de este filme? Es por ese motivo que regresa a la cartelera, pero en una versión remasterizada. La trama se centra en Somerset (Morgan Freeman), un veterano detective que se encuentra a punto de jubilarse y que conoce al joven policía Mills (Brad Pitt). Ellos acaban de empezar a trabajar juntos cuando les asignan investigar una serie de asesinatos cometidos por un psicópata, John Doe (Kevin Spacey), que se basa en los siete pecados capitales: gula, pereza, soberbia, avaricia, envidia, lujuria e ira. Pero, de hecho, ha planeado la forma de revelar su pecado más retorcido…
Este filme fue un éxito de taquilla y consagró a David Fincher como director de películas. Debe tener uno de los asesinos más misteriosos y estratégicos del cine. Una de las curiosidades es cómo de a poco se va develando información de John Doe, y de su forma de actuar en cada uno de sus crímenes.
A pesar de que al comienzo Somerset (Morgan Freeman), no quiere trabajar con Mills (Brad Pitt), el encanto Tracy (Gwyneth Paltrow), la esposa de Mills y lo curioso del caso, logra captar su atención para que acepte formar dupla con el joven detective.
La intensa lluvia que cae durante la investigación de los crímenes le da aún mayor dramatismo a lo que vemos. El asesino siempre parece ir un paso por delante de ellos, porque los asesinatos no dejan de ocurrir y la lista de pecados se irá acortando dramáticamente, cada vez más.
El thriller psicológico se encuentra basado en la obra de Dante “El infierno”, y también en las experiencias de la vida real del escritor Andrew Kevin Walker, quien se trasladó de un pueblo pequeño a la ciudad de Nueva York. Las historias que escuchó y lo que vio en la ciudad que nunca duerme, lo inspiraron para sus escritos.
El filme tiene buenas actuaciones, la dupla de Brad Pitt con Morgan Freeman, es excelente. Una joven Gwyneth Paltrow también realiza una buena interpretación, pero quien se luce es Kevin Spacey, como un asesino culto y totalmente, loco. El soundtrack que tiene es buenísimo, incluye a David Bowie, Marvin Gaye y a Charlie Parker, entre otros.
Reestreno en cines desde el 23 de enero, que por primera vez se exhibirá en IMAX, y también, en salas regulares, y realmente vale la pena verlo, la remasterización hace ganar mucho al filme, visualmente y en sonido.
Director: David Fincher
Duración: 128 Minutos
Distribuye: Warner Bros Chile
Un dolor real - Por Jackie O.
“La soledad que se esconde”
Sinopsis: David y Benji Kaplan son primos descendientes judíos, que no mantienen mucho contacto luego entrada la adultez, ya que cada quien hizo su vida. Pero emprenden un viaje de EE. UU. a Polonia para rendirle tributo a la memoria de su difunta abuela.
Segunda película escrita y dirigida por Jesse Eisenberg, y producida por Emma Stone y Dave McCary, pero se agrega acá que Eisenberg también está actuando, una tríada difícil pero no imposible para este actor, quien consiguió darnos una conmovedora comedia dramática.
Ambos primos son muy diferentes a simple vista. David es tímido y estructurado, tiene todo organizado en su vida, en cambio Benji es extrovertido y vive el momento. La abuela de ambos, en su testamento, consignó que ellos fueran a este viaje para así conocer las raíces de la familia, en especial la casa donde ella se crio. Para Benji es más emocional este recorrido, ya que con su abuela era más cercano; considera que ella era la única que lo entendía.
En Polonia se encuentran con el guía y un pequeño grupo de turistas: un matrimonio, un hombre afrodescendiente y una mujer recién divorciada. Todos con el mismo fin, explorar raíces y/o la religión. Los primos destacan rápidamente en este reducido grupo gracias a Benji, debido a un comportamiento inapropiado que va teniendo en estos pocos días que comparten. David está cada vez más incómodo con la situación ya que se siente responsable, y se angustia tratando de disculparlo cada vez que puede.
La buena construcción psicológica de los personajes nos involucra. Benji está al límite del ser humano depresivo-suicida, sus constantes altibajos incomodan, es un constante grito de ayuda silencioso, mientras que David, mantiene una contención “políticamente correcta”, al punto de estallar en cualquier momento. Ambos pueden exasperarnos, pero a medida que avanzamos en este turismo con ellos por Varsovia, la ciudad histórica de Lublin y el campo de concentración de Majdanek, vamos empatizando con su historia.
El dolor real no nos lleva solo al dolor personal de estos protagonistas, sino a ser testigos y lograr entender cómo seres humanos, víctimas de un terrible genocidio sobrevivieron, como la abuela de estos jóvenes, cómo lo viven sus familiares o, incluso, quienes no vivieron eso pero que con respeto conocen la tragedia.
Una historia simple, un tema triste y muy difícil llevado a la pantalla, aunque ya lo hayamos visto múltiples veces, traído en esta oportunidad con gran cuota de comedia que nos quiebra la dimensión de su profundidad con su gran dramatismo y humanidad, con actuaciones buenas, lo que hace que sus personajes generen, de cierta forma, simpatía y compasión.
Un guion conmovedor, buenas actuaciones, tanto de sus principales como secundarios, donde es un gusto volver a ver a Jennifer Grey en las pistas. Banda sonora acorde. Y muy buena fotografía.
Una cinta llena de matices de dolor, resiliencia, celos, pérdida, lazos familiares, vulnerabilidad, ayuda y comprensión.
Ficha técnica
Título original: A Real Pain
Dirección y Guion: Jesse Eisenberg
Protagonistas: Jesse Eisenberg, Kieran Culkin, Will Sharpe, Jennifer Grey, Liza Sadovy
2024. 90 minutos
Sinopsis: David y Benji Kaplan son primos descendientes judíos, que no mantienen mucho contacto luego entrada la adultez, ya que cada quien hizo su vida. Pero emprenden un viaje de EE. UU. a Polonia para rendirle tributo a la memoria de su difunta abuela.
Segunda película escrita y dirigida por Jesse Eisenberg, y producida por Emma Stone y Dave McCary, pero se agrega acá que Eisenberg también está actuando, una tríada difícil pero no imposible para este actor, quien consiguió darnos una conmovedora comedia dramática.
Ambos primos son muy diferentes a simple vista. David es tímido y estructurado, tiene todo organizado en su vida, en cambio Benji es extrovertido y vive el momento. La abuela de ambos, en su testamento, consignó que ellos fueran a este viaje para así conocer las raíces de la familia, en especial la casa donde ella se crio. Para Benji es más emocional este recorrido, ya que con su abuela era más cercano; considera que ella era la única que lo entendía.
En Polonia se encuentran con el guía y un pequeño grupo de turistas: un matrimonio, un hombre afrodescendiente y una mujer recién divorciada. Todos con el mismo fin, explorar raíces y/o la religión. Los primos destacan rápidamente en este reducido grupo gracias a Benji, debido a un comportamiento inapropiado que va teniendo en estos pocos días que comparten. David está cada vez más incómodo con la situación ya que se siente responsable, y se angustia tratando de disculparlo cada vez que puede.
La buena construcción psicológica de los personajes nos involucra. Benji está al límite del ser humano depresivo-suicida, sus constantes altibajos incomodan, es un constante grito de ayuda silencioso, mientras que David, mantiene una contención “políticamente correcta”, al punto de estallar en cualquier momento. Ambos pueden exasperarnos, pero a medida que avanzamos en este turismo con ellos por Varsovia, la ciudad histórica de Lublin y el campo de concentración de Majdanek, vamos empatizando con su historia.
El dolor real no nos lleva solo al dolor personal de estos protagonistas, sino a ser testigos y lograr entender cómo seres humanos, víctimas de un terrible genocidio sobrevivieron, como la abuela de estos jóvenes, cómo lo viven sus familiares o, incluso, quienes no vivieron eso pero que con respeto conocen la tragedia.
Una historia simple, un tema triste y muy difícil llevado a la pantalla, aunque ya lo hayamos visto múltiples veces, traído en esta oportunidad con gran cuota de comedia que nos quiebra la dimensión de su profundidad con su gran dramatismo y humanidad, con actuaciones buenas, lo que hace que sus personajes generen, de cierta forma, simpatía y compasión.
Un guion conmovedor, buenas actuaciones, tanto de sus principales como secundarios, donde es un gusto volver a ver a Jennifer Grey en las pistas. Banda sonora acorde. Y muy buena fotografía.
Una cinta llena de matices de dolor, resiliencia, celos, pérdida, lazos familiares, vulnerabilidad, ayuda y comprensión.
Ficha técnica
Título original: A Real Pain
Dirección y Guion: Jesse Eisenberg
Protagonistas: Jesse Eisenberg, Kieran Culkin, Will Sharpe, Jennifer Grey, Liza Sadovy
2024. 90 minutos
Patio de Chacales - Por Jackie O.
“Tormentos”
Sinopsis: Un hombre sencillo de mediana edad ve alterada la paz de su barrio cuando una pandilla de vecinos peligrosos se apodera del sector, desencadenando una espiral de horror y violencia que dejará profundas cicatrices.
Junio de 1975. Raúl es un maquetista que vive tranquilo en su hogar junto a su madre, quien se encuentra postrada. Él carga un trauma del cual no habla, y eso lo hace ser muy tímido con el resto. Su amiga Laura, a quien ama en secreto, lo ayuda en algunas cosas del hogar. Ambos buscan distracciones, como salir a la naturaleza para captar sonidos con una moderna grabadora que tiene ella, con el fin de recopilar sonidos ambientales para la madre de Raúl, y hacer de su estado algo mejor.
Pero un día, Raúl se percata que tiene nuevos vecinos que realizan ruidos en las noches, que afectan la buena convivencia del sector.
Pero dichos vecinos son algo atemorizantes para Raúl, debido a que su día a día se ve afectado por diversas situaciones aterradoras. Hasta que, debido a la insistencia de Laura, Raúl le cuenta lo que él ha vivido con sus intrigantes vecinos, ya que vive en constante paranoia. Eso hará que Raúl deba tomar una decisión al respecto, pero no resulta tal como lo planea. Su pasado choca con este angustiante presente, haciendo que su vida y la de sus más cercanos sea un vía crucis sin descanso.
Primer largometraje de este director, quien comienza con el pie derecho al tomar como idea un cortometraje de su autoría (Los vecinos. Año 2015), creando una atmósfera de tensión al dejar a la imaginación del telespectador las situaciones, ya que no vemos todo, escuchamos mucho y la mente vuela.
Los efectos de sonido son abundantes, ya que de eso se “amarra” el director en casi toda la trama, pero la participación de su protagonista aporta bastante con el profesionalismo que este impregna para recrear los tormentos de un hombre común y corriente.
El tema planteado, la dictadura, es un asunto cansador y muy recurrido por los cineastas chilenos, que hacen que no sea atractivo. Se transforma, a la primera, en algo abrumador ver y hablar de nuevo sobre ello (“otra vez lo mismo”). Pero tiene su cuota de originalidad en ciertos puntos.
Las actuaciones de todos son buenas, incluidas aquellas que no se ven y solo se escuchan.
La ambientación setentera está muy bien recreada.
En cuanto a su guion, deja algunas interrogantes, pero sabe mantener el interés de un trhiller psicológico.
Efectos de sonido buenos, pero en algunos momentos excesivos.
Cinta atractiva para ver y analizar.
Premios
Fondo de Fomento Audiovisual.
WIP Latam Sanfic Industria.
WIP IAMFF Miami.
WIP Iberoamericano MAFIZ.
Ficha técnica
Dirección y Guion: Diego Figueroa
Elenco: Néstor Cantillana, Blanca Lewin, María Jesús Marcone, Rodrigo Pérez, Juan Cano, Grimanesa Jiménez, Consuelo Holzapfel, Pablo Schwarz.
2024. Chile. 108 minutos.
Sinopsis: Un hombre sencillo de mediana edad ve alterada la paz de su barrio cuando una pandilla de vecinos peligrosos se apodera del sector, desencadenando una espiral de horror y violencia que dejará profundas cicatrices.
Junio de 1975. Raúl es un maquetista que vive tranquilo en su hogar junto a su madre, quien se encuentra postrada. Él carga un trauma del cual no habla, y eso lo hace ser muy tímido con el resto. Su amiga Laura, a quien ama en secreto, lo ayuda en algunas cosas del hogar. Ambos buscan distracciones, como salir a la naturaleza para captar sonidos con una moderna grabadora que tiene ella, con el fin de recopilar sonidos ambientales para la madre de Raúl, y hacer de su estado algo mejor.
Pero un día, Raúl se percata que tiene nuevos vecinos que realizan ruidos en las noches, que afectan la buena convivencia del sector.
Pero dichos vecinos son algo atemorizantes para Raúl, debido a que su día a día se ve afectado por diversas situaciones aterradoras. Hasta que, debido a la insistencia de Laura, Raúl le cuenta lo que él ha vivido con sus intrigantes vecinos, ya que vive en constante paranoia. Eso hará que Raúl deba tomar una decisión al respecto, pero no resulta tal como lo planea. Su pasado choca con este angustiante presente, haciendo que su vida y la de sus más cercanos sea un vía crucis sin descanso.
Primer largometraje de este director, quien comienza con el pie derecho al tomar como idea un cortometraje de su autoría (Los vecinos. Año 2015), creando una atmósfera de tensión al dejar a la imaginación del telespectador las situaciones, ya que no vemos todo, escuchamos mucho y la mente vuela.
Los efectos de sonido son abundantes, ya que de eso se “amarra” el director en casi toda la trama, pero la participación de su protagonista aporta bastante con el profesionalismo que este impregna para recrear los tormentos de un hombre común y corriente.
El tema planteado, la dictadura, es un asunto cansador y muy recurrido por los cineastas chilenos, que hacen que no sea atractivo. Se transforma, a la primera, en algo abrumador ver y hablar de nuevo sobre ello (“otra vez lo mismo”). Pero tiene su cuota de originalidad en ciertos puntos.
Las actuaciones de todos son buenas, incluidas aquellas que no se ven y solo se escuchan.
La ambientación setentera está muy bien recreada.
En cuanto a su guion, deja algunas interrogantes, pero sabe mantener el interés de un trhiller psicológico.
Efectos de sonido buenos, pero en algunos momentos excesivos.
Cinta atractiva para ver y analizar.
Premios
Fondo de Fomento Audiovisual.
WIP Latam Sanfic Industria.
WIP IAMFF Miami.
WIP Iberoamericano MAFIZ.
Ficha técnica
Dirección y Guion: Diego Figueroa
Elenco: Néstor Cantillana, Blanca Lewin, María Jesús Marcone, Rodrigo Pérez, Juan Cano, Grimanesa Jiménez, Consuelo Holzapfel, Pablo Schwarz.
2024. Chile. 108 minutos.
Emilia Pérez - Por Juan Pablo Donoso
Horas después de ver este ambicioso y variopinto melodrama, destacamos sus méritos, emergen las carencias, y quedamos con una evaluación de dulce y agraz.
Una eficiente abogada mexicana, Rita (Zoe Saldaña), recibe la millonaria oferta de ayudar a Manitas, un temido jefe de cártel. El magnate quiere cerrar sus negocios y desaparecer para siempre, cumpliendo con su máximo anhelo: convertirse en mujer.
La jurisconsulta informará a la esposa, Jessi, y a sus dos hijitos, que el padre y marido fue asesinado legándoles una fortuna para el resto de sus vidas.
Pocos años después encontramos al ex capo transformado en una exuberante filántropa llamada Emilia Pérez (Karla Sofía Gascón, premiado actor transgénero español).
Si bien cumplió su anhelo de ser una prominente “socialité”, siente nostalgia por sus hijos y, al menos, la cercanía de su viuda.
Volverá a recurrir a Rita para que le traiga su familia de Suiza, a vivir con ella en su mansión, fingiendo ser una prima lejana del ex marido delincuente.
Aunque Rita siga cumpliendo sus deseos, nada impedirá su sospechosa posesividad por los niños, ni celos por los nuevos romances de su viuda.
Por abordar una gama demasiado amplia de temas, deja varios hilos sueltos.
El director francés, Jacques Audiard, quien ni habla español o inglés, es hijo del prolífico guionista Michael Audiard (Taxi para Tobruk (1961), Los Miserables (1958), Un Mono en Invierno (1962), etc.
Como guionista se voló en su propia fantasía sobre la cultura mexicana. Intentó emular aquellos dramas cuyos personajes irrumpen cantando sus pensamientos, o emociones, al modo de Bollywood, Los Paraguas de Cherburgo o The Wall, pero sin la natural simbiosis de aquellos. Se resiente, entonces, sólo como una interrupción del relato, o como discordia estilística en un ambiente sórdido y corrupto.
La fotografía tiene indudable belleza, como también una minuciosa edición coreográfica.
Por carecer de mayor tensión y conflicto, aunque las actrices intentan dar lo mejor de sí, a ratos se siente plana y larga.
Destacamos el manejo de matices de Zoe Saldaña, como Rita. Lamentamos la incómoda pronunciación castellana de Selena Gómez, y celebramos el natural carisma de Adriana Paz como Epifanía.
Se siente postiza la última secuencia de la procesión para una Santa - ¿de los narcos?- quizás, pero poco aporta a la ya recargada película que termina sonando casi moralista.
Tal vez hubo demasiados cocineros para una sola cocina.
Emilia Pérez no existe, pero representa la historia de muchos(as).
LA MORALEJA PARECIERA SER QUE JAMÁS PODREMOS DESPRENDERNOS DEL PASADO, NI CAMBIAR QUIENES SOMOS O LO QUE ANHELAMOS SER.
Una eficiente abogada mexicana, Rita (Zoe Saldaña), recibe la millonaria oferta de ayudar a Manitas, un temido jefe de cártel. El magnate quiere cerrar sus negocios y desaparecer para siempre, cumpliendo con su máximo anhelo: convertirse en mujer.
La jurisconsulta informará a la esposa, Jessi, y a sus dos hijitos, que el padre y marido fue asesinado legándoles una fortuna para el resto de sus vidas.
Pocos años después encontramos al ex capo transformado en una exuberante filántropa llamada Emilia Pérez (Karla Sofía Gascón, premiado actor transgénero español).
Si bien cumplió su anhelo de ser una prominente “socialité”, siente nostalgia por sus hijos y, al menos, la cercanía de su viuda.
Volverá a recurrir a Rita para que le traiga su familia de Suiza, a vivir con ella en su mansión, fingiendo ser una prima lejana del ex marido delincuente.
Aunque Rita siga cumpliendo sus deseos, nada impedirá su sospechosa posesividad por los niños, ni celos por los nuevos romances de su viuda.
Por abordar una gama demasiado amplia de temas, deja varios hilos sueltos.
El director francés, Jacques Audiard, quien ni habla español o inglés, es hijo del prolífico guionista Michael Audiard (Taxi para Tobruk (1961), Los Miserables (1958), Un Mono en Invierno (1962), etc.
Como guionista se voló en su propia fantasía sobre la cultura mexicana. Intentó emular aquellos dramas cuyos personajes irrumpen cantando sus pensamientos, o emociones, al modo de Bollywood, Los Paraguas de Cherburgo o The Wall, pero sin la natural simbiosis de aquellos. Se resiente, entonces, sólo como una interrupción del relato, o como discordia estilística en un ambiente sórdido y corrupto.
La fotografía tiene indudable belleza, como también una minuciosa edición coreográfica.
Por carecer de mayor tensión y conflicto, aunque las actrices intentan dar lo mejor de sí, a ratos se siente plana y larga.
Destacamos el manejo de matices de Zoe Saldaña, como Rita. Lamentamos la incómoda pronunciación castellana de Selena Gómez, y celebramos el natural carisma de Adriana Paz como Epifanía.
Se siente postiza la última secuencia de la procesión para una Santa - ¿de los narcos?- quizás, pero poco aporta a la ya recargada película que termina sonando casi moralista.
Tal vez hubo demasiados cocineros para una sola cocina.
Emilia Pérez no existe, pero representa la historia de muchos(as).
LA MORALEJA PARECIERA SER QUE JAMÁS PODREMOS DESPRENDERNOS DEL PASADO, NI CAMBIAR QUIENES SOMOS O LO QUE ANHELAMOS SER.
Ficha técnica
2024 - 2,12 hrs. Tragicomedia, crimen, musical
2024 - 2,12 hrs. Tragicomedia, crimen, musical
Francia, México, Bélgica
Fotografía: Paul Guilhaume
Edición: Juliette Welfling
Música: Camille, Clément Ducol
Diseño Prod.: Emmanuelle Duplay
Guion: Jacques Audiard, Thomas Bidegain
Actores: Carla Sofía Gascón, Zoe Saldaña, Selena Gómez
Director: Jacques Audiard
miércoles, 22 de enero de 2025
Emilia Pérez - Por Carlos Correa Acuña
¡Sustantiva!
Desde el cuadro inicial, “Emilia Pérez” es una película que traspasa fronteras. Adoptando múltiples formas, la música, el canto y las coreografías transitan a través de pasajes declamados, lo que se logra entender bien cuando descubrimos que la idea original tiene su base en un libreto para ópera del director Jacques Audiard.
Permanentemente estamos observando contrastes. No solo lo valórico y lo ético está presente, también existe un clarooscuro persistente que abarca muchos de los temas actuales, como las operaciones de los cárteles de la droga, el inmenso poder del dinero, el apego y el desapego familiar, el desarrollo profesional, los sueños e ideales y las frustraciones personales más íntimas y profundas.
¿Después de este brevísimo contexto general, de qué se trata, entonces, “Emilia Pérez”?
En México, hoy en día, la joven abogada Rita Mora Castro -Zoe Saldaña-, se encuentra al amparo de un estudio jurídico que está más preocupado de blanquear a sus clientes que de luchar por hacer justicia. Claramente decepcionada, su vida toma un giro radical cuando recibe una llamada del jefe máximo de un prominente cártel. Se trata de Juan "Manitas" del Monte -Karla Sofía Gascón-, quien quiere desaparecer para retirarse del negocio. ¿La fórmula? Transformarse en la mujer que siempre ha querido ser.
Cuando los recursos son ilimitados -y vaya que lo son-, el desafío no pareciera ser tan complejo. En esta transición, breves momentos musicales funcionan como el pensamiento hablado de los protagonistas. Las preguntas asaltan con delicadeza y premura. ¿Por qué Rita es la elegida para colaborar? Se trata de cambiar para dejar atrás, pero, ¿cuál es la verdadera razón que hay detrás? La respuesta no tarda en llegar cuando ya está todo arreglado y “Manitas” canta con el alma, con estilo limpio, angelical y radical, su deseo más profundo: “ser ella.”
Cuando parece que se acaba la misión, avanzamos cuatro años, y observamos un nuevo comienzo. Otra vida, otro rumbo, otras motivaciones, un mundo diferente que cobija nuevas esperanzas para todos. Emilia Pérez logra encontrar su lugar en el mundo: ayudar a otros a través de “La Lucecita”, fundación destinada a encontrar a cientos de desaparecidos, víctimas de enfrentamientos entre cárteles. Los números musicales se suceden, todos estupendos, con letras significativas y discursos llenos de sentido.
El tercio final de la cinta es impredecible. Sabemos que algo está por suceder, pero no sabemos desde dónde llegará. Los caminos son muchos, y las zonas vulnerables, infinitas. El giro no lo vemos venir, nos pilla desprevenidos y nos sorprende. Es parte de la magia de la cinta si estamos entregados a ella, porque en ese momento ya deberíamos ir de la mano como acompañantes privilegiados de un viaje desconcertante cuyo destino final es absolutamente incierto.
Excelente dirección de Jacques Audiard. Todo el material fluye en forma natural. Corre muy rápido el metraje, no hay desperdicio y tampoco encontramos nada que esté de más. De hecho, el ritmo es frenético de comienzo a fin, sin perder nunca el sentido de unidad. Para tener el título de musical resulta bastante extraña esta cinta, porque la sensación que queda al final es haber visto un thriller dramático, más que una obra con la música como centro de atención.
Grandísimas actuaciones de Karla Sofía Gascón y Zoe Saldaña, quienes sostienen cada gramo de la cinta con un peso dramático notable. Solo un pasito más atrás, Selena Gómez se las arregla para ser contraparte y aparecer en momentos inesperados interpretando a la mujer de “Manitas”, la madre de sus hijos. Un sólido elenco de secundarios completa un coro sin puntos bajos, en una cinta que, desde el punto de vista de la producción, resulta simplemente magnífica.
“Emilia Pérez” no solo hay que verla, sino que debemos interpretarla y quizá reinterpretarla también. No se trata de que contenga más o menos violencia, ni tampoco que sea una caricatura sobre el México actual. No; va mucho más allá que eso. Es una cinta que habla tanto de anhelos y transformaciones como de frustraciones y culpas. El efecto que consigue es bastante impresionante, porque no sabemos cómo ni por qué despierta nuestra empatía. ¿Se puede escapar del pasado y del presente? ¿Cuán cerca o cuán lejos puede estar la redención para un alma angustiada y desesperada? Podemos ser solo observadores o bien involucrarnos activamente en esta disyuntiva existencial. La decisión es nuestra, solo nuestra.
“Emilia Pérez” obliga a optar, a tomar partido y a discernir. Es posible que nos quedemos mucho tiempo con esta cinta, analizando y procesando sus temas una y otra vez, porque está claro que no pretende ser solo un filme de entretención. “Emilia Pérez” es vivencia pura, una experiencia inmersiva que no podemos dejar pasar.
¡Imperdible!
Ficha técnica
Título original: Emilia Pérez
Año: 2024
Duración: 132 minutos
País: Francia
Género: Thriller. Musical. Drama | Transexualidad / transgénero. Crimen. Drogas
Compañías: Coproducción Francia-México; Why Not Productions, Page 114, Pathé, France 2 Cinema, Saint Laurent, Pimienta Films, Zima Entertainment. Distribuidora: Pathé
Guion: Jacques Audiard. Novela: Boris Razon
Música: Clément Ducol, Camille
Fotografía: Paul Guilhaume
Reparto: Zoe Saldaña, Karla Sofía Gascón, Selena Gomez, Adriana Paz, Mark Ivanir, Édgar Ramírez.
Dirección: Jacques Audiard
Desde el cuadro inicial, “Emilia Pérez” es una película que traspasa fronteras. Adoptando múltiples formas, la música, el canto y las coreografías transitan a través de pasajes declamados, lo que se logra entender bien cuando descubrimos que la idea original tiene su base en un libreto para ópera del director Jacques Audiard.
Permanentemente estamos observando contrastes. No solo lo valórico y lo ético está presente, también existe un clarooscuro persistente que abarca muchos de los temas actuales, como las operaciones de los cárteles de la droga, el inmenso poder del dinero, el apego y el desapego familiar, el desarrollo profesional, los sueños e ideales y las frustraciones personales más íntimas y profundas.
¿Después de este brevísimo contexto general, de qué se trata, entonces, “Emilia Pérez”?
En México, hoy en día, la joven abogada Rita Mora Castro -Zoe Saldaña-, se encuentra al amparo de un estudio jurídico que está más preocupado de blanquear a sus clientes que de luchar por hacer justicia. Claramente decepcionada, su vida toma un giro radical cuando recibe una llamada del jefe máximo de un prominente cártel. Se trata de Juan "Manitas" del Monte -Karla Sofía Gascón-, quien quiere desaparecer para retirarse del negocio. ¿La fórmula? Transformarse en la mujer que siempre ha querido ser.
Cuando los recursos son ilimitados -y vaya que lo son-, el desafío no pareciera ser tan complejo. En esta transición, breves momentos musicales funcionan como el pensamiento hablado de los protagonistas. Las preguntas asaltan con delicadeza y premura. ¿Por qué Rita es la elegida para colaborar? Se trata de cambiar para dejar atrás, pero, ¿cuál es la verdadera razón que hay detrás? La respuesta no tarda en llegar cuando ya está todo arreglado y “Manitas” canta con el alma, con estilo limpio, angelical y radical, su deseo más profundo: “ser ella.”
Cuando parece que se acaba la misión, avanzamos cuatro años, y observamos un nuevo comienzo. Otra vida, otro rumbo, otras motivaciones, un mundo diferente que cobija nuevas esperanzas para todos. Emilia Pérez logra encontrar su lugar en el mundo: ayudar a otros a través de “La Lucecita”, fundación destinada a encontrar a cientos de desaparecidos, víctimas de enfrentamientos entre cárteles. Los números musicales se suceden, todos estupendos, con letras significativas y discursos llenos de sentido.
El tercio final de la cinta es impredecible. Sabemos que algo está por suceder, pero no sabemos desde dónde llegará. Los caminos son muchos, y las zonas vulnerables, infinitas. El giro no lo vemos venir, nos pilla desprevenidos y nos sorprende. Es parte de la magia de la cinta si estamos entregados a ella, porque en ese momento ya deberíamos ir de la mano como acompañantes privilegiados de un viaje desconcertante cuyo destino final es absolutamente incierto.
Excelente dirección de Jacques Audiard. Todo el material fluye en forma natural. Corre muy rápido el metraje, no hay desperdicio y tampoco encontramos nada que esté de más. De hecho, el ritmo es frenético de comienzo a fin, sin perder nunca el sentido de unidad. Para tener el título de musical resulta bastante extraña esta cinta, porque la sensación que queda al final es haber visto un thriller dramático, más que una obra con la música como centro de atención.
Grandísimas actuaciones de Karla Sofía Gascón y Zoe Saldaña, quienes sostienen cada gramo de la cinta con un peso dramático notable. Solo un pasito más atrás, Selena Gómez se las arregla para ser contraparte y aparecer en momentos inesperados interpretando a la mujer de “Manitas”, la madre de sus hijos. Un sólido elenco de secundarios completa un coro sin puntos bajos, en una cinta que, desde el punto de vista de la producción, resulta simplemente magnífica.
“Emilia Pérez” no solo hay que verla, sino que debemos interpretarla y quizá reinterpretarla también. No se trata de que contenga más o menos violencia, ni tampoco que sea una caricatura sobre el México actual. No; va mucho más allá que eso. Es una cinta que habla tanto de anhelos y transformaciones como de frustraciones y culpas. El efecto que consigue es bastante impresionante, porque no sabemos cómo ni por qué despierta nuestra empatía. ¿Se puede escapar del pasado y del presente? ¿Cuán cerca o cuán lejos puede estar la redención para un alma angustiada y desesperada? Podemos ser solo observadores o bien involucrarnos activamente en esta disyuntiva existencial. La decisión es nuestra, solo nuestra.
“Emilia Pérez” obliga a optar, a tomar partido y a discernir. Es posible que nos quedemos mucho tiempo con esta cinta, analizando y procesando sus temas una y otra vez, porque está claro que no pretende ser solo un filme de entretención. “Emilia Pérez” es vivencia pura, una experiencia inmersiva que no podemos dejar pasar.
¡Imperdible!
Ficha técnica
Título original: Emilia Pérez
Año: 2024
Duración: 132 minutos
País: Francia
Género: Thriller. Musical. Drama | Transexualidad / transgénero. Crimen. Drogas
Compañías: Coproducción Francia-México; Why Not Productions, Page 114, Pathé, France 2 Cinema, Saint Laurent, Pimienta Films, Zima Entertainment. Distribuidora: Pathé
Guion: Jacques Audiard. Novela: Boris Razon
Música: Clément Ducol, Camille
Fotografía: Paul Guilhaume
Reparto: Zoe Saldaña, Karla Sofía Gascón, Selena Gomez, Adriana Paz, Mark Ivanir, Édgar Ramírez.
Dirección: Jacques Audiard
martes, 21 de enero de 2025
La tumba de las luciérnagas - Por Carlos Correa Acuña
Sinopsis: Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Seita y Setsuko son hijos de un oficial de la marina japonesa que viven en Kobe. Un día, durante un bombardeo, no consiguen llegar a tiempo al búnker donde su madre los espera. Cuando después buscan a su madre, la encuentran malherida en la escuela, que ha sido convertida en un hospital de urgencia.
Es muy difícil decir que es hermosa una película tan desgarradora. La emoción se traspasa desde las primeras escenas, y la tristeza no se puede evadir en ningún momento. Son muchas las razones del éxito obtenido por esta delicada animación dirigida por Isao Takahata, en su primera colaboración con Studio Ghibli, siendo además el tercer largometraje de la compañía.
Lo primero que llama la atención es la sencillez del relato en esta cinta basada en la novela homónima de Akiyuki Nosaka, publicada en 1967, inspirada en sus propias experiencias durante la guerra. Siendo un filme del año 1988, se siente totalmente actual y vigente, justamente porque la austeridad de los elementos utilizados la circunscribe perfectamente al tiempo retratado.
Un segundo punto que denota madurez y sabiduría, es la representación de sus personajes. Con trazos muy definidos, cada uno tiene la profundidad necesaria para que se comprenda su rol en la historia Sin exagerar nada, y gracias a su majestuosa limpieza, aquella premisa “menos es más”, funciona a la perfección en una obra audiovisual que se siente completa, tanto desde el punto de vista de su argumento como por su ejecución final.
La música es otro elemento que resulta tan destacado como emotivo. Finas líneas melódicas junto a secciones más rítmicas van alternando los diferentes estados de ánimo de los protagonistas. La ausencia de sonido también marca varias escenas, tal como lo hacen esos sonidos de aviones, de incendios y de los atroces bombardeos.
Es notable cómo una película animada como esta consigue ser antibélica. Mostrarnos otra perspectiva para lograr nuestra empatía a través de una historia particular, sencillamente estremece. Claro, como no generaliza, sino que nos imbuye en detalles peculiares, entramos directamente a la dimensión más profunda que encierra la brutalidad de la guerra, ese aspecto que muchas veces pasamos por alto, o simplemente escondemos para no cuestionarnos y no sufrir por ello.
“La tumba de las luciérnagas” es imperdible. Tan vigente como hace 37 años, es un verdadero lujo disfrutar de su reestreno en cines. Oportunidades como esta no se pueden dejar pasar, ya que vivirlas y revivirlas es mágico. Anímese y vaya al cine más cercano. ¡No se arrepentirá!
Ficha técnica
Título original: Hotaru no Haka
Año: 1988
Duración: 93 minutos
País: Japón
Compañías: Studio Ghibli
Género: Animación. Drama. Bélico | II Guerra Mundial. Infancia. Familia. Animación para adultos. Película de culto
Guion: Isao Takahata. Novela: Akiyuki Nosaka
Reparto: Animación
Música: Michio Mamiya
Fotografía: Animación, Nobuo Koyama
Dirección: Isao Takahata
Es muy difícil decir que es hermosa una película tan desgarradora. La emoción se traspasa desde las primeras escenas, y la tristeza no se puede evadir en ningún momento. Son muchas las razones del éxito obtenido por esta delicada animación dirigida por Isao Takahata, en su primera colaboración con Studio Ghibli, siendo además el tercer largometraje de la compañía.
Lo primero que llama la atención es la sencillez del relato en esta cinta basada en la novela homónima de Akiyuki Nosaka, publicada en 1967, inspirada en sus propias experiencias durante la guerra. Siendo un filme del año 1988, se siente totalmente actual y vigente, justamente porque la austeridad de los elementos utilizados la circunscribe perfectamente al tiempo retratado.
Un segundo punto que denota madurez y sabiduría, es la representación de sus personajes. Con trazos muy definidos, cada uno tiene la profundidad necesaria para que se comprenda su rol en la historia Sin exagerar nada, y gracias a su majestuosa limpieza, aquella premisa “menos es más”, funciona a la perfección en una obra audiovisual que se siente completa, tanto desde el punto de vista de su argumento como por su ejecución final.
La música es otro elemento que resulta tan destacado como emotivo. Finas líneas melódicas junto a secciones más rítmicas van alternando los diferentes estados de ánimo de los protagonistas. La ausencia de sonido también marca varias escenas, tal como lo hacen esos sonidos de aviones, de incendios y de los atroces bombardeos.
Es notable cómo una película animada como esta consigue ser antibélica. Mostrarnos otra perspectiva para lograr nuestra empatía a través de una historia particular, sencillamente estremece. Claro, como no generaliza, sino que nos imbuye en detalles peculiares, entramos directamente a la dimensión más profunda que encierra la brutalidad de la guerra, ese aspecto que muchas veces pasamos por alto, o simplemente escondemos para no cuestionarnos y no sufrir por ello.
“La tumba de las luciérnagas” es imperdible. Tan vigente como hace 37 años, es un verdadero lujo disfrutar de su reestreno en cines. Oportunidades como esta no se pueden dejar pasar, ya que vivirlas y revivirlas es mágico. Anímese y vaya al cine más cercano. ¡No se arrepentirá!
Ficha técnica
Título original: Hotaru no Haka
Año: 1988
Duración: 93 minutos
País: Japón
Compañías: Studio Ghibli
Género: Animación. Drama. Bélico | II Guerra Mundial. Infancia. Familia. Animación para adultos. Película de culto
Guion: Isao Takahata. Novela: Akiyuki Nosaka
Reparto: Animación
Música: Michio Mamiya
Fotografía: Animación, Nobuo Koyama
Dirección: Isao Takahata
lunes, 20 de enero de 2025
Los Winchester - Por Jackie O.
"El negocio familiar"
Sinopsis: La historia de amor de cómo John Winchester conoció a Mary Campbell, y se lo jugó todo, no solo para salvar su amor, sino al mundo entero.
Quienes disfrutamos las 15 temporadas de "Supernatural" quedamos con ganas de más (o quienes vieron menos temporadas, también). Si no sabes a qué me refiero, te dejo este enlace donde resumo la serie "Sobrenatural"
En dicha serie conocimos varios personajes que se nos hicieron muy familiares por aparecer constantemente, y de los cuales se puede realizar su propia película (spin off), y qué decir de Sam y Dean, rompieron muchos corazones.
Pero consideraron que los más atractivos para plasmar su historia eran los padres de estos chicos guapos, y de cómo se formó este negocio familiar, de cazadores de monstruos.
Todo sucede en el año 1972. John Winchester, un joven que viene llegando de la guerra a su pueblo natal, que no tiene idea qué hace su padre cuando desaparece de casa. Lo único claro es que su destino no era volver ahí, pero la carta entregada por un extraño, que proviene supuestamente de su padre, le indica que debe volver a su pueblo a buscarlo. Su padre está desaparecido desde hace tiempo, dejó el hogar para ir a cazar demonios. John no sabe y lo extraña, por eso vuelve y conoce a Mary Colman accidentalmente. Ahí comienza una serie de coincidencias entre ambos en este pequeño pueblo. Más aún, cuando sus padres están desaparecidos por el mismo trabajo, Mary lo sabe por que ella fue criada como cazadora, no así John, quien recién está abriéndose paso a ello gracias a Mary y sus extraños amigos.
Una serie que solo quedó en su primera temporada. No hubo presupuesto o interés para hacer una segunda. Quién sabe.
Pero tal vez la primera temporada tuvo muchos capítulos, y deberían rematarla con una segunda temporada más corta, a la que tendrían que hacerle muchos ajustes. Los protagonistas y los secundarios no son carismáticos, no es fácil poder empatizar con ellos. Las historias en que se basan, principalmente en buscar a los padres, con monstruos que van apareciendo en el momento, principalmente los Akrida (unos bichos gigantes con una líder que quiere acabar el mundo), no convencen al cien por ciento. Las peleas se preocupan más de su coreografía algo falsa, que en esforzarse para que se vean más reales.
El vestuario y el peinado son buenos y bien ambientados en los 70, así como los detalles en decorados.
En los capítulos 8, 12 y 13 hay unos cameos, que harán que los fans de Sobrenatural estallemos en llamas, y queramos más, así que nos acomodamos en nuestros asientos porque la atención empieza con más fuerza, de lo débil que venía siendo la historia. Lástima que sucede al final.
¿Para ver esta serie, es necesario ver Supernatural? No es tan necesario. Tal vez la disfrutas si te gusta la fantasía de terror, sin exigir tanto.
Pero sobre los cameos y algunos nombres que se mencionan, no los disfrutarás como quienes vimos Sobrenatural.
Amor, amistad, el bien y el mal en una historia de aventura y fantasía.
Disponible en MAX.
Ficha técnica
Protagonistas: Drake Rodger, Meg Donnelly, Jojo Fleites, Nida Khurshid, Demetria McKinney, Bianca Kajlich
Narrador: Jensen Ackles
Episodios: 13
Primera emisión 11.10. 2022
Última emisión 07 03. 2023
Sinopsis: La historia de amor de cómo John Winchester conoció a Mary Campbell, y se lo jugó todo, no solo para salvar su amor, sino al mundo entero.
Quienes disfrutamos las 15 temporadas de "Supernatural" quedamos con ganas de más (o quienes vieron menos temporadas, también). Si no sabes a qué me refiero, te dejo este enlace donde resumo la serie "Sobrenatural"
En dicha serie conocimos varios personajes que se nos hicieron muy familiares por aparecer constantemente, y de los cuales se puede realizar su propia película (spin off), y qué decir de Sam y Dean, rompieron muchos corazones.
Pero consideraron que los más atractivos para plasmar su historia eran los padres de estos chicos guapos, y de cómo se formó este negocio familiar, de cazadores de monstruos.
Todo sucede en el año 1972. John Winchester, un joven que viene llegando de la guerra a su pueblo natal, que no tiene idea qué hace su padre cuando desaparece de casa. Lo único claro es que su destino no era volver ahí, pero la carta entregada por un extraño, que proviene supuestamente de su padre, le indica que debe volver a su pueblo a buscarlo. Su padre está desaparecido desde hace tiempo, dejó el hogar para ir a cazar demonios. John no sabe y lo extraña, por eso vuelve y conoce a Mary Colman accidentalmente. Ahí comienza una serie de coincidencias entre ambos en este pequeño pueblo. Más aún, cuando sus padres están desaparecidos por el mismo trabajo, Mary lo sabe por que ella fue criada como cazadora, no así John, quien recién está abriéndose paso a ello gracias a Mary y sus extraños amigos.
Una serie que solo quedó en su primera temporada. No hubo presupuesto o interés para hacer una segunda. Quién sabe.
Pero tal vez la primera temporada tuvo muchos capítulos, y deberían rematarla con una segunda temporada más corta, a la que tendrían que hacerle muchos ajustes. Los protagonistas y los secundarios no son carismáticos, no es fácil poder empatizar con ellos. Las historias en que se basan, principalmente en buscar a los padres, con monstruos que van apareciendo en el momento, principalmente los Akrida (unos bichos gigantes con una líder que quiere acabar el mundo), no convencen al cien por ciento. Las peleas se preocupan más de su coreografía algo falsa, que en esforzarse para que se vean más reales.
El vestuario y el peinado son buenos y bien ambientados en los 70, así como los detalles en decorados.
En los capítulos 8, 12 y 13 hay unos cameos, que harán que los fans de Sobrenatural estallemos en llamas, y queramos más, así que nos acomodamos en nuestros asientos porque la atención empieza con más fuerza, de lo débil que venía siendo la historia. Lástima que sucede al final.
¿Para ver esta serie, es necesario ver Supernatural? No es tan necesario. Tal vez la disfrutas si te gusta la fantasía de terror, sin exigir tanto.
Pero sobre los cameos y algunos nombres que se mencionan, no los disfrutarás como quienes vimos Sobrenatural.
Amor, amistad, el bien y el mal en una historia de aventura y fantasía.
Disponible en MAX.
Ficha técnica
Protagonistas: Drake Rodger, Meg Donnelly, Jojo Fleites, Nida Khurshid, Demetria McKinney, Bianca Kajlich
Narrador: Jensen Ackles
Episodios: 13
Primera emisión 11.10. 2022
Última emisión 07 03. 2023
sábado, 18 de enero de 2025
El hombre elefante - Por Jackie O.
"La humanidad bella y perversa"
El doctor Frederick Treves (Anthony Hopkins), un cirujano del Royal London Hospital, realiza una visita a un circo ambulante de época victoriana. La policía está cerrando una «parada de los monstruos» gestionada por el brutal Bytes (Freddie Jones), que expone de forma ilegal a John Merrick (John Hurt). Merrick, encerrado en una jaula, esconde su deformidad bajo una manta vieja y sucia. Bytes declara que es un retrasado mental y lo mantiene encerrado en condiciones precarias. Treves, intrigado por «el fenómeno», consigue llegar hasta Bytes para ver el espectáculo a puerta cerrada, emocionándose con la visión. Convence a Bytes, pagando, para que le deje llevárselo al hospital.
Una historia basada en un hecho real que se llevó a la pantalla, con un elenco formidable. El resultado fue fabuloso. Gran acierto hacerla en blanco y negro, llevándonos a una época ni tan lejana. Un vestuario fabuloso. Una humanidad que te rompe el alma.
El doctor Frederick Treves (Anthony Hopkins), un cirujano del Royal London Hospital, realiza una visita a un circo ambulante de época victoriana. La policía está cerrando una «parada de los monstruos» gestionada por el brutal Bytes (Freddie Jones), que expone de forma ilegal a John Merrick (John Hurt). Merrick, encerrado en una jaula, esconde su deformidad bajo una manta vieja y sucia. Bytes declara que es un retrasado mental y lo mantiene encerrado en condiciones precarias. Treves, intrigado por «el fenómeno», consigue llegar hasta Bytes para ver el espectáculo a puerta cerrada, emocionándose con la visión. Convence a Bytes, pagando, para que le deje llevárselo al hospital.
Una historia basada en un hecho real que se llevó a la pantalla, con un elenco formidable. El resultado fue fabuloso. Gran acierto hacerla en blanco y negro, llevándonos a una época ni tan lejana. Un vestuario fabuloso. Una humanidad que te rompe el alma.
La historia de un hombre que nació deforme, y fue objeto de tortura por parte de un inescrupuloso que lo utilizaba en su circo de “curiosidades monstruosas”. Hasta que un día, un médico lo encontró y quiso hacer algo bueno para él. Se compadeció de su estado y de su vida, lo sacó de ese mundo ruin creyendo que lo llevaba a uno mejor, pero no fue así. El ser humano cuando quiere ser malo, lo es, en cualquier estado.
Nunca se aceptará lo diferente, siempre habrá personas que pondrán trabas en vez de buscar soluciones o simplemente aceptar. A veces cuesta, pero hay que hacerlo.
Una historia muy humana, donde el verdadero monstruo es el mismo ser humano.
Maravillosa película, con un guion emotivo, escenas desgarradoras, actuaciones buenísimas, edición perfecta.
Una película reflexiva que nos permitirá sentir y ser unos mejores seres humanos dignos de comprensión, piedad y perdón. El hombre elefante fue candidata para ocho premios Óscar, empatando con Toro salvaje en la 53.ª edición de los premios de la Academia, sin embargo, la película no ganó ninguno.
Ganó el premio BAFTA a mejor película, así como otros dos premios al mejor actor (John Hurt), y al mejor diseño de producción, y fue candidata a otras cuatro categorías, así como merecedora a otros premios.
La película está reconocida por el American Film Institute en estas listas:
2005: AFI's 100 años... 100 frases:
«no soy un animal, soy un ser humano, soy un hombre»
Disponible en YouTube.
Ficha técnica
The Elephant Man
Dirección: David Lynch
Guion: David Lynch, Christopher De Vore y Eric Bergren
Música: John Morris
Maquillaje: Christopher Tucker
Fotografía: Freddie Francis
Vestuario: Patricia Norris
EEUU. 1980.
Género: Cine biográfico y drama
Duración 124 minutos
Nunca se aceptará lo diferente, siempre habrá personas que pondrán trabas en vez de buscar soluciones o simplemente aceptar. A veces cuesta, pero hay que hacerlo.
Una historia muy humana, donde el verdadero monstruo es el mismo ser humano.
Maravillosa película, con un guion emotivo, escenas desgarradoras, actuaciones buenísimas, edición perfecta.
Una película reflexiva que nos permitirá sentir y ser unos mejores seres humanos dignos de comprensión, piedad y perdón. El hombre elefante fue candidata para ocho premios Óscar, empatando con Toro salvaje en la 53.ª edición de los premios de la Academia, sin embargo, la película no ganó ninguno.
Ganó el premio BAFTA a mejor película, así como otros dos premios al mejor actor (John Hurt), y al mejor diseño de producción, y fue candidata a otras cuatro categorías, así como merecedora a otros premios.
La película está reconocida por el American Film Institute en estas listas:
2005: AFI's 100 años... 100 frases:
«no soy un animal, soy un ser humano, soy un hombre»
Disponible en YouTube.
Ficha técnica
The Elephant Man
Dirección: David Lynch
Guion: David Lynch, Christopher De Vore y Eric Bergren
Música: John Morris
Maquillaje: Christopher Tucker
Fotografía: Freddie Francis
Vestuario: Patricia Norris
EEUU. 1980.
Género: Cine biográfico y drama
Duración 124 minutos
viernes, 17 de enero de 2025
El silencio de Marcos Tremmer - Por Carlos Correa Acuña
Sinopsis: Marcos Tremmer -Benjamín Vicuña-, es un exitoso publicista uruguayo que vive en Madrid, locamente enamorado de su mujer, Lucía. Un día, Marcos descubre que una enfermedad letal acabará con su vida en pocos meses. Para proteger a Lucía -Adriana Ugarte-, del que, por seguro, será un inmenso sufrimiento, toma una decisión arriesgada: ocultar la situación y alejarla.
Interesante historia es la que presenta esta película dirigida por Miguel Ángel García de la Calera, sin embargo su ejecución y desarrollo resultan un tanto débiles. Los nudos de conflicto, que son evidentes desde el momento que conocemos la premisa, no se consolidan lo suficiente y terminan por diluirse progresivamente, haciendo predecible cada una de las situaciones representadas. Por ejemplo, tenemos varias escenas que se ven forzadas, sin fluidez, tal vez producto de un exceso de edición sobre las mismas. Tampoco aporta el ritmo narrativo, parsimonioso en general, a lo que se suma una cierta desconexión de su protagonista y algunas carencias dramáticas de su contraparte femenina.
Mencionado lo anterior, prefiero ahondar en el análisis del tema de fondo que nutre esta idílica historia de amor que se ve abruptamente cercenada por un brutal diagnóstico médico.
Bien sabemos lo que significa la palabra cáncer. Está asociada a la muerte, sin lugar a dudas, a pesar de que los tratamientos actuales tienen cada vez mayor efectividad y mejores pronósticos de supervivencia. El tema es que un golpe tan fuerte como el que recibe Marcos, habitualmente se tiende a compartir con las personas más cercanas, especialmente con la pareja, y con los familiares con los que existe un mayor grado de confianza y compromiso.
Pues bien, el caso es que Marcos decide guardárselo para sí mismo y no decirle una sola palabra a Lucía para evitarle cualquier futuro sufrimiento o angustia. Claro, esta decisión está dentro del ámbito y espacio personal del afectado, y la intención de evitarle dolores a otra persona puede ser muy loable. Sin embargo, Marcos va un poco más lejos. No solo calla, sino que, además, asume como propósito distanciar a Lucía, es decir, comportarse de tal modo que ella, en muy poco tiempo, lo termine odiando.
Decidir por otros, ocultando información sensible para evitar angustias, puede ser, tal vez, de las cosas más egoístas que una persona puede hacer. No mostrarnos vulnerables podría ser la principal motivación, para que no nos vean débiles o en un estado deplorable. ¿Pero aquello da derecho a infligirle a la otra persona otro tipo de dolor, usando el mal trato, la indiferencia, o simplemente un marcado desamor? Este es el punto que la película quiere relevar, ya que es un tema sensible y tremendamente actual.
El guion, escrito por Javier Dampierre y Ricardo Urroz, presenta un desarrollo irregular que no permite que la película se sienta consistente en su propuesta. Por el contrario, el comportamiento del metraje se torna errático, tal vez debido, entre otras cosas, a ciertas incoherencias que le restan credibilidad. Por ejemplo, el tema médico del hermano. Sabemos que no es común que un familiar atienda a otro familiar debido a los lazos afectivos que los unen. También conocemos los signos visibles de los tratamientos contra el cáncer, de los que la película se hace bastante cargo, pero que Lucía no ve en ningún momento.
A pesar de todo, “El silencio de Marcos Tremmer” es, de todas maneras, una cinta que debemos ver aunque no alcance un mayor nivel de desarrollo. Además, junto al argumento, podemos agregar el gancho que significa la presencia de Benjamín Vicuña y Adriana Ugarte en los roles protagónicos.
Debo reconocer que el final de la película resulta emotivo. El director Miguel Ángel García de la Calera logra apretar bien las clavijas, justo en el lugar donde se deben fijar, logrando una conclusión inesperada que nos permite quedarnos con una mejor valoración. Aventurando una consideración final, creo que las expectativas le juegan en contra a este trabajo. Tal vez, con menos información, puede ser mejor, ya que con la sensibilidad a flor de piel, nuestros sentidos se agudizan y la vara inmediatamente se sitúa mucho más alta.
Ficha técnica
Título original: El silencio de Marcos Tremmer
Año: 2024
País: España
Duración: 112 minutos
Compañías: Coproducción España-Uruguay-Rep. Dominicana; ICAA, La Higuera Films, La Mayor Cine, Ibermedia, Urugay Audiovisual
Género: Romance. Drama | Drama romántico. Enfermedad
Guion: Javier Dampierre, Ricardo Urroz
Fotografía: Analia Pollio
Reparto: Benjamín Vicuña, Adriana Ugarte, Félix Gómez, Irene García
Dirección: Miguel Ángel García de la Calera
Mencionado lo anterior, prefiero ahondar en el análisis del tema de fondo que nutre esta idílica historia de amor que se ve abruptamente cercenada por un brutal diagnóstico médico.
Bien sabemos lo que significa la palabra cáncer. Está asociada a la muerte, sin lugar a dudas, a pesar de que los tratamientos actuales tienen cada vez mayor efectividad y mejores pronósticos de supervivencia. El tema es que un golpe tan fuerte como el que recibe Marcos, habitualmente se tiende a compartir con las personas más cercanas, especialmente con la pareja, y con los familiares con los que existe un mayor grado de confianza y compromiso.
Pues bien, el caso es que Marcos decide guardárselo para sí mismo y no decirle una sola palabra a Lucía para evitarle cualquier futuro sufrimiento o angustia. Claro, esta decisión está dentro del ámbito y espacio personal del afectado, y la intención de evitarle dolores a otra persona puede ser muy loable. Sin embargo, Marcos va un poco más lejos. No solo calla, sino que, además, asume como propósito distanciar a Lucía, es decir, comportarse de tal modo que ella, en muy poco tiempo, lo termine odiando.
Decidir por otros, ocultando información sensible para evitar angustias, puede ser, tal vez, de las cosas más egoístas que una persona puede hacer. No mostrarnos vulnerables podría ser la principal motivación, para que no nos vean débiles o en un estado deplorable. ¿Pero aquello da derecho a infligirle a la otra persona otro tipo de dolor, usando el mal trato, la indiferencia, o simplemente un marcado desamor? Este es el punto que la película quiere relevar, ya que es un tema sensible y tremendamente actual.
El guion, escrito por Javier Dampierre y Ricardo Urroz, presenta un desarrollo irregular que no permite que la película se sienta consistente en su propuesta. Por el contrario, el comportamiento del metraje se torna errático, tal vez debido, entre otras cosas, a ciertas incoherencias que le restan credibilidad. Por ejemplo, el tema médico del hermano. Sabemos que no es común que un familiar atienda a otro familiar debido a los lazos afectivos que los unen. También conocemos los signos visibles de los tratamientos contra el cáncer, de los que la película se hace bastante cargo, pero que Lucía no ve en ningún momento.
A pesar de todo, “El silencio de Marcos Tremmer” es, de todas maneras, una cinta que debemos ver aunque no alcance un mayor nivel de desarrollo. Además, junto al argumento, podemos agregar el gancho que significa la presencia de Benjamín Vicuña y Adriana Ugarte en los roles protagónicos.
Debo reconocer que el final de la película resulta emotivo. El director Miguel Ángel García de la Calera logra apretar bien las clavijas, justo en el lugar donde se deben fijar, logrando una conclusión inesperada que nos permite quedarnos con una mejor valoración. Aventurando una consideración final, creo que las expectativas le juegan en contra a este trabajo. Tal vez, con menos información, puede ser mejor, ya que con la sensibilidad a flor de piel, nuestros sentidos se agudizan y la vara inmediatamente se sitúa mucho más alta.
Ficha técnica
Título original: El silencio de Marcos Tremmer
Año: 2024
País: España
Duración: 112 minutos
Compañías: Coproducción España-Uruguay-Rep. Dominicana; ICAA, La Higuera Films, La Mayor Cine, Ibermedia, Urugay Audiovisual
Género: Romance. Drama | Drama romántico. Enfermedad
Guion: Javier Dampierre, Ricardo Urroz
Fotografía: Analia Pollio
Reparto: Benjamín Vicuña, Adriana Ugarte, Félix Gómez, Irene García
Dirección: Miguel Ángel García de la Calera
El que Debe Morir - Por Juan Pablo Donoso
Una obra impactante que debió ganar más premios mundiales de los que en su momento recibió.
Si bien responde a una inquietud social/cristiana de los años 50 - por su origen en la novela de Nikos Kazantzakis, la dirección de Jules Dassin, la fotografía, y la solvencia de sus actores - se mantiene vigente hoy día como uno de los grandes filmes del siglo 20.
Por su temática, y denuncia, podríamos hermanarla con la posterior JESÚS DE MONTREAL (1989) de Denys Arcand.
Tras la Primera Guerra Mundial, los aldeanos griegos de un pueblito rural en Creta, presentan cada año un espectáculo con la Pasión de Cristo; lo hacen como inocuo desafío a sus actuales dominadores turcos.
Para ello, el terrateniente (Gert Fröbe) y el Pope ortodoxo (Fernand Ledoux), eligen de entre los campesinos a quienes representarán a los principales personajes bíblicos. Para el rol de Jesús nominan a un joven pastor tartamudo llamado Manolios (Pierre Vaneck), como Judas al carnicero Panagiotaros (Roger Hanin), y como María Magdalena a Katerina, la prostituta del pueblo (Melina Mercouri).
Pero en la víspera de la festividad, irrumpen en la aldea todos los habitantes de otro pueblo cercano - mujeres, ancianos y niños - despojados de sus hogares por turcos menos amables. Vienen guiados por su párroco, el Pope Fotis (Jean Servais), solicitando techo, tierra y comida.
Su aspecto es lamentable y su presencia es inquietante. Acogerlos implicaría ceder alimentos, techos, un terreno baldío para que se instalaran y, lo más peligroso, alterar el frágil equilibrio de convivencia logrado con las autoridades otomanas.
Se plantea un evidente dilema político y de conciencia moral. Habrá que lucubrar motivos para rechazarlos y dejar que sigan vagando por los campos a costa de sus vidas ya maltrechas.
Bastará insuflar el falso rumor de que traen cólera para justificar su expulsión y repudio.
Ante la visión de aquellos pobres desvalidos, en contraste con las comodidades del pueblo, los actores de la representación cuaresmal comienzan a reaccionar, instintivamente, en la vida real como los originales bíblicos.
Si Jesucristo volviera a tiempos como esos, ¿cuál sería su destino? La respuesta que Kazantzakis (cinco veces candidato al Premio Nobel de Literatura) dio en la novela desagradó a tal punto a la Iglesia Griega Ortodoxa que de inmediato lo excomulgó.
Había demasiadas coincidencias entre la vida de Cristo y el motivo de su crucifixión.
Reflejo patente de quienes por intereses mezquinos se amparan en organismos religiosos para condenar, o perjudicar, a quienes podrían amenazar sus míseras glorias personales.
Con la evolución espiritual de cada uno de estos personajes se podrían crear otras películas completas.
Una estocada profunda al convencionalismo protocolar de los ricos y poderosos.
“He venido a traer una espada que - por mi Nombre - separará a padre de hijos y hermanos de hermanos”. Jesús.
Título Original: Celui qui Doit Mourir
Si bien responde a una inquietud social/cristiana de los años 50 - por su origen en la novela de Nikos Kazantzakis, la dirección de Jules Dassin, la fotografía, y la solvencia de sus actores - se mantiene vigente hoy día como uno de los grandes filmes del siglo 20.
Por su temática, y denuncia, podríamos hermanarla con la posterior JESÚS DE MONTREAL (1989) de Denys Arcand.
Tras la Primera Guerra Mundial, los aldeanos griegos de un pueblito rural en Creta, presentan cada año un espectáculo con la Pasión de Cristo; lo hacen como inocuo desafío a sus actuales dominadores turcos.
Para ello, el terrateniente (Gert Fröbe) y el Pope ortodoxo (Fernand Ledoux), eligen de entre los campesinos a quienes representarán a los principales personajes bíblicos. Para el rol de Jesús nominan a un joven pastor tartamudo llamado Manolios (Pierre Vaneck), como Judas al carnicero Panagiotaros (Roger Hanin), y como María Magdalena a Katerina, la prostituta del pueblo (Melina Mercouri).
Pero en la víspera de la festividad, irrumpen en la aldea todos los habitantes de otro pueblo cercano - mujeres, ancianos y niños - despojados de sus hogares por turcos menos amables. Vienen guiados por su párroco, el Pope Fotis (Jean Servais), solicitando techo, tierra y comida.
Su aspecto es lamentable y su presencia es inquietante. Acogerlos implicaría ceder alimentos, techos, un terreno baldío para que se instalaran y, lo más peligroso, alterar el frágil equilibrio de convivencia logrado con las autoridades otomanas.
Se plantea un evidente dilema político y de conciencia moral. Habrá que lucubrar motivos para rechazarlos y dejar que sigan vagando por los campos a costa de sus vidas ya maltrechas.
Bastará insuflar el falso rumor de que traen cólera para justificar su expulsión y repudio.
Ante la visión de aquellos pobres desvalidos, en contraste con las comodidades del pueblo, los actores de la representación cuaresmal comienzan a reaccionar, instintivamente, en la vida real como los originales bíblicos.
Si Jesucristo volviera a tiempos como esos, ¿cuál sería su destino? La respuesta que Kazantzakis (cinco veces candidato al Premio Nobel de Literatura) dio en la novela desagradó a tal punto a la Iglesia Griega Ortodoxa que de inmediato lo excomulgó.
Había demasiadas coincidencias entre la vida de Cristo y el motivo de su crucifixión.
Reflejo patente de quienes por intereses mezquinos se amparan en organismos religiosos para condenar, o perjudicar, a quienes podrían amenazar sus míseras glorias personales.
Con la evolución espiritual de cada uno de estos personajes se podrían crear otras películas completas.
Una estocada profunda al convencionalismo protocolar de los ricos y poderosos.
“He venido a traer una espada que - por mi Nombre - separará a padre de hijos y hermanos de hermanos”. Jesús.
Visible en YouTube.
DESCARNADO TESTIMONIO DE LA HIPOCRESÍA DE QUIENES SÓLO SE DICEN CRISTIANOS. EXTRAORDINARIA.
Mención especial en Cannes (1957). Espiga de Oro Semana Internacional de Cine de Valladolid (1958). Nominada Mejor Película en Premios BAFTA (1958). Críticas eximias en Time y The New Yorker.
Ficha técnica
DESCARNADO TESTIMONIO DE LA HIPOCRESÍA DE QUIENES SÓLO SE DICEN CRISTIANOS. EXTRAORDINARIA.
Mención especial en Cannes (1957). Espiga de Oro Semana Internacional de Cine de Valladolid (1958). Nominada Mejor Película en Premios BAFTA (1958). Críticas eximias en Time y The New Yorker.
Ficha técnica
Título Original: Celui qui Doit Mourir
1957 Drama político, alegoría religiosa Francia, Italia - 2,07 hrs.
Fotografía: Jacques Natteau
Edición: Roger Dwyre, Pierre Gillette
Música: Georges Auric
Diseño Prod: Max Douy
Guion: Ben Barzman, Jules Dassin. Nikos Kazantzakis (novela), André Obey (diálogos)
Actores: Jean Servais, Pierre Vaneck, Melina Mercouri
Director: Jules Dassin
Expiación, deseo y pecado - Por José Luis Nicolás
Es 1935. En una campestre mansión británica, Briony Tallis pasa el verano junto a su hermana Cecilia y sus primos. Briony, con tan solo 13 años de edad, ocupa sus días escribiendo una obra teatral. Sueña con transformarse en dramaturga. Pero algo perturba sus pensamientos: cree que ha visto a Cecilia coquetear con Robbie, el joven jardinero de la casa. Briony no ve nada bueno en la enigmática relación de su hermana con el empleado.
Así comienza Expiación, deseo y pecado, una película de Joe Wright estrenada en 2007. Esta es una adaptación de Atonement, novela creada por Ian McEwan: destacada figura de la narración inglesa contemporánea. El guión fue escrito por Christopher Hampton.
El director apostó por una joven camada de actores talentosos. De este ramillete resaltaron Saoirse Ronan, que interpretó a Briony cuando tenía 13 años de edad; James McAvoy que le dió vida a Robbie; y Keira Knightley en el rol de Cecilia.
Knightley era la carta segura de Wright. La británica, pese a que no pasaba de los 21 años cuando llegó al set de este drama de época, poseía un currículum nada despreciable. Con Joe Wright ya había trabajado en otro éxito sonado: Orgullo y Prejuicio del 2005.
La clave de este relato está en cómo se aborda la noción de realidad: por un lado está aquello que Briony creyó ver, y por otro lado está aquello que Briony dijo haber visto pero realmente no vio.
Expiación, deseo y pecado rescata lo fundamental del “sello McEwan”: explorar las razones de una persona para mentir y arruinarle la vida a otra. El autor de Sábado es un experto en examinar las conciencias de sus personajes, y el guionista Christopher Hampton le hizo merecida justicia con su adaptación.
Lo mejor de esta cinta no es Vanessa Redgrave (encargada de personificar la versión anciana de Briony), sino que radica en motivar una reflexión posterior. Cuando termina Expiación, deseo y pecado comienza otra película con más interrogantes y menos respuestas pero con un escenario definido: nuestro fuero interno.
Disponible en Netflix.
Ficha Técnica
Título original: Atonement
Año: 2007
Duración: 123 minutos
País: Reino Unido
Dirección: Joe Wright
Guión: Christopher Hampton. Novela: Ian McEwan
Reparto: Keira Knightley, James McAvoy, Saoirse Ronan, Ramola Garai, Vanessa Redgrave, Benedict Cumberbatch
Música: Dario Marianelli
Fotografía: Seamus McGarvey
Compañías: Coproducción Reino Unido-Estados Unidos; Working Title Films, Universal Pictures, Studiocanal, Relativity Studios
Así comienza Expiación, deseo y pecado, una película de Joe Wright estrenada en 2007. Esta es una adaptación de Atonement, novela creada por Ian McEwan: destacada figura de la narración inglesa contemporánea. El guión fue escrito por Christopher Hampton.
El director apostó por una joven camada de actores talentosos. De este ramillete resaltaron Saoirse Ronan, que interpretó a Briony cuando tenía 13 años de edad; James McAvoy que le dió vida a Robbie; y Keira Knightley en el rol de Cecilia.
Knightley era la carta segura de Wright. La británica, pese a que no pasaba de los 21 años cuando llegó al set de este drama de época, poseía un currículum nada despreciable. Con Joe Wright ya había trabajado en otro éxito sonado: Orgullo y Prejuicio del 2005.
La clave de este relato está en cómo se aborda la noción de realidad: por un lado está aquello que Briony creyó ver, y por otro lado está aquello que Briony dijo haber visto pero realmente no vio.
Expiación, deseo y pecado rescata lo fundamental del “sello McEwan”: explorar las razones de una persona para mentir y arruinarle la vida a otra. El autor de Sábado es un experto en examinar las conciencias de sus personajes, y el guionista Christopher Hampton le hizo merecida justicia con su adaptación.
Lo mejor de esta cinta no es Vanessa Redgrave (encargada de personificar la versión anciana de Briony), sino que radica en motivar una reflexión posterior. Cuando termina Expiación, deseo y pecado comienza otra película con más interrogantes y menos respuestas pero con un escenario definido: nuestro fuero interno.
Disponible en Netflix.
Ficha Técnica
Título original: Atonement
Año: 2007
Duración: 123 minutos
País: Reino Unido
Dirección: Joe Wright
Guión: Christopher Hampton. Novela: Ian McEwan
Reparto: Keira Knightley, James McAvoy, Saoirse Ronan, Ramola Garai, Vanessa Redgrave, Benedict Cumberbatch
Música: Dario Marianelli
Fotografía: Seamus McGarvey
Compañías: Coproducción Reino Unido-Estados Unidos; Working Title Films, Universal Pictures, Studiocanal, Relativity Studios
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